La historia de las elecciones de 2024 resultó ser notablemente sencilla. En un entorno político en el que la mayoría del electorado pensaba que el país avanzaba en la dirección equivocada, en el que percibía que la economía era deficiente y en el que la mayoría afirmaba que la inflación les había causado graves dificultades, los votantes decidieron echar al partido en el poder que representaba la vicepresidenta Kamala Harris.
Categoría: Economía
KUALA LUMPUR – A pesar de la anterior convergencia de ingresos entre las naciones, muchos países y personas con los ingresos más bajos se están quedando aún más atrás. Peor aún, el número de pobres y hambrientos ha vuelto a aumentar después de disminuir durante décadas.
Algunos fenómenos sociales recientes han trastornado la mente de mucha gente en el campo político de izquierda. Es que hace mucho que habíamos aprendido a comprender que la economía representaba el factor social más relevante para determinar el curso de las transformaciones sociales. Sin embargo, estamos viendo que suceden ciertas cosas que amenazan con colapsar esta idea que hemos estado cultivando durante mucho tiempo.
Las condiciones relativas a política de vivienda que la dirección de Podemos sometió a referéndum de sus bases para apoyar los Presupuestos Generales de Estado y que han sido aprobadas masivamente me parecen una gran equivocación.
Nacimos aquí, donde las masas idolatran a los idiotas y los convierten en héroes ricos (Charles Bukowski)
Parece abrirse un mundo distópico, un mundo en el que el planeta pasa factura en forma de riadas, inundaciones, incendios, desequilibrios demográficos, todo por la acción humana con sus consecuencias letales sobre el clima. Un proceso largo, acumulativo, devastador. En poco tiempo.
A comienzos de noviembre de 2024, el FMI decide crear el vigesimoquinto puesto de director ejecutivo. Ya se hablaba, desde hace más o menos quince años, que se le debía atribuir al África subsahariana un puesto suplementario de director ejecutivo. ¿Es una buena noticia para África? ¿Se beneficiará de una mayor consideración en las instancias del Fondo?
Las tareas de cuidado de otras personas son principalmente llevadas por mujeres sin remuneración. Encarar esa brecha de género ayuda a las familias, a tener una fuerza laboral más saludable, crear empleos y mejorar la productividad, según destaca la Organización Internacional del Trabajo