El presidente de Ecuador, Rafael Correa, anunció el domingo que su gobierno ‘echa al tarro de la basura al neoliberalismo’ con la ejecución del proyecto de economía solidaria. En un acto registrado en el sur de Quito, el mandatario presentó el programa de economía solidaria que, por intermedio de la recientemente creada Subsecretaría de Economía […]
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, anunció el domingo que su gobierno ‘echa al tarro de la basura al neoliberalismo’ con la ejecución del proyecto de economía solidaria.
En un acto registrado en el sur de Quito, el mandatario presentó el programa de economía solidaria que, por intermedio de la recientemente creada Subsecretaría de Economía Social y Solidaria (SESS), entregará microcréditos masivos.
Correa destacó el valor de la economía social y solidaria como propias de la cultura ecuatoriana, y mencionó a la minga (trabajo colectivo) como ejemplo de solidaridad en los pueblos indígenas.
En el acto, el gobernante dijo que ‘estamos aquí terminando la triste noche neoliberal y comenzando este siglo XXI que se caracteriza por la solidaridad’.
El jefe de Estado afirmó que la entrega de microcréditos masivos y otras formas de apoyo solidario como el programa ‘Aliméntate Ecuador’ y el plan de compras públicas se ejecutan ‘sin el apoyo de la burocracia internacional y de la importación de insumos para este tipo de programas de gobierno’.
En el mismo acto, Correa posesionó a Diego Landázuri como viceministro de Economía Social y Solidaria.
Puntualizó que el proyecto de ley para reducir las tasas de interés apunta a ‘cortar los abusos de los grupos de poder’.
Expresó que quienes se oponen al proyecto que fue aprobado en primera discusión por el Congreso, son quienes pretenden controlar los intereses bancarios.
‘Ustedes ven una campaña multimillonaria de la banca; significa que por primera vez se van a regular, de verdad, los excesos de la banca’, dijo Correa, aludiendo a una campaña de medios que hace la Asociación de Bancos Privados para oponerse a la reducción de las tasas de interés y regular el cobro de comisiones.
‘Será la ciudadanía quien decida si les cree o no a los banqueros, quienes ahora son los defensores de los dineros públicos, o a un Gobierno que trata sencillamente de que pare la explotación a los clientes de la banca’, agregó.