Un día después de que la comisión de Política Exterior del Senado reprendiera a John Bolton, embajador de Estados Unidos en la ONU, por no haber podido hacer llegar a buen puerto los planes de Washington, de nuevo el expediente nuclear de Irán ha sido sometido a un debate a puerta cerrada entre los miembros […]
Un día después de que la comisión de Política Exterior del Senado reprendiera a John Bolton, embajador de Estados Unidos en la ONU, por no haber podido hacer llegar a buen puerto los planes de Washington, de nuevo el expediente nuclear de Irán ha sido sometido a un debate a puerta cerrada entre los miembros permanentes del Consejo de Seguridad (CS).
Tras finalizar la reunión, algunos de los embajadores participantes conversaron sobre el texto de la resolución, que al parecer es la misma que la anterior aunque con algunas enmiendas.
Bolton, que además de embajador de EEUU en la ONU también dice ser el sexto diplomático del régimen de Tel Aviv en dicho organismo, dijo ayer viernes en una rueda de prensa que el texto ya está casi ultimado.
Pese al consenso de algunos de los miembros permanentes del CS en torno a este borrador, cada cual sostiene un punto de vista diferente respecto al contenido del texto y al mensaje que se le debe lanzar a Teherán.
Como era de esperar, Rusia acompañó -de la mano de su embajador- a Washington en el último minuto, y considero que el mensaje y el objetivo de este borrador es «una invitación a Irán a la negociación», y, piensa junto a EEUU que es, «una orden vinculante de suspensión del enriquecimiento de uranio.»
Ninguno de los participantes en la sesión a puerta cerrada de los miembros permanentes del CS hablaron de cuándo se iba a someter a votación este borrador contra Irán. La posición de China, al contrario de lo que habían vaticinado algunos analistas, ha sido mucho más estable que la de Rusia.
El texto de la actual resolución no tiene notables diferencias con el que se hizo público hace unos diez días. Quizá, una de las diferencias que más llaman la atención sea que en el nuevo se contempla el dar a Irán hasta el 31 de agosto de plazo para responder al paquete de medidas de incentivos nucleares de la UE, y también el que no se haga ninguna mención del artículo 41 del capítulo séptimo de la Carta Magna de la ONU que prevé la aplicación de sanciones económicas.
Bolton dice que si Irán no responde a este paquete se aislará, y, Vitaly Churkin, embajador ruso, afirma que la intención de Moscú y del CS es consolidar la postura de la Organización Internacional de la Energía Atómica (OIEA) frente a Irán.
Churkin precisó: «El borrador de esta resolución no contempla en absoluto ninguna sanción contra Teherán, ni siquiera se menciona el artículo 41 del capítulo séptimo.»
Añadió a esto que «la resolución es una invitación al diálogo dirigida a Irán, y en ella el CS le pide a los iraníes que suspendan el enriquecimiento de uranio y que responda positivamente al paquete de incentivos presentado por los seis. El CS apoya la decisión de la OIEA.»