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Labatud, homenaje a un terrorista en Puerto Rico

Fuentes: Rebelión

La opinión pública internacional conoció acerca del homenaje que la Cámara de Representantes puertorriqueña ofreció al terrorista y corrupto empresario cubanoamericano, Julio Labatud Escerra, no por la ceremonia realizada en la sede del capitolio colonial, sino por las acciones de numerosos boricuas que protestaron contra el acto. El diario Primera Hora indicó que una concurrida […]

La opinión pública internacional conoció acerca del homenaje que la Cámara de Representantes puertorriqueña ofreció al terrorista y corrupto empresario cubanoamericano, Julio Labatud Escerra, no por la ceremonia realizada en la sede del capitolio colonial, sino por las acciones de numerosos boricuas que protestaron contra el acto.

El diario Primera Hora indicó que una concurrida manifestación en contra del reconocimiento legislativo concluyó en trifulcas dentro del Capitolio puertorriqueño al que fueron enviados fuertes contingentes policiales.

Otros reportes de la prensa boricua indicaban que «los anexionistas ofrecían un homenaje al empresario cubanoamericano Julio Labatud, asociado públicamente con la extrema derecha armada, lo que provocó un pique que degeneró en motín con el saldo de varios lesionados».

¿Quién es Julio Labatud?

Aunque la cúpula procolonial puertorriqueña desee ensalzar a Labatud lo cierto es que dejos de ser un patriota y triunfante empresario, no es más que un temido terrorista.

Expedientes desclasificados del Buró Federal de Investigaciones (FBI) lo vinculan con el asesinato del cubano emigrado Carlos Muñiz Varela el 28 de abril de 1979 y con numerosas actividades de corrupción dentro de Puerto Rico, territorio colonial que forma parte jurídica y políticamente de Estados Unidos.

La información del asesinato fue divulgada por la emisora de Miami, la WDCN el 30 de abril y se la adjudicaba una organización entonces desconocida denominada Comando Cero que además amenazaba con eliminar a otras 74 personas que habían participado meses antes en un diálogo con el gobierno cubano. Muñiz no había participado en las conversaciones.

El primer sospecho del asesinato era Reynol Rodríguez quien en una conferencia de prensa efectuada en Miami en julio de 1979, junto a uno de los fundadores de Alpha 66, Antonio Veciana, reconoció que un fallido atentado contra su persona era una venganza de los comunistas por el asesinato de Muñiz Varela.

Un escrito de Raúl Álzaga, amigo de Carlos, aparecido en la revista Areíto, señala que de Reynol no se volvió a hablar hasta que apareció en una foto durante los juicios en Panamá contra los terroristas Luis Posada Carriles, Gaspar Jiménez Escobedo, Guillermo Novo Sampol y Pedro Remón, este último vinculado a los asesinatos en noviembre de 1979, en Nueva Jersey, de Eulalio Negrín, miembro del Comité de los 75, y (en septiembre de 1980) de Félix García, funcionario de la Misión de Cuba ante las Naciones Unidas.

Documentos desclasificados recientemente por la CIA y el FBI, y obtenidos por el National Security Archive (adscrito a la Universidad George Washington) indican que Reynol Rodríguez era el jefe en Puerto Rico del grupo architerrorista de la derecha cubana conocida como Coordinadora de Organizaciones Revolucionarias Unidas(CORU) y que cuenta a su haber con numerosos crímenes y atentados dinamiteros.

El 4 de septiembre de 1982, el FBI arrestó en la ciudad de Caguas, Puerto Rico, al coronel de la policía, Alejo Maldonado Medina, cuando este cobraba la recompensa pedida por el secuestro del hijo del joyero cubano, Mario Consuegra.

Casi la totalidad de la fianza impuesta a Maldonado (215 000 de 300 000 dólares) fue pagada por Julio Labatud, también ligado estrechamente a Reynol y al semanario La Crónica desde donde se alentaba realizar acciones contra cualquier sospechoso de simpatizar con la revolución cubana.

A través de esta investigación que duró de 1982 a 1987, fueron apresadas más de 40 personas y se hicieron público valiosos documentos que vinculaban a Julio Labatud con el coronel Maldonado y con José Pepe Canosa Rodríguez y Waldo Pimentel Amestoy, fundadores en 1972 del grupo denominado «Los Amigos de la Democracia» que desde Puerto Rico realizaba acciones violentas contra el movimiento de apoyo a Cuba, incluyendo a organizaciones independentistas puertorriqueñas.

Ese grupo actuaba con total impunidad, la División de Homicidios y la División de Inteligencia boricua los protegía.

Varios documentos del FBI demuestran el grado de complicidad en actos delictivos del homenajeado Labatud.

-Formulario tipo 302, del 16-12-85 en Chicago, Illinois, por los agentes especiales del FBI Guadalupe González y Francis Gallegher, en base a una entrevista con el convicto ex coronel Alejo Maldonado. «En la reunión se habló de la necesidad de conseguir un camión para mover los relojes de donde Caballero los tenía para otro sitio (…) Se decidió preguntarle a Julio Labatud, dueño de una floristería llamada Forarte para pedirle el camión. Maldonado entonces fue con Luis Gómez a la floristería. En Florarte, Gómez preguntó a Labatud, en presencia de Maldonado, si podrían tomar prestado el camión para mover el cargamento robado. Aproximadamente dos meses después del robo, Gómez le dijo a Maldonado que él le pagó 8 000 dólares a Julio Labatud por el uso del camión (—) El mismo día, Maldonado habló con Labatud en Florarte o en su casa Río Piedras. Durante la conversación Maldonado le preguntó cuánto Gómez le había dado y Labatud contestó que 8 000 dólares, pero que él se merecía más dinero».

-Formulario tipo 302, del 18-1085, en San Juan, Puerto Rico, por el agente especial del FBI Guadalupe González, en base a una entrevista con el convicto ex jefe de la Oficina de Homicidios de la policía de Puerto Rico, Luis Ramos Grateroles, oficial encargado de dirigir y su0pervisar el esclarecimiento del asesinato de Carlos Muñiz. «Ramos Grateroles declaró que Gómez le indicó que habló con Julio Labatud para ver si ponía un contrato de asesinato a Enrique. Ramos dice que Labatud le dijo luego que él había conseguido a dos individuos para asesinar a Enrique por 25 000 dólares, pero Gómez dio marcha atrás porque pensó que era mucho dinero».

-Formulario tipo 302, del 4-3-86, en San Juan, por el agente especial del FBI Jeffrey S. Hill, en base a una entrevista con el convicto joyero cubano Luis Gómez Ferreiro, responsable en la pandilla de Maldonado, junto a César Caballero, de informar sobre la llegada a Puerto Rico de joyeros procedentes dela ciudad de Nueva York con muestras de prendas para asesinarlos y robarles. «Ellos se encuentran con Labatud en la floristería cuando Torres abandonó su carro y se juntó con Gómez. Labatud manejó su Van hasta el Cantinflas (restaurante) con Gómez y Torres siguiendo en el carro de Gómez. Cuando los relojes fueron cargados en la Van de Labatud, este manejó para su floristería donde los relojes fueron guardados».

-Formulario tipo 302, del 30-4-86, en San Juan, por los agentes especiales del FBI Armando Rodríguez y Guadalupe González, en base a una entrevista con el convicto joyero César Caballero. «Caballero aconsejó a Payo llevarse a la víctima (Armando Consuegra) para que hicieran la llamada telefónica. Caballero aconsejó a Payo y Stevenson que llevaran a Consuegra en la Van y que él iría en su carro. Ellos fueron para el estacionamiento de Florarte y parquearon la Van al lado del teléfono. En la noche del arresto del coronel Maldonado, César Caballero se presentó en la oficina del ex policía y ex abogado Ángel Torres. Las siguientes personas se encontraban en la oficina: la esposa de Maldonado, la hermana de Maldonado, el cuñado de Maldonado, el hijo mayor de Maldonado con su esposa, Julio Labatud, Luis Ramos Grateroles y el socio del bufete de Ángel Torres».

Los documentos hablan por si solo. Labatud, lejos de pagar por los numerosos actos delictivos realizados durante su larga vida de terrorista y contrabandista, ahora recibe un pomposo homenaje encabezado por el alcalde de San Juan, Jorge Santín y representantes del Partido Nuevo Progresista (PNP).

Tras apaciguarse los mítines de repudio con la intervención de la fuerza policial, Lamatud, al agradecer el homenaje de los anexionistas afirmó que «Puerto Rico es ejemplo para América Latina de lo que es la verdadera democracia»

Las palabras huelgan: Otro terrorista y ladrón convertido en prominente empresario cubanoamericano.

Nota: Para la realización de este trabajo se utilizó un artículo aparecido en el sitio Web Areitodigital.com, de Raúl Álzaga Manresa, amigo de Carlos Muñiz y fundador de esa revista y de la Brigada Antonio Maceo.