Los dos países dicen que se tratan de meras «prácticas anuales» pero la demostración de fuerza no ha gustado nada al gobierno de Pyonyang
Corea del Norte celebra varios aniversarios importantes este mes y a menudo los conmemora con grandes pruebas de equipamiento militar.Estas celebraciones tan particulares no han gustado nada a Seúl y Washington, que han desplazado equipos militares cerca de Corea del Norte. En principio, se tratan de «prácticas anuales» de cooperación militar, pero estas maniobras coinciden con un momento de máxima tensión con Kim Jong Un, presidente de Corea del Norte.
La posibilidad de una acción militar estadounidense contra Corea del Norte en respuesta a dichos ensayos ganó fuerza tras los ataques de la semana pasada contra una base en Siria, después de comentarios de altos asesores del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que sugieren que su postura podría estar endureciéndose.
Sin embargo, el enviado nuclear jefe de Corea del Sur, Kim Hong-kyun, afirmó que no hubo menciones de opciones militares en sus conversaciones con el representante especial chino para asuntos de la península de Corea, Wu Dawei.
«Ambas partes acordaron que pese a las advertencias de la comunidad internacional, si Corea del Norte realiza provocaciones estratégicas, como un ensayo nuclear o el lanzamiento de un misil balístico intercontinental, debería haber fuertes medidas adicionales en concordancia con resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU», dijo Kim a periodistas.
El secretario de EE.UU., Rex Tillerson, dijo que el ataque militar de su país contra Siria por su supuesto uso de armas químicas era una advertencia contra otros países, incluyendo a Corea del Norte, de que si representaban un peligro, «era posible una respuesta». El mandatario estadounidense no dudó en señal que EE.UU. pedirá responsabilidades a aquellos que causen «daños a inocentes en cualquier parte del mundo».
«Nosotros nos dedicaremos a pedir responsabilidades a todos los que cometan crímenes contra inocentes en cualquier parte del mundo», destacó Tillerson, según el Twitter oficial del Gobierno de EE.UU.
Pese a la amenaza estadounidense, el Gobierno surcoreano minimizó hoy la posibilidad de que EE.UU ataque de manera preventiva a Corea del Norte, al recordar que Washington apoya la vía pacífica que plantea Seúl para resolver la situación en la península coreana.»No hace falta preocuparse (ante la posibilidad de un ataque preventivo)», aseguró hoy en comparecencia pública el portavoz del Ministerio de Unificación surcoreano, Lee Duck-hang.
El portavoz insistió en la importancia de mantener la paz y la estabilidad en la península coreana mediante una «solución meditada» para los desafíos que plantea el programa nuclear y de misiles norcoreano, según confirmó a Efe una fuente de esta cartera ministerial. En este sentido, Lee aseguró que Seúl seguirá cooperando y comunicándose estrechamente con Washington.