Respondiendo a las críticas de las naciones en desarrollo, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, retiró o modificó algunas de sus controvertidas propuestas para reestructurar el foro mundial, en especial relacionadas con desarme, mantenimiento de paz y asuntos políticos. Estas propuestas incluían un plan para incluir al Departamento de Asuntos de Desarme de […]
Respondiendo a las críticas de las naciones en desarrollo, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, retiró o modificó algunas de sus controvertidas propuestas para reestructurar el foro mundial, en especial relacionadas con desarme, mantenimiento de paz y asuntos políticos.
Estas propuestas incluían un plan para incluir al Departamento de Asuntos de Desarme de la Secretaría General de la ONU (Organización de las Naciones Unidas) dentro del Departamento de Asuntos Políticos.
También desechó la propuesta de «degradar» al Departamento de Asuntos de Desarme nombrando a su cargo a un asistente del secretario general de menor grado, en vez de un subsecretario general, como actualmente.
Ban descartó además lo que las naciones en desarrollo calificaron de «plazo artificial» para la aprobación de sus sugerencias, y también abandonó su idea de designar un representante especial de la Secretaría General para asuntos de desarme.
Respondiendo a demandas de los países del Sur, el secretario general también desvinculó los actuales nombramientos de funcionarios superiores de sus planes de reforma de la Secretaría.
El Grupo de los 77 (G-77), con 130 miembros, aclaró el mes pasado que no deseaba «tener un desacuerdo político con el secretario general» y que no apoyaba «ningún plazo artificial» sobre sus propuestas.
«El G-77 tiene mucho deseo de apoyar al secretario general y verlo triunfar en sus esfuerzos de reforma», dijo el martes a periodistas el presidente del grupo, el embajador de Pakistán en la ONU, Munir Akram.
Pero subrayó que las naciones del Sur tiene sus propias prioridades. «Nuestra prioridades son prioridades para el desarrollo», afirmó.
Akram dijo que Ban había modificado algunas de sus propuestas tras discusiones con algunos estados miembro y grupos regionales.
«Nuestra preocupación es que se sigan las reglas establecidas», incluyendo la aprobación de las reformas por parte de los comités administrativos y presupuestales. Mientras se respete el proceso, estaremos dispuestos a seguir adelante», agregó.
El embajador de Singapur, Vanu Gopala Menon, dijo que, como resultado de las gestiones de las naciones en desarrollo, el secretario general decidió que la nueva Oficina para Asuntos de Desarme estuviera directamente bajo su tutela, pero con un presupuesto separado.
La Oficina será presidida por un alto representante, quien tendrá el rango de subsecretario general. «En corto tiempo, el secretario general consideró varias de las preocupaciones que habíamos expresado», dijo Menon.
El presidente del Movimiento de No Alineados (NOAL), de 117 países, el embajador de Cuba, Rodrigo Malmierca Díaz, dijo a la Asamblea General que celebraba la decisión de Ban de designar a un subsecretario general a cargo del Departamento de Asuntos de Desarme.
Ban todavía procura una división del Departamento de Operaciones de Mantenimiento de Paz en dos: el Departamento de Operaciones de Paz y el Departamento de Apoyo en el Campo.
Malmierca Díaz subrayó que el NOAL, que provee más de 80 por ciento de los soldados para las fuerzas del foro mundial, desea seguir discutiendo las propuestas en el marco del Comité Especial sobre Operaciones de Mantenimiento de Paz, único ámbito de la ONU con el mandato de revisar estos temas, «como ha sido tradicional en el contexto de reformas».
«Con ese fin, el NOAL quisiera que se enviara una detallada explicación de las propuestas al Comité Especial», dijo el diplomático cubano.
El secretario general, quien procuraba la rápida aprobación de sus propuestas de reforma en la Asamblea General el mes pasado, ahora acepta someterlas al tedioso proceso legislativo intergubernamental en el sistema de al ONU, buscando el aval del Comité Administrativo y Presupuestal y del Comité Asesor sobre Asuntos Administrativos y Presupuestales.
Estos dos órganos, considerados por muchos como el cementerio político de las propuestas controvertidas, también cuentan con el poder para cambiar en forma drástica las sugerencias de Ban, sobre todo en asuntos financieros.
La intención de Ban de saltearse estos procedimientos para una fácil aprobación de sus reformas provocó críticas del embajador de India, Nirupam Sen.
«El secretario general es el funcionario más civil. No es un rey y la Secretaría no es su corte», afirmó el diplomático en una reunión del G-77.