Petras y El Salvador

…el menemismo quiso desintegrar a la izquierda integrándola, como el PRI en México.

-Vázquez Montalbán (Quinteto de Bs. As.)

De nuevo el amigo Petras quiere confundirnos. Ganó el Frente en el Salvador y perdió la derecha, sin embargo, Funes es un periodista que no es de izquierda. «Va a facilitar mayores derechos democráticos, con menos represión contra los sindicatos e individuos. O por lo menos esa es la promesa.»

No es la promesa, es el compromiso con el pueblo.

Funes es tan miembro del FMLN como Schafik Handal, porque para ello no necesita haber sido fundador, con tan solo integrarse como lo hizo, significa que es parte del mismo proyecto. Petras pretende, sin embargo, que Mauricio en su discurso inaugural les diga a los oligarcas, que todavía tienen mucho control del país, que una vez suba les va a quitar sus empresas y las tierras a los terratenientes de Arena, o que va a sacar las compañías gringas, y que quitará el ejército y sus paramilitares para reemplazarlo por los guerrilleros que fueron desmovilizados luego del acuerdo de paz. No, esas cosas no suceden en política de esa forma, quizás en sociología confusionista sí. Y es que ahora mismo, el pueblo salvadoreño ha logrado una victoria por la audacia del Frente al haber sabido mover las fichas políticas para quitar los paramilitares de D´Abuisson poco a poco.

La estructura productiva de ese país hermano no es lo suficientemente fuerte como para autoabastecerse por sí misma, necesita continuar negociando con los Estados Unidos aunque, por supuesto, con otras reglas de juego, con otros controles que no sean los de beneficiar únicamente al poderoso imperio.

No se trata de que «el señor Funes ha sido un candidato con muchos compromisos con el gran capital», por decir en la campaña que estaba más cerca de Lula que de Fidel o Chávez. Es que en política existe eso que se llama táctica y estrategia. En este caso han sido aplicadas con éxito. Es lo que vimos en las calles de San Salvador.

¿Dónde ha estado Petras en las últimas décadas? Después de la experiencia de Chile y el golpe de estado, o de República Dominicana con la elección de Bosch, no se puede estar anunciando así por así que vamos a aplicar una reforma agraria o que vamos a estatizar todo lo que existe en el territorio.

Nuevamente, ojalá me equivoque, interpreto un afán de dividir el movimiento, de hacer creer que Funes es una cosa y el FMLN otra. Si Funes aceptó la presidencia, tiene que entender Petras que no ha sido para que él haga lo que quiera. Toda lógica indica que ha habido una negociación para enrumbar a El Salvador por el camino del socialismo, el único posible para eliminar las desigualdades, esas que tanto se reafirmaron con la aplicación de una política neoliberal.

El fracaso es más que visible, es patético, y eso hizo, junto a un rumbo inteligente del Frente que los salvadoreños hoy los tengan electos y prestos a los cambios que manda el momento. Estas opiniones de Petras van en el mismo sentido que los ataques a Fidel por sus declaraciones sobre las FARC.

La lección del Frente no es sólo para los salvadoreños, es una lección para el resto de la izquierda en América latina. ¿Y qué nos enseñó esta experiencia?

Las principales enseñanzas son:

1- Que hubo una unidad total de todos los grupos de izquierda. Por primera vez, ya no hubo la dispersión que mantenía al Frente en pedazos. Política muy bien orientada con traidores como Villalobos y otros secuaces. Esto fue uno de los mayores logros de Handal quien fue acusado de abandonar los principios revolucionarios cuando impulsaba un cambio de táctica para abandonar ese lenguaje falaz e irreal en que se incurre, ese protagonismo y vanguardismo inútil que sólo ha provocado fracasos en nuestras luchas.

2- Que hubo un rechazo al chantaje de que con un gobierno del Frente en El Salvador no recibiría las remesas desde Disneylandia.

3- Que hubo un trabajo incansable del Frente tanto en función de las elecciones celebradas ahora en marzo como en la formación y acuerdos en programas con Cuba y Venezuela. Como si hubiese estado en el poder, el Frente creó un mecanismo dinámico de trabajo en el que su militancia se mantuvo ocupada y al mismo tiempo sirviendo en los hechos a la gente con los programas de la operación Milagro y otros, aunque con las limitantes de un partido fuera del poder.

4- Que no descuidó en ningún momento los trabajos de formación y capacitación, en consonancia con sus posibilidades.

5- Que buscaron aliados reales y verdaderos al acercarse a Cuba y Venezuela, quienes le dieron la mano en la aplicación de los programas antes señalados. Los aliados, se ha demostrado, no están en Estados Unidos ni en la Unión Europea, prestos a hacer inversiones siempre que puedan sacar las mayores ventajas.

Aunque Mauricio Funes ha militado en el Frente y ha sido en el pasado partidario de la lucha armada, la que el Frente tuvo que aplicar, hoy día el presidente electo no tiene ese discurso, pero tampoco el Frente. No se trata ahora de preparar al pueblo para crear batallones. Ahora se trata de llegar al poder y con la inteligencia debida, se ha logrado. Pero Petras quiere que Funes tenga un discurso duro para demostrar que es de izquierda, y ya nos augura el futuro. «No promete grandes cambios y tampoco los va a realizar.»

Acusa al FMLN de demagogo, cuando se ha demostrado que sus filas sólo han aportado una cantidad enorme de gente que se ha sacrificado al máximo, se atreve a decir que «el FMLN utiliza mucha demagogia. Por lo menos muchos líderes han utilizado un discurso populista…» No estoy diciendo que el Frente sea perfecto, ni que en sus filas queden muchísimos comandantes en jefe, ni que haya errores y fallas, y ¿por qué no habrían de haber?

Sin embargo, a pesar de Petras y su discurso nostradamístico y salvador, con populismo y todo lo que quiera, los pueblos latinoamericanos seguirán haciendo su propia historia.

Marzo MMIX