Se anuncia movido el nuevo año. En Latinoamérica, la izquierda se consolida, con el triunfo de Evo Morales en Bolivia. La primera victoria de los indígenas en 500 años. El primer viaje al exterior de Evo fue a Cuba. Para mostrar con quiénes establecerá sus alianzas. Las elecciones en otros países pueden consolidar el giro. […]
Se anuncia movido el nuevo año. En Latinoamérica, la izquierda se consolida, con el triunfo de Evo Morales en Bolivia. La primera victoria de los indígenas en 500 años.
El primer viaje al exterior de Evo fue a Cuba. Para mostrar con quiénes establecerá sus alianzas. Las elecciones en otros países pueden consolidar el giro. Nicaragua incluida.
En el norte pintan peor las cosas. EEUU despidió 2005 aprobando un muro de 1.100 kilómetros con México. El muro rezuma impotencia, incomprensión y mucha histeria.
Muro para que no se tizne el blancor de la sociedad anglosajona y protestante. Batalla perdida por más muros infames que construyan. El de Berlín era político. Éste, racista.
En Iraq será un año definitivo. Incapaz de vencer la resistencia popular, con sus peones derrotados en las elecciones, EEUU se arruga. Debe escoger entre retirarse o hundirse.
Rusia avisa que renace como potencia, cerrando el gas a Ucrania. El poder es el control de la energía y Rusia lo usa como tal. Ucrania sabe ya que la paciencia rusa tiene límite.
China revisó sus cuentas y resultó ser la cuarta economía del mundo. Y apenas empieza.
Avanza el siglo y se aclaran los signos. Buenas para los pueblos. Malas para el imperio.