Esta guerra está dejando muchas incógnitas que alguien podría considerar existenciales para nuestras sociedades.
Esta guerra está dejando muchas incógnitas que alguien podría considerar existenciales para nuestras sociedades.
Ante la actual situación de crisis agraria y alimentaria, el Consejo de Ministros de Agricultura de la Unión Europea ya está aprobando una serie de medidas para evitar desabastecimientos y subidas descontroladas de precios. De momento se han abierto nuevos mercados para la provisión del girasol o el maíz que se conseguía de Ucrania, suavizando las normativas restrictivas en cuestión de usos de pesticidas. También se va a permitir el uso de tierras en barbecho para cultivar más cereales.
Un informe Harvest y Rainforest Foundation Norway alerta de que, a pesar de los compromisos de la industria, las grandes comercializadoras de soja han incrementado la destrucción de zonas de alto valor ecológico.
SÍDNEY / KUALA LUMPUR – El señalamiento de culpables en el juego de la incursión de Rusia en Ucrania oculta el daño que está causando en muchos frentes. Mientras tanto, miles de millones de personas luchan por hacer frente al empeoramiento de su nivel de vida, exacerbado por la pandemia y otras cosas.
“La Unión Económica Euroasiática, liderada por Rusia y China, acaba de acordar diseñar el mecanismo para un sistema financiero y monetario independiente que evitaría las transacciones en dólares“.
El capitalismo vive de la explotación pero también de los mitos. Entre los mitos constantemente actualizados, el de la automatización del trabajo juega un papel esencial. En su versión más contemporánea, nos invita a imaginar un mundo donde el trabajo se ha deshecho de lo humano. Pero la fuerza de esta mitología es que parece realizar un sueño de los pensamientos radicales: liberar las vidas humanas de la alienación del trabajo, de ahí la confusión a veces entre ciertos autores críticos del capitalismo en cuanto a tales promesas.
Ustedes condenan todas las dictaduras, pero les encanta hacer negocios con ellas (Pablo Iglesias)
No cabe la menor duda que las poblaciones desfavorecidas en este mundo de globalización neoliberal han sido las más afectadas por la pandemia de coronavirus, el aumento del costo de los alimentos, la inflación, el cambio climático y ahora la guerra entre Rusia y Ucrania.