M.H.: Tengo entendido que se ha abierto un debate en tu país con respecto al arribo de militares extranjeros que brindarán apoyo a los 20.000 efectivos que habrá desplegados en la Ciudad de Buenos Aires para la Cumbre del G20. ¿Qué nos podés comentar al respecto? M.R.: Cuando acá se conoció la noticia fue repudiada […]
M.H.: Tengo entendido que se ha abierto un debate en tu país con respecto al arribo de militares extranjeros que brindarán apoyo a los 20.000 efectivos que habrá desplegados en la Ciudad de Buenos Aires para la Cumbre del G20. ¿Qué nos podés comentar al respecto?
M.R.: Cuando acá se conoció la noticia fue repudiada por todas las organizaciones populares en primer lugar el PIT-CNT cuyo secretario General, Marcelo Abdala, hizo una declaración clara y contundente diciendo que está en peligro nuestra soberanía y que no descartaban hacer una movilización. Que no hay ninguna necesidad, porque el evento se desarrolla en otro país, no tiene nada que ver con el Uruguay y que la Argentina obviamente tiene muchos lugares y aeropuertos como para hacer el despliegue de estas tropas, que no se entendía el motivo de este pedido que fue hecho directamente por la embajada de los EE UU en el Uruguay. Fue transmitido al Presidente Tabaré Vázquez, quien planteó que iba a presentar el Proyecto de ley que tiene que pasar por el Parlamento para permitir la entrada de un ejército extranjero con armamento.
Hay 8 aviones que vienen, algunos equipados con radares de tecnología de punta que detectan de todo, 400 efectivos militares y agentes de inteligencia. Ha habido información contradictoria en boca de la prensa y también del Presidente. El primer día dijo que iban a llegar el 26 de noviembre y se quedarían hasta el 3 de diciembre, ahora se refuerza esa idea.
Nosotros teníamos la experiencia de la última venida de Bush al Uruguay invitado por Tabaré Vázquez a quien recibieron con Mujica de manera muy particular, porque siendo un presidente de EE UU que se quede varios días en un país como Uruguay es algo verdaderamente extraño. Pero desde que asumió el Frente Amplio, EE UU ha hecho cantidades de declaraciones públicas sobre una unión estratégica, un compromiso entre Uruguay y EE UU, que nunca se desmintió. Los que se encargan de afirmar que ambos países comparten ideales, objetivos, criterios de democracia, etc., son las autoridades norteamericanas desde la presencia de Bush en el primer gobierno de Tabaré Vázquez.
Así se sucedieron las manifestaciones en contra pero en el día de ayer, cuando se empezó a levantar revuelo y a escuchar voces desde la oposición y desde el propio Frente Amplio, de dos fuerzas en particular que son el PC, de la senadora Constanza Moreira y el Fup-Pdp que expresaban sus opiniones en contra; también de parte de la oposición, que aprovechó demagógicamente porque en realidad no depende del voto de ellos, pero podían ganarse la simpatía de algún votante porque saben que mayoritariamente la población no está viendo esto con buenos ojos.
Entonces, cuando sale por segunda vez, en la inauguración de una gran obra del Estado, también muy cuestionada y financiada por Antel y UTE, un gran centro de conferencias que ha salido una fortuna y que no parece una obra tan necesaria en un momento de crisis, donde el presupuesto está sumamente recortado para todos los servicios básicos de la población. En esa inauguración se mostró muy inseguro Tabaré Vázquez en sus declaraciones y allí dijo que las tropas iban a estar por 48 horas. Además sabemos que Trump redujo las horas de su estadía en el G20. Sin embargo ahora, cuando llega la ley al Senado lo que sale aprobado por unanimidad es que efectivamente llegan el 26 de noviembre y se van el 3 de diciembre.
Pasó lo mismo cuando vino Bush, vinieron varios días antes y se fueron varios días después. Pero esos aviones no estuvieron instalados en el aeropuerto, sino sobrevolando el país. No se supo dónde estuvieron, yo vivo cerca del aeropuerto y daba pánico el ruido que generaban esos aviones que transportan cantidades de blindados, que tienen una potencia terrible y que sobrevolaban bajo cerca del aeropuerto y hacían temblar todo. Las autoridades no supieron decir dónde habían estado esos aviones, pero no estuvieron en el aeropuerto los días que se quedaron así que suponemos que estuvieron haciendo inteligencia y relevamientos de todo tipo.
En este caso se repite la misma situación. Fue una aprobación exprés. Las fuerzas del Frente Amplio que manifestaron su visión negativa, votaron por disciplina partidaria, porque fue declarado asunto político, y votaron todos positivamente. Esa es una cosa para tomar nota, porque el Frente Amplio está gobernando desde 2005 con Tabaré Vázquez que empieza el primer mandato y empezó también imponiendo la disciplina partidaria para votar una serie de resoluciones, entre ellas el envío de las tropas a Haití que hizo renunciar al diputado Chifflet a quien quisieron obligar a votar, razón por la cual renunció al cargo en plena Cámara. También por la participación en las operaciones Unitas, después vino el tratado de protección de inversiones con EE UU.
Otra de las cosas que mencionó el Presidente Vázquez en televisión fue que esto se debía a tratados y compromisos firmados a nivel internacional con EE UU. Este tratado de protección de inversiones con EE UU que empezó su tratamiento con el gobierno de Lacalle anterior al Frente Amplio, pero fue terminado de firmar por el Presidente Vázquez en Mar del Plata cuando rechazaron el ALCA, y luego a fines de 2005 fue aprobado en Diputados y Senadores. Este tratado es algo que la mayoría de la población e inclusive buena parte de la militancia no conoce, porque era el momento de «luna de miel» de la población y las organizaciones, con un gobierno donde había una confianza prácticamente ciega. Los medios no daban información tampoco. Pero el tratado de protección de inversiones está en la base de la aceptación rápida y fluida de este pedido de la Embajada norteamericana. Porque además de ser un tratado como otros de protección de inversiones, que eximen de impuestos, y dan todo tipo de privilegios a las multinacionales, hay dos cosas que son distintas, una es que lo hace retroactivo, con lo cual cubre toda la deuda, incluso con la que nos comprometió la dictadura, que un gobierno independiente podría no pagar. Y otro artículo de mayor gravedad que es uno de seguridad esencial en donde se dice que se le permitirá a las partes, porque es un tratado recíproco, pero hablemos de EE UU porque las inversiones uruguayas allí no sé si existen y no tienen gran porte si es que alguna existe, hacer uso de cualquier medio si ven la paz regional en peligro o sus intereses en peligro. Eso es lo que dice la cláusula de seguridad esencial en el tratado de inversiones. Eso fue firmado en 2005.
Nosotros desde la Comisión nacional en defensa del agua y la vida, que estuvo en toda esa movida, cuando se formó una coordinadora en defensa de la soberanía para difundir este tratado y oponerse a él en el 2005, también es el organismo que está ahora luchando contra la Ley de riego y el contrato con UPM, una nueva planta de celulosa. Es un núcleo de compañeros importante donde hay abogados que nos descifraron el tratado porque está expresamente escrito de manera muy rara, para que no sea de fácil comprensión, tenés que ser un técnico especializado para entenderlo.
Nosotros fuimos despacho por despacho de diputados y senadores, a explicarles cuáles eran los contenidos que iban a firmar, muchos habían sido compañeros de militancia en distintos ámbitos. Ellos votaban sin saber lo que estaban votando y hasta ahora muchas cosas son así, pero sobre todo en ese primer año. Estamos hablando de un tratado muy largo, que no se entiende. A esta Coordinadora que se formó en ese momento se sumaron sindicatos como el del Hospital de Clínicas, la Comisión del agua y la vida, una comisión de trabajadores de la cultura, etc. Se dio la información que se pudo, en aquel momento muy diferente al de hoy, donde la población después de 15 años de gobiernos frenteamplistas está mucho más escamada, tiene otra opinión más crítica, porque ha corrido el tiempo y la experiencia.
No está Macri aquí, ni Bolsonaro ni Peña Nieto, pero estamos atajando penales todos los días
M.H.: Comentanos sobre el tema del agua y la instalación de la tercera pastera.
M.R.: El tema es el esquema de la política económica que lleva este gobierno, que es neoliberal y aplica la fórmula del FMI; a ellos les preocupa mantener controlada la inflación y la relación entre el PBI y la deuda. Esos son los números, sin embargo, a diferencia de Argentina, en el Uruguay del Frente Amplio, que muchos siguen creyendo que es de izquierda o progresista, no se le pone impuestos a las multinacionales ni a los grandes capitales ni a los grandes exportadores. Debido a eso los propios terratenientes argentinos vinieron a plantar soja e instalarse acá. Esa situación se sostiene. Ellos están desesperados ahora porque el déficit fiscal está aumentando, se les descontroló y está empezando a sentirse la crisis. Están desesperados porque vengan inversiones. Todo se reduce a ese interés. No les interesa cuánto ganen los trabajadores ni en qué condiciones están. Están privatizando el Estado de manera escandalosa, están precarizando el trabajo, todos los nuevos contratos a nivel del Estado son precarios, con condiciones de trabajo muy por debajo de las actuales. Pero ellos andan atrás de las inversiones. Eso nos lleva a la Ley de riego y la llegada de UPM que es una segunda planta finlandesa.
La Ley de riego fue una ley que con bonitas palabras fue una ley de inversión. Ellos la presentaron como una solución para los productores porque había sequía en verano y había productores que no accedían al riego entonces ahí podían agruparse y tener formas de riego. En realidad ya con la ley que existe los productores pueden agremiarse, el tema es que se trata de una ley de inversión que permite al gran capital y al capital extranjero con nuevas tecnologías a que vengan a represar nuestros ríos. Se les ofrece el agua de nuestros ríos por un trabajo de 3 años de los técnicos del Banco Mundial junto con los del ministerio de Ganadería y Agricultura, dirigido por un arrocero, gran terrateniente que se va a beneficiar junto a otros por esta ley.
Hicieron una investigación de campo y encontraron entre 50 y 100 lugares que podrían represar. Estamos hablando de grandes represas donde no se estipula el radio, eso se lo van a vender a los productores, que obviamente van a quebrar, los pequeños y medianos que son los que producen la comida y que ya están al punto de la quiebra van a tener aumentos en los costos de producción; pero además de manera expresa el ministro explicó que lo que quieren es aumentar la productividad de la tierra y duplicar las áreas sembradas en soja y maíz transgénico y también el eucaliptus que necesita mucha agua y cuanta más agua mayor es la productividad.
Hay un grado de contaminación de las aguas que nosotros empezamos a denunciar cuando fue el conflicto de Botnia y Fray Bentos. Algún núcleo de militantes que ya estábamos entendiendo el problema, porque no hay que esperar que le pase a uno, es una realidad latinoamericana; qué iba a tener como consecuencia todo el tema del monocultivo. Ahora sí se está sintiendo, desde 2011 empezaron a aparecer niveles de contaminación de todos los cursos de agua en este país, incluso las lagunas de donde se está potabilizando el agua para Montevideo que tiene la mitad de la población del país. Se le está echando hipoclorito para matar las bacterias, pero hay metales pesados que no se pueden eliminar del agua que recibimos de las canillas. Cuando este país si tuvo alguna riqueza siempre fue la de agua dulce.
M.H.: Recuerdo que cuando era niño, tenía 12 años, 50 años atrás íbamos con mis tíos a la localidad de Colón y siempre me llamó la atención lo cristalina que era el agua del río Uruguay, a diferencia del Río de la Plata y el río Paraná que eran los que yo conocía.
M.R.: Eso fue así hasta que pasaron los años suficientes como para que los fertilizantes y los agroquímicos que utiliza todo este modelo del agronegocio fuera a parar al agua. Sabíamos que iba a suceder, porque se va acumulando en el tiempo.
M.H.: Justamente en nuestro país el Parlamento está tratando una nueva Ley de semillas. Hace unos instantes señalábamos a Felipe Solá como uno de los introductores de la soja transgénica en la Argentina hace 20 años atrás.
M.R.: La Ley de riego fue aprobada, estuvimos juntando firmas para un referéndum pero no logramos juntar las suficientes, porque hubo un boicot de las organizaciones sociales oficialistas pero despertamos un gran interés en la población, fue un éxito político.
No está Macri aquí, ni Bolsonaro ni Peña Nieto, pero estamos atajando penales todos los días porque cada cosa que aparece es peor que la otra.
M.H.: Vengo de Chile y es lo mismo.
M.R.: Con respecto al G20 aquí también hay una organización que se está moviendo para difundir qué es el G20 y que sin dudas va a hacer alguna movilización. También hay un montón de sindicatos de base que van a la movilización de Buenos Aires, pero no sé si los dejarán llegar. Estamos teniendo la misma visión y hermanados con ustedes ante este imperialismo y esta recolonización brutal y la esclavización de la mano de obra que estamos sufriendo tanto el mundo como Latinoamérica.
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