Cecilia Michelini anuncia el inicio de actividades de la Fundación Zelmar Michelini; en entrevista con Clarín, la hija del periodista y político uruguayo, comparte los estatutos y utopías a dirigir: «Será una fundación profundamente comprometida con la sociedad, de carácter político, cultural, de defensa de los derechos humanos y del Estado de derecho. Será […]
Cecilia Michelini anuncia el inicio de actividades de la Fundación Zelmar Michelini; en entrevista con Clarín, la hija del periodista y político uruguayo, comparte los estatutos y utopías a dirigir: «Será una fundación profundamente comprometida con la sociedad, de carácter político, cultural, de defensa de los derechos humanos y del Estado de derecho. Será independiente, plural y no tendrá relación político partidaria»
El Comité de Honor de la Fundación Zelmar Michelini: «está integrado por el escritor Mario Benedetti; el Comisario de DDHH del Consejo de Europa Thomas Hammarberg; el Presidente del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de las Naciones Unidas, magistrado francés Philippe Texier; y el profesor Robert Goldman codirector del Center for Human Rights and Humanitarian Law de la American University Washington College of Law Faculty. Los Cofundadores serán familiares, amigos y amigas de Zelmar, colaboradores y compañeros de ruta».
MC.- Háblanos de la trayectoria de Zelmar Michelini, su denuncia ante el Tribunal Russell y la trágica culminación de su vida en el exilio…
CM.- Zelmar Michelini como político, periodista, ensayista, dirigente estudiantil y sindical fue uno de los protagonistas trascendentales y decisivos de la historia uruguaya reciente. Para aquellos que lo conocieron personalmente y para los que no tuvieron un contacto directo con él, pero fueron espectadores contemporáneos de su trayectoria, a todos les dejó una marca impresa imposible de olvidar…
Destacó como dirigente estudiantil, siendo secretario general de la Federación de Estudiantes así como del gremio bancario en los tiempos que era empleado del Banco Hipotecario. Su militancia en filas del Batllismo fue el comienzo de una agitada actividad política y meteórica carrera en la cual ocupó los cargos más importantes dentro de su actividad, fue secretario político de Luís Batlle, diputado, presidente de bancada, senador y ministro.
Posteriormente a su alejamiento de Luís Batlle y a la fundación de su propia agrupación dentro del Batllismo con la célebre Lista 99, el Uruguay comenzó a vivir un período de enfrentamiento y violencia que comienza luego del fallecimiento del Presidente de la Republica Óscar Gestido a los pocos meses de haber asumido (diciembre 1967) y la asunción del Vicepresidente Jorge Pacheco Areco. Es en ese período (diciembre 1967-junio 1973) es cuando la estrella de Zelmar Michelini brilló con más fuerza, su actividad como legislador en sus últimos años dentro del Batllismo en el Partido Colorado, así como en el recién nacido Frente Amplio, hicieron de él un referente constante y luchador incansable por los derechos humanos y por la pacificación del país.
En esas horas tan dramáticas, sus alocuciones, discursos, interpelaciones y artículos de prensa, siempre eran muy esperados a pesar de tocar temas dolorosos y graves, en ellos nunca puso un pie fuera de las normas que tiene que tener un caballero a la hora de hacer valer sus ideas sin lastimar gratuitamente, usando como arma una cautivadora oratoria para exponer su pensamiento e ideas, lo que le valió el aprecio de correligionarios y aún de aquellos que discrepaban con él pero que sabían apreciar a un rival leal y honesto.
Luego del golpe de Estado perpetrado por Bordaberry y los militares (1973) que contó con el apoyo de alguno de los sectores más reaccionarios de los partidos tradicionales, así como de sectores de poder con intereses económicos y la derecha en general, Zelmar Michelini al igual que muchos uruguayos se vio obligado a tomar el camino del exilio, en su caso la mayor parte lo pasó en Buenos Aires. Sin embargo en ese exilio no dejó de luchar para que en nuestro país retornara la democracia, se hizo un activista por la defensa de los derechos humanos desde su pluma en el periódico La Opinión de Buenos Aires y las denuncias ante el Tribunal Russell reunido en Roma, lo convirtieron en un imprescindible, pero su prédica lo llevaría a un terrible final junto a Héctor Gutiérrez Ruiz «El Toba», Rosario Barrredo y William Whitelaw, en mayo de 1976.
MC.- ¿Qué dictaminó la Justicia uruguaya sobre el asesinato de tu padre? ¿qué opinión tiene la familia al respecto?
CM.- Zelmar Michelini fue secuestrado y asesinado en un operativo coordinado entre militares uruguayos y argentinos, enmarcados en el Plan Cóndor. Junto con él aparecieron muertos el Presidente de la Cámara de Diputados del Uruguay Héctor Gutiérrez Ruiz y los jóvenes luchadores sociales Rosario Barredo y William Whitelaw. La familia siempre ha luchado por la verdad y la justicia. No limitando la búsqueda de Justicia al caso de Zelmar, sino para las miles de victimas del período pre-dictatorial y dictatorial. Esta larga y dura batalla contra la impunidad fue en principio encabezada por su esposa Elisa Delle Piane exigiendo la derogación de la «Ley de Caducidad» (que no permitía investigar los hechos transcurridos durante la dictadura), después por sus hijos Rafael y Felipe que tomaron esas banderas y ahora muy especialmente por su hijo Zelmar Eduardo en París donde tienen una asociación que trabaja con mucha pasión y convencimiento. Después de 30 años, se logró que el dictador Bordaberry y su canciller Juan Carlos Blanco fueran declarados culpables de estos asesinatos y hoy cumplen prisión por ello. Por supuesto es un avance muy importante, pero no suficiente.
MC.- Alguna vez, en Montevideo, caminé por la calle Zelmar Michelini ¿desde cuándo hay un reconocimiento público al laburo político e intelectual de tu padre?
CM.- Fue reconocido desde siempre, aún en tiempos de dictadura. Ese reconocimiento le supuso su muerte y el ensañamiento con su familia especialmente con sus hijas Margarita y Elisa. Margarita fue secuestrada en Argentina y llevada ilegalmente a Uruguay en julio de 1976 donde estuvo presa durante 5 años y Elisa estuvo presa 13 años, desde el año 1972, en calidad de «rehén» bajo condiciones infrahumanas. Una vez terminada la dictadura, Zelmar Michelini tuvo diferentes reconocimientos, el nombre de calles, plazas y escuelas en los distintos departamentos del Uruguay. A los 30 años de su fallecimiento (2006) se formó una comisión de Homenaje y se realizaron actos y eventos a lo largo y ancho del país y también en la Argentina, durante todo el año y muy especialmente durante el mes de mayo (nació el 20 de mayo 1924 y lo asesinaron el 20 de mayo de 1976). A nivel de la Justicia no fue hasta con el gobierno del Frente Amplio que se inició una investigación sobre su asesinato que culminó con la prisión del dictador Bordaberry y su canciller Juan Carlos Blanco.
MC.- Del Uruguay sólo teníamos noticias sobre la Fundación Alfredo Zitarrosa por el libro de Saúl Ibargoyen. ¿Qué utopías representa la Fundación Zelmar Michelini?
CM.- Hay muchísimas fundaciones en Uruguay. No soy experta en este tema pero sé que existen varias fundaciones de personalidades, además de la Fundación Alfredo Zitarrosa, está la Fundación Liber Seregni, la Fundación Rodney Arismendi, la Fundación Joaquín Torres García y la recién creada Fundación Wilson Ferreira Adúnate, entre otras. La trascendencia de Zelmar en todos los estratos sociales y todos los sectores políticos del Uruguay, el prestigio logrado por su figura fuera de las fronteras, hacen que el homenaje a través de la FZM no deba traicionar ese respeto que le brindan los que fueron testigos de su accionar y es un desafío ineludible transmitírselo a los jóvenes. Sin dejar de mencionar que sus posturas políticas fueron claramente definidas, llegando a ellas sin dogmatismos y que a la hora de defender a las personas nunca les preguntó a qué corriente política adherían.
Por todo lo anterior la FZM toma como propias las banderas de los derechos humanos y la democracia y aspira constituirse en un punto de referencia sobre estos temas dentro y fuera del Uruguay. Zelmar concebía a todas y cada una de las personas de una manera integral, compleja y profunda. Por esta razón la actividad de la FZM estará volcada a desarrollar las diversas temáticas en la vida de hombres y mujeres, en sus diferentes expresiones como el arte, el deporte, la cultura, el periodismo, la investigación y la innovación. Esto sólo estará completo si tratamos de emular algunos de las virtudes básicas que guiaron la vida de Zelmar: el diálogo con todos los actores políticos y sociales, prestando atención a todas las personas.
MC.- En 2008 nace la Fundación Saramago y ahora la Fundación Zelmar Michelini ¿la fecha tiene un significado biográfico? cuéntanos los antecedentes históricos y burocráticos para el inicio de la FZM…
CM.- Es un honor para nosotros compartir nuestro año de creación con el año de la Fundación Saramago, con quienes nos pondremos en contacto para compartir experiencias y procurar realizar iniciativas en común por los derechos humanos, la igualdad de oportunidades y la paz.
La Fundación Zelmar Michelini es un proyecto concebido desde su muerte, por distintas razones no fue creada hasta junio de 2008, por su esposa de Elisa Delle Piane y todos sus hijos: Elisa Lucía, Margarita María, Luis Pedro José, Isabel Clara, Zelmar Eduardo, Rafael Eugenio, Felipe Raúl, Graciela Cesalpina, Marcos Sebastián. Nosotros -como familia- aportamos el capital inicial y definimos las líneas estratégicas y filosóficas de la Fundación.
En el acta constitutiva se nombró un Consejo de Administración (patronato) que en su inicio está compuesto por cinco de sus hijos y cuatro personas de notorio prestigio nacional e internacional vinculadas a los ámbitos académicos y de notoria proximidad al ideario de Zelmar Michelini. Ellos aportarán además de su prestigio y aptitudes personales, pluralidad y transparencia. También la integrarán en su fase inicial un Comité de Honor, cofundadores, amigos, familiares, colaboradores, compañeros de ruta y Organizaciones Amigas nacionales, regionales e internacionales. Todos ellos nos acompañaran en este esfuerzo que queremos participativo y veraz.
MC.- En México, desde 1998, la Fundación Rulfo ha defendido la memoria del escritor, editando investigaciones biográficas y académicas; incluso la defensa llegó a tribunales para impedir la entrega del «Premio Rulfo» a conveniencia del derechista Partido Acción Nacional. ¿Qué opción política constituirá la Fundación Zelmar Michelini?
CM.- Será una fundación profundamente comprometida con la sociedad, de carácter político, cultural, de defensa de los derechos humanos y del Estado de derecho. Será independiente, plural y no tendrá relación político partidaria. Sus objetivos serán:
1.-Contribuir al fortalecimiento de la democracia y las organizaciones sociales, propiciando la igualdad de oportunidades, la participación y la construcción de ciudadanía.
2.-Crear una plataforma de debate, investigación y formación que posibilite generar alternativas tendientes a la solución de los problemas que enfrenta la sociedad.
3.-Promover y estimular los emprendimientos de carácter innovador en los ámbitos de derechos humanos, sociales y/o culturales.
Nuestras primeras actividades se centrarán en la difusión de la FZM, en el diseño y desarrollo del «Archivo Zelmar», en la contribución a la defensa de los derechos humanos y en la planificación de programas de carácter socio cultural principalmente dirigidos a los sectores de la infancia y adolescencia.
MC.- Por otro lado, sin intención de desalentarlos, está la amarga experiencia del cierre de la Fundación Octavio Paz; sin dejar pasar el ocaso de la Fundación Neruda y su traición al invertir la plata del copyright con lo peor del pinochetismo. ¿La Fundación Zelmar Michelini tiene un plan de acciones a mediano y largo plazo? ¿qué leeremos en sus estatutos?
CM.- En sus estatutos la Fundación define como objetivos:
1.-Estudiar y difundir la vida, obra y pensamiento político de Zelmar Michelini Guarch para promover la defensa de la libertad, de los derechos humanos y de la justicia, como pilares fundamentales de la democracia, del desarrollo social y de la paz.
2.-Apoyar las investigaciones sobre el asesinato de Rosario Barredo, William Whitelaw, Héctor Gutiérrez Ruiz y Zelmar Michelini. Respaldar las acciones judiciales contra los responsables intelectuales y materiales del crimen en el marco de erradicar «la cultura de la impunidad».
3.-Organizar un centro de documentación, estudios e investigaciones en temas políticos, sociales, culturales y de derechos humanos, especialmente sobre la violación de las libertades, la tortura y la desaparición forzada en Uruguay durante el período 1967-1985 así como de la impunidad pos-dictatorial.
4.-Ejecutar a través de la cooperación con otras organizaciones e instituciones de carácter nacional, regional e internacional, proyectos y programas para sistematizar y difundir prácticas adecuadas y experiencias innovadoras en los ámbitos culturales, sociales, económicos y ambientales con criterios de sostenibilidad. Asimismo se promoverán actividades tendientes al fortalecimiento de la democracia, de las libertades públicas, de los derechos humanos y de la justicia social, incluyendo la participación en redes de información y conocimiento.
5.-Promover proyectos de vinculación entre las personas migrantes con sus países de origen. Facilitar el acercamiento y coordinación de las organizaciones y colectivos que los representan para mitigar los efectos relacionales, sociales y económicos de la emigración.
6.-Entregar el Premio Fundación Zelmar Michelini, dirigido a personas o colectivos, para destacar a los emprendedores y las iniciativas de carácter innovador en las ya citadas áreas de la Fundación.
7.-Establecer relaciones con otras entidades e instituciones del país y del extranjero para el mejor cumplimiento de los objetivos de la Fundación.
MC.- La Fundación Víctor Jara sistemáticamente es amenazada por el gobierno municipal que escudriña la clausura de su galpón. ¿Están preparados con un equipo comunicacional y legal para el peor de los escenarios de acoso y montajes periodísticos en su contra?
CM.- La pregunta es muy interesante, sobre todo si hay antecedentes en la región. No es probable que nos enfrentemos hoy a la situación de ser perseguidos. No obstante, contamos con un excelente equipo de profesionales amigos a nivel nacional e internacional que nos ayudarían si se diera el caso a enfrentar hostilidades del gobierno municipal. Contaríamos ante tal circunstancia con el apoyo de la gente, que siempre es el más importante.
MC.- La Fundación Gonzalo Rojas tiene oficinas en Chile y México, además firmó un convenio con el Instituto Cervantes de España. ¿Qué proyección internacional contemplan para el crecimiento de la Fundación Zelmar Michelini?
CM.- En nuestros estatutos, en nuestros proyectos y en nuestras líneas de actividad está siempre marcado como prioridad el trabajo de cooperación a nivel nacional, regional e internacional. Uno de nuestros objetivos es justamente la cooperación y otro muy importante el trabajo con la migración. El Premio Fundación Zelmar Michelini se propone no quedar solamente dentro de las fronteras. Nuestro Comité de Honor y las Organizaciones amigas están orientadas a tener un marco internacional. Por último tenemos la intención -con el tiempo- de inaugurar filiales en distintos países.
MC.- Finalmente, ¿cómo surge la idea del Comité de Honor? y ¿qué ONG respalda el nacimiento de la Fundación Zelmar Michelini?
CM.- El Comité de Honor y las Organizaciones amigas surgen, como también la figura de Cofundadores, con el fin de que la Fundación Zelmar Michelini trascienda la familia y sea un proyecto participativo y veraz. En su fase inicial: El Comité de Honor está integrado por el escritor Mario Benedetti; el Comisario de DDHH del Consejo de Europa Thomas Hammarberg; el Presidente del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de las Naciones Unidas, magistrado francés Philippe Texier; y el profesor Robert Goldman codirector del Center for Human Rights and Humanitarian Law de la American University Washington College of Law Faculty. Los Cofundadores serán familiares, amigos y amigas de Zelmar, colaboradores y compañeros de ruta. Las Organizaciones Amigas (nacionales, regionales e internacionales), tendrán como características compartir nuestros principios y nuestra forma de trabajo, aspirando a constituir una Red de organizaciones con distintos perfiles y nacionalidades.