Japón no pagó este año su parte de financiación a la UNESCO, anunció este viernes el ministro de Relaciones Exteriores, Fumio Kishida, un año después de criticar que el organismo de la ONU decidiera incluir los documentos de la masacre de Nankin en su Registro de Memoria del Mundo. Tokio, uno de los mayores contribuyentes […]
Japón no pagó este año su parte de financiación a la UNESCO, anunció este viernes el ministro de Relaciones Exteriores, Fumio Kishida, un año después de criticar que el organismo de la ONU decidiera incluir los documentos de la masacre de Nankin en su Registro de Memoria del Mundo.
Tokio, uno de los mayores contribuyentes de la UNESCO, con un pago anual de 4.400 millones de yenes (38 millones de euros al cambio actual), acusa a la institución de haber tomado una decisión política que iría contra la neutralidad en que deberían basarse sus actuaciones.
Sin embargo, Kishida negó cualquier relación directa con este asunto.
Los documentos relativos a las atrocidades cometidas por el ejército imperial japonés en 1937 en China fueron incluidos en 2015 en el Registro de la Memoria del Mundo de la UNESCO.
La conquista de Nankin, entonces capital de la República de China, dio lugar en diciembre de 1937 a matanzas, asesinatos, violaciones y saqueos por parte de las tropas japonesas.
Japón reconoce que «se cometió el asesinato de un gran número de no combatientes, saqueos y otros actos», pero que el número de víctimas es «difícil de determinar».
Sin embargo, China defiende que fueron 300.000 las personas abatidas por los militares nipones.