Traducido del inglés para Rebelión por J. M.
Protestas a gran escala han estado sacudiendo las ciudades indias desde principios de este mes, cuando el Parlamento del país aprobó la Ley de Enmienda de Ciudadanía, LEC. Ofrece ciudadanía a cualquier refugiado de los países vecinos de Pakistán, Afganistán y Bangladesh (mayoritariamente musulmanes) que sean miembros de comunidades «minoritarias» no musulmanas en esos países, pero a ningún musulmán. El primer ministro Narendra Modi introdujo introducido esta medida claramente discriminatoria como parte de un paquete de medidas antimusulmanas que ha tomado desde que su Partido Bharatiya Janata (BJP) ganó la mayoría en el Lok Sabha (Parlamento) en abril pasado.
El BJP se fundó en 1980 como un partido que persigue orgullosa y explícitamente el «Hindutva» (poder hindú) en un país que durante los 50 años posteriores a su independencia de Gran Bretaña en 1947, permaneció comprometido con la forma decididamente no religiosa de igualdad cívica prevista por el Partido del Congreso y líderes claves de la era de la independencia como Mahatma Gandhi y el primer ministro Jawaharlal Nehru. El Partido del Congreso ahora es solo una sombra de lo que fue. En las elecciones de abril el BJP ganó 303 de los 543 escaños elegidos en el Lok Sabha.
Los demócratas y progresistas de todo el mundo se han unido para protestar contra las políticas radicalmente pro-Hindutva (o «azafranizantes») del BJP. Es instructivo, por lo tanto, observar los muchos paralelos entre las políticas del BJP y los tipos clásicos de políticas que los sionistas han ejecutado tanto en Palestina como en las lujosas campañas de relaciones públicas que han llevado a cabo en todo el mundo. Resulta que Modi puede enseñarnos mucho sobre el sionismo. Aquí, en pocas palabras, están las lecciones de Modi paso a paso sobre cómo crear y defender un estado exclusivista, etno-sectario-nacionalista:
Paso 1: politizar completamente el tema de la identidad religiosa.
En conceptos clásicos de la teoría democrática, la creencia religiosa es una cuestión de conciencia individual y se debe evitar que los gobiernos privilegien a los adherentes de cualquier religión sobre los adherentes de otras. En India alrededor del 80 % de los 1.300 millones de habitantes del país son hindúes, alrededor del 14 % son musulmanes y el resto pertenecen a grupos religiosos más pequeños como cristianos, jainistas, sikhs, zoroastrianos, etc. Como se señaló anteriormente, la legislación LEC es solo un paso que el BJP ha estado dando para privilegiar a los creyentes hindúes. Otro pasos tomados en los últimos meses han incluido la implementación de un «Registro Nacional de Ciudadanos», de tal manera que en algunas áreas del noreste ha dejado a miles de musulmanes fuera de la lista de votantes, además de una represión violenta a gran escala contra la mayoría musulmana de Cachemira.
En la Palestina histórica el proyecto sionista desde el principio ha dado un privilegio extremo a los miembros de la comunidad judía, negando cualquier forma de igualdad de derechos y protecciones a los seguidores de otras religiones en las áreas que han estado bajo el control israelí/sionista. Más recientemente, en 2018, el Partido Likud de Benjamin Netanyahu promulgó el Proyecto de Ley Estado-nación, que consagra el concepto de que Israel es «el Estado-nación del pueblo judío en la Ley Básica de Israel».
Los otros dos países principales fundados en principios tan fuertemente teocráticos son Pakistán y, en cierta medida, Arabia Saudita. Pakistán, de hecho, fue fundado expresamente como patria musulmana, de acuerdo con la visión de su fundador Mohammed Ali Jinna. En 1947 el partido de Jinna separó las provincias mayoritariamente musulmanas del territorio que los británicos habían gobernado como una sola India «imperial» para formar Pakistán. Esa división de la India condujo a limpiezas étnicas masivas en ambos lados de la nueva frontera, muchas de ellas extremadamente violentas. Pero en respuesta a esa violencia, Gandhi, Nehru y los otros líderes del resto de la India no respondieron proclamando ninguna forma de Hindutva discriminatoria. En cambio, se duplicaron tanto en el laicismo como en la inclusión de la nueva India que estaban construyendo y en las reformas que consideraron necesarias dentro del propio hinduismo. En 1948 Gandhi fue asesinado por un extremista nacionalista hindú.
Paso 2: Las acciones en las fronteras y la ciudadanía son cruciales para el proyecto exclusivista.
La nueva ley de ciudadanía de Modi, la LEC, parece un pálido eco de la antigua «Ley de retorno» de Israel, que otorga un derecho de ciudadanía superprivilegiado a cualquier miembro de la comunidad judía de cualquier parte del mundo. Si los occidentales quieren criticar la LEC, ¿por qué no han sido igualmente críticos con la Ley de retorno israelí?
Mientras tanto, algunas de las acciones que Modi ha estado tomando para eliminar a un gran número de musulmanes de las listas de ciudadanía en la provincia nororiental de Assam y en otros lugares parecen una forma lenta y burocrática de los pasos brutalmente expulsores que tomaron los sionistas durante la guerra de 1947-1949 y las formas más burocráticas de política excluyente que todos los gobiernos israelíes han tomado desde entonces. Si los occidentales critican lo que la India ha estado haciendo con respecto a la LEC, ¿no deberían mirar igualmente de manera crítica lo que hizo Israel durante la Nakba y la fuerte presión demográfica que sigue ejerciendo sobre los indígenas no judíos de Gaza, Cisjordania y el Golán hasta este día?
Paso 3: No olvides reescribir y remodelar la historia y controlar cómo se enseña
La versión enseñada, estudiada y escrita estándar de la historia india, desde la Independencia ha hablado de la liberación de la India después de «200 años de dominio colonial». (En realidad 190 años.) Pero en el primer discurso de Modi en el Parlamento en 2014, habló sobre la liberación de la India después de «1.200 años de esclavitud», refiriéndose no solo a los 190 años del dominio británico, sino que agregó todo el milenio anterior en el que muchos de los gobernantes de la India eran emperadores musulmanes, aunque muchos otros fueron hindúes.
Una nota al margen importante aquí es que a lo largo de los siglos muchos indios se habían convertido al Islam precisamente porque lo vieron como una liberación de las terribles opresiones del sistema de «casta» profundamente antidemocrático del hinduismo. Cuando apareció Gandhi, trató de liberar a los hindúes de castas inferiores de una manera diferente: aboliendo todo el sistema de castas dentro del propio hinduismo. Las fuerzas conservadoras -y de castas superiores- de la vieja escuela dentro de la religión frenaron esa idea y generaron el impulso y el financiamiento para el movimiento Hindutva.
La reformulación de los «1.200 años de esclavitud» de Modi es solo una de las muchas formas en que los defensores de Hindutva han buscado activamente reescribir/replantear la historia de su país. Recientemente, la historiadora india RomilaThapar escribió una gran descripción de este proceso. Señaló que:
Estos esfuerzos comenzaron cuando el BJP gobernó la India por primera vez entre 1999 y 2004.
Bajo el gobierno del Sr. Modi y varios gobiernos estatales dirigidos por su partido, los intentos de cambiar la historia han tomado muchas más formas, como eliminar capítulos o pasajes de los libros de texto de las escuelas públicas que contradicen su ideología, al tiempo que agregan sus propias versiones imaginarias del pasado.
Y luego está el sionismo, con sus afirmaciones de que su proyecto central era realmente un «retorno a Israel» para las personas que habían estado exiliadas de esa tierra durante mucho tiempo, que el judaísmo es realmente una nacionalidad más que una religión profética, que la tierra de Palestina estaba «vacía» o muy poco desarrollada antes de la llegada de los colonos sionistas y que el sionismo era un «movimiento de liberación nacional» progresivo del pueblo judío contra el imperialismo británico en lugar de ser un movimiento colonial…
Paso 4: inscriba agresivamente sus reclamos de la tierra a través de movimientos audaces de cambio y nombre de los lugares
Un movimiento clave de cambio de lugar tomado por el BJP y sus aliados se produjo en 1992, cuando enormes multitudes organizadas por el partido demolieron a mano la mezquita Babri Masjid, de 450 años, en la ciudad norteña de Ayodhya, alegando que había sido construida en el lugar de nacimiento de la deidad hindú Rama. Los casos judiciales relacionados con la destrucción tropezaron con el sistema legal durante 27 años hasta que finalmente, el mes pasado, la Corte Suprema de la India dictaminó que el sitio debía ser entregado al Gobierno para la construcción de un templo hindú.
En este muy informativo episodio de «Onthe Media«, el historiador Shoaib Daniyal señaló que, bajo la influencia de Hindutva, los gobiernos estatales estaban otorgando nuevos nombres relacionados con hindúes en instalaciones públicas que anteriormente tenían nombres relacionados con musulmanes y que había habido varias propuestas de que el idioma hindi se enseñe en todo el país.
El problema del idioma en India es complejo. En su Constituciónestán reconocidos 23 idiomas oficiales. El hindi es el primer idioma de solo el 43,6 % de la población, incluidos muchos de sus ciudadanos musulmanes; aproximadamente la mitad de todos los hindúes indios no hablan hindi en casa. Mientras tanto, para complicar las cosas, el urdu, que es el único idioma oficial de Pakistán, así como uno de los idiomas oficiales de la India, generalmente se considera muy cercano al hindi, aunque está escrito en diferentes caracteres.
Actualmente el hindi y el inglés son ampliamente utilizados en toda la India como «idiomas comunes» burocráticos. El mandato de que el hindi se enseñe en todo el país y se convierta en el único idioma burocrático utilizado en todo el país empujaría aún más a esa mayoría de la población -para la cual no es el primer idioma- a la marginación.
…y luego está el sionismo, que ha impuesto sus propios nombres a lugares ubicados no solo en todo Israel de 1948, sino también en todas las áreas ocupadas de Jerusalén Este, el resto de Cisjordania, el Golán y Gaza… que ha demolido cientos de lugares sagrados y cementerios musulmanes (incluido el que está soterrado bajo el «Museo de la tolerancia» del Centro Wiesenthal en Jerusalén)… y que recientemente eliminó el árabe de la lista de sus idiomas oficiales…
Paso 5: Combine los pasos exclusivos tomados a nivel formal/oficial con la construcción de redes de base potentes cuyas acciones más extremas se pueden «negar» cuando sea necesario
El propio partido BJP se formó en 1980 a partir de una fusión de dos partidos anteriores de Hindutva. Mucho más antiguo que el BJP es el Rashtriya Swayamsevak Sangh (RSS), un movimiento de base de promoción de Hindutva fundado en 1925 que ahora afirma ser la ONG más grande del mundo con unos cinco o seis millones de miembros. Modi y muchos otros líderes del BJP obtuvieron su capacitación inicial en política y movilización masiva como miembros del RSS. El BJP a menudo se describe como simplemente «un proyecto del RSS». E incluso después de la fundación del BJP, el RSS continuó sus operaciones en todo el país.
Los intelectuales y profesores de RSS están a la vanguardia de los aspectos culturales del movimiento Hindutva. Sus escritores hacen alucinantes afirmaciones sobre la antigua historia hindú, como que existían comunicaciones por satélite y fueron utilizadas durante la era descrita en los poemas épicos sánscritos (siglos XIII o XIV a. C.) También mantienen viva una narración vívida de hindúes como víctimas crónicas de las acciones de otros, particularmente de los musulmanes. Sus maestros ejercen una presión constante sobre los sistemas escolares para cambiar los planes de estudio a un contenido más alineado con Hindutva. Los activistas en muchos niveles se involucran en acciones o ataques antimusulmanes contra cualquier persona que supuestamente haya desafiado las enseñanzas hindúes sobre lo sagrado de las vacas. Los activistas y organizadores de RSS estuvieron profundamente involucrados en la demolición de la mezquita en Ayodhya en 1992. Fue un exmiembro de RSS quien asesinó a Gandhi en 1948.
Las relaciones entre el RSS, el BJP y el Estado indio son ligeramente diferentes a las de los grupos de base sionistas, los partidos políticos sionistas y el Estado israelí. En Israel los partidos explícitamente sionistas han dominado el Estado desde el principio y el propio Estado siempre ha sido un proyecto sionista. En India ese no fue el caso. El Estado indio fue fundado, como se señaló anteriormente, como una entidad explícitamente laica, diversa, multiétnica y multireligiosa, como lo propugna el Partido del Congreso. Los partidarios de Hindutva sintieron que necesitaban, tanto después de la independencia como antes, construir redes sólidas de organizaciones de base para impulsar su agenda a nivel local antes de que pudieran intentar impulsar su participación en la política de partidos a nivel nacional. En Israel, por el contrario, los defensores de la agenda sionista exclusivista han tenido el control total de los presupuestos estatales y las oportunidades de financiación desde el principio, mientras que los defensores de Hindutva en India solo recientemente comenzaron a tener acceso a esa fuente.
Sin embargo el sionismo, visto como un fenómeno supranacional que existe mucho más allá de los límites del Estado de Israel, también se basa en amplias redes de organizaciones de base (o Astroturf) para continuar presionando o defendiendo su agenda a nivel mundial. Y a nivel de base dentro de Israel, grupos como la organización de colonos de Jerusalén Este Ateret Cohanim o el grupo antimestizaje Lehava participan en formas de acciones básicamente sionistas que son más extremas y violentas de lo que el Gobierno o los grandes partidos políticos se sienten cómodos asumiendo.
Afortunadamente, en la India, todavía hay muchos millones de ciudadanos, incluidos muchos adherentes a la fe hindú, que se han resistido activamente al encanto de Hindutva y han estado luchando por mantener la Constitución expresamente democrática del país. Deberíamos brindarles todo el apoyo que podamos. Mientras tanto, el primer ministro de la India, Modi, su partido gobernante BJP, el movimiento RSS y sus acciones entrelazadas pueden enseñarnos mucho sobre qué es el sionismo y cómo ha resultado tan efectivo hasta ahora.
Helena Cobban es presidenta de Just World Educational (JWE), una organización sin fines de lucro, y directora ejecutiva de Just World Books. Ha tenido una larga carrera como periodista, escritora e investigadora en asuntos internacionales, incluyendo 17 años como columnista en temas globales para The Christian Science Monitor . De los siete libros que ha publicado sobre asuntos internacionales, cuatro han sido sobre temas del Medio Oriente. Esta nueva serie de comentarios que está escribiendo, «Story / Backstory», tendrá un componente de audio ampliado publicado en la serie de podcast de JWE. Representan su propia opinión y juicios, no los de ninguna organización.
Fuente: https://mondoweiss.net/2019/12/what-indias-prime-minister-modi-can-teach-us-about-zionism/
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