Hoy en la mañana se confirmó el triunfo electoral del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), aunque algunos dicen simplemente: ganó Daniel. Todavía no están los resultados finales, pero ya la tendencia es irreversible con un 38-40% para el Frente, lo que da una diferencia de un 8 a 10% respecto a la Alianza Liberal […]
Hoy en la mañana se confirmó el triunfo electoral del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), aunque algunos dicen simplemente: ganó Daniel. Todavía no están los resultados finales, pero ya la tendencia es irreversible con un 38-40% para el Frente, lo que da una diferencia de un 8 a 10% respecto a la Alianza Liberal que va en el segundo lugar. Los liberales de Alemán están en tercer lugar y el Movimiento de Renovación Sandinista (MRS) en cuarto. Estos resultados preliminares han sido confirmados por Etica y Transparencia con su conteo rápido y diversos conteos independientes. No habrá segunda vuelta, pues la diferencia entre el primero y segundo lugar es de más del 5 %, y el primer lugar sobrepasa el 35 % como marca la Ley. La votación fue masiva, se calcula entre el 75 y 80%, la más alta de América Latina, y mayor que en Estados Unidos. ¿Por qué la gente se desborda a votar? Porque quiere, desea, o sueña con un cambio.
Sentimientos
Empezando por los sentimientos, estoy alegre con el triunfo del Frente Sandinista. Ciertamente me sentiría muy mal si hubieran ganado los liberales, tanto los del banquero millonario Montealegre, como peor si hubiera ganado Rizo, ligado a Alemán, el expresidente condenado a prisión por lavado de dinero (al menos de 20 millones de dólares). Y estoy alegre con el triunfo del Frente porque, sobre todo en la campaña, se vio el gran respaldo e ilusión que tiene el Frente de parte de la juventud. Y también estoy alegre porque el programa del Frente, es un buen programa con prioridades claras para bien del pueblo en salud, educación, empleo, vivienda etc… O sea, mucha alegría pensando y deseando que este resultado sea en verdad para bien de nuestro pueblo en sus sectores más empobrecidos y excluidos. También me alegra lo masivo de la votación- se decía que iba a haber mucho abstencionismo. Esa votación masiva, en medio de tanta frustración actual, es señal de la reserva de esperanza que tiene el pueblo y su firme deseo de un cambio, ahora en particular con el desastroso gobierno de Bolaños.
Es una alegría con puntos suspensivos, por el temor a que el Frente no cumpla lo prometido. A nivel MRS siento pena de que no haya obtenido más votos, no pensando en la Presidencia, sino deseando tuviera más peso en la Asamblea Nacional para equilibrar más el debate entre los diputados.
Impresiones o análisis previo sobre los resultados
Si uno se pregunta por qué ganó el Frente, creo que hay varios elementos que lo explican. Enumero algunos de esos factores dejando para después un análisis más profundo y reposado.
Algunos elementos del triunfo del Frente:
A) Mucha gente ya está muy cansada del fracaso de los gobiernos liberales-neoliberales que han gobernado 16 años y que han acentuado la concentración de la riqueza y la extrema pobreza del pueblo.
B) El Frente hizo una campaña inteligente con estos elementos positivos y aprovechando los errores de los adversarios:
(1) El Frente hizo una campaña intensa trabajando casa por casa con muchos y buenos activistas (ojalá esto no sea solo en tiempo de campaña, sino que vuelva el Frente a un trabajo intenso con y desde la base).
(2) El Frente hizo una campaña positiva- propositiva, no confrontativa, ni con ataques virulentos a los otros partidos.
(3) Hay una base amplia de voto seguro del Frente -que anda por el 30%-, y allí se incluye un buen grupo de cristianos con tradición revolucionaria desde la lucha contra Somoza.
(4) El Frente hizo alianzas con un abanico amplio de grupos e instituciones: con los excontras, con algunos somocistas, con el Cardenal Obando, con algunos liberales como Morales Carazo, ex asesor de Alemán y de la contra, y que es el candidato a vicepresidente. Claro que muchos criticamos esas alianzas que pueden calificarse de electoreras, pero que le funcionaron al Frente. En su campaña insistió en la reconciliación y en la paz. Aunque algunos criticaban esa reconciliación como un manto que unía electoreramente, pero que también «cubría» las profundas diferencias históricas y de visión y valores.
(5) El Frente prestó especial atención a la juventud.
(6) Los errores de los liberales favorecieron al Frente, por ejemplo el estilo tan confrontativo y ofensivo de sus campañas, la ligazón del candidato liberal Rizo con el expresidente Alemán.
(7) La división de los votos liberales en dos partidos que, además, pasaron atacándose ferozmente.
(8) Los errores del gobierno de Bolaños. No se quería más de lo mismo.
(9) Igualmente la injerencia descarada y constante del gobierno norteamericano a través de su embajador y otros personeros y de sus agencias como la AID, provocó más bien una reacción nacionalista en buena parte de la población.
(10) La campaña con tantos recursos económicos que le permitió tener muchos (¿demasiados?) espacios en la TV, radio, letreros gigantes en las avenidas y rotondas principales de Managua y en otras partes de Nicaragua, material escrito muy bien presentado y muy ampliamente difundido.
(11) El aprovechar su cercanía con el Cardenal, como señal de reconciliación con la iglesia jerárquica y dar continuamente un mensaje muy explícitamente religioso.
Algunos puntos débiles o más discutibles de la campaña del Frente
Ya los fui señalando más arriba, como son los excesivos gastos, la «reconciliación» electoral-electorera aún con somocistas y contras sin que haya señales de cambio en ellos. Lo discutible, por ambos lados, de su cercanía con el Cardenal Obando. A eso añado estos puntos: En la campaña se habló muy poco de Sandino y nada de Carlos Fonseca- que se supone son la raíz del Frente. En todos los cartelones se puso un color chicha rozado, y solamente en pequeñito, en la boleta, aparecía el rojinegro del Frente. Esto a nivel de dirigencia, pues en las concentraciones la gente siempre llevaba su bandera rojinegra. Hacer algunas promesas casi imposibles de cumplir o de las que no se decía claramente cómo por ejemplo el cero desempleo.
Algunas preocupaciones
La principal preocupación es si el Frente va a cumplir con todo lo prometido; de lo contrario habría una tremenda frustración del pueblo que votó por el Frente, y especialmente de la juventud.
Otra preocupación es si las ataduras internacionales, por ejemplo con el FMI, le permitirán al Frente actuar con suficiente libertad, por ejemplo en contra de la privatización de la energía eléctrica y para destinar unas partidas justas y necesarias para la salud y educación. Igual incertidumbre hay ante la implementación del TLC-CAFTA que tanto afecta a los campesinos pequeños y medianos productores.
La presión de Estados Unidos manifestada no sólo en la campaña, sino también al conocer los resultados electorales, va a influir en la postura no sólo del Frente, sino también de los dos partidos liberales en el seno de la Asamblea.
Y la última y muy importante preocupación, es si el Frente va a cambiar en puntos claves que se le han criticado, como el pacto – o como quieran llamarse- con Alemán, la corrupción de algunos dirigentes, los megasalarios de sus diputados y todo lo que huela a desmedido enriquecimiento de sus dirigentes, en la purificación, despartidización de la Justicia. Junto con ello se espera, en particular, la transparencia en los juicios a los narcotraficantes, que en estos años han sido fácilmente liberados.
Una tarea que nos queda a todos los sandinistas: ponerle ganas y corazón a construir una Nueva Nicaragua, y tanto dentro del partido, como desde la sociedad civil, ser muy exigentes con el Frente a estos niveles: cumplir sus promesas de campaña, tener una continua relación con las bases y escuchar sus demandas y propuestas, aceptar la crítica constructiva y hacer autocrítica, transparencia y no corrupción, participación popular a los más diversos niveles. También exigirle que atienda como es debido las demandas de las madres de muchachas/os caídos en la guerra y de los lisiados de guerra, y recuperar lo que antes se decía: que los niños/as son los mimados de la Revolución, pues en estos 16 años han sido los olvidados y abandonados de los gobiernos en turno. Y a nivel de ideales: recuperar operativamente el legado de Sandino y de Carlos Fonseca.
– Arnaldo Zenteno. Comunidades Eclesiales de Base(CEB)
Managua, Nicaragua- 6 de noviembre del 2006