
Perdura todavía en algunos el mito del artista como un ser ajeno al mundo que le rodea y que espera del cielo la inspiración. Y también una pobre concepción del arte que lo reduce a pura imitación, cuando no a sublimación de la realidad terrena en un alejamiento buscado de la vida social. Aquí nos acercaremos a la obra de Cristóbal Aguilar desde otra perspectiva, desde la teoría ligada a la historia, de una historia desgraciada en el caso de España.