Categoría: Ecología social
Más minería en nombre del Green New Deal. La clasificación de materiales estratégicos de la UE vuelve a supeditar los ecosistemas a los intereses de los halcones militaristas.
La manera irrefrenable en la que el capitalismo dislocó el metabolismo socionatural, se ha vuelto quizás una de las muestras más contundentes de la necesidad de superar este modo de producción. Su continuidad se ha vuelto una amenaza para la supervivencia de la humanidad y de muchas otras especies. La seguidilla de eventos disruptivos, vinculados muchos de ellos al cambio climático, pero también a otros trastornos ambientales que produce la dinámica desquiciada de la acumulación, plantean con urgencia la necesidad de activar los “frenos de emergencia”.
Con mi buen amigo, el profesor Salvador López Arnal, entré en contacto epistolar y on line, por primera vez, el día 1 de mayo del año 2014. Me decía lo siguiente:
La selva amazónica atraviesa una megasequía con cauces agotados, muerte de animales e impacto en los ecosistemas y las comunidades de agricultores familiares y pueblos indígenas. El fenómeno de El Niño y la crisis climática la agudizan, pero es necesario mirar las responsabilidades del agronegocio, la deforestación, la minería y las hidroeléctricas para pensar soluciones de preservación con justicia social.
Decenas de organizaciones ambientales y de la sociedad civil europeas y de España, Portugal, Italia, Francia, Bulgaria, Polonia o Malta, así como eurodiputados/as y partidos políticos han querido unirse para expresar su preocupación ante la probable inclusión en dicho listado del H2Med, una infraestructura que aspira a ser el mayor corredor de hidrógeno verde entre la península ibérica y el centro de Europa, así como de otras infraestructuras para el transporte de hidrógeno que consideran innecesarias y sobredimensionadas.