Cuando el golpe, mis tíos milicos fueron reprimidos, encarcelados, torturados, expulsados de las filas gracias a Dios y a la santísima firgen, y murieron en el exilio.
Cuando el golpe, mis tíos milicos fueron reprimidos, encarcelados, torturados, expulsados de las filas gracias a Dios y a la santísima firgen, y murieron en el exilio.
En todo Chile hay tomas de terreno, la historia de lucha de nuestro pueblo ha hecho suya la ocupación de tierras para resolver las necesidades básicas de subsistencia, y sin duda seguirán siendo un camino para las familias pobres en este contexto de injusticia y explotación.
Por lo tanto, el CODEHS, se pone al servicio de los pobladores y buscará por todos los medios, denunciar ante los organismos internacionales la permanente violación a los derechos humanos y sociales de este Gobierno que pasará a la historia sin pena ni gloria.
«Nuestra toma era limpia, organizada, teníamos una escuela con profesores nuestros, talleres de fútbol y una cancha. En cuanto se entraba a la toma había que armar una casa o caseta en 7 días, no carpas. Rápidamente se convirtió en una población. Mi casa era preciosa, hecha con mis manos, rodeada de árboles frutales»
Para quienes queremos poner fin a la corrupción y construir una sociedad mejor, constituye un deber imperativo hacerlo, a la vez que tomar la iniciativa en el continente. Aunque la ‘élite política’ se indigne. Aunque ponga múltiples obstáculos.
Lo más chocante es que un gobierno que se dice de izquierda continúe promocionando la querella que inició Sebastián Piñera y no sólo acepte sino que celebre la condena.
La Universidad de Chile ha sido durante años un espacio de activismo palestino, y se han denunciado muchas veces sus persistentes vínculos con las universidades del Estado genocida. Pero para sus autoridades, hacer tratos con criminales de lesa humanidad no parece ser violento.
Coincidiendo con el recuerdo de aquella Al Nakba los estudiantes denunciaron la actual catástrofe, el exterminio llevado a cabo por la entidad nacionalsionista israelí administrada por Benjamín Netanyahu y un gabinete civil y militar considerado el más extremista dentro de una sociedad que tiene esas características.
En la condena impuesta sobre la persona del werken Héctor Llaitul Carrillanca, se pretende ejemplificar el castigo a un digno proceso de lucha emancipatoria y a un proyecto político de reconstrucción del pueblo nación mapuche, y constituye una muestra de la obsecuencia y servilismo del gobierno actual con los intereses del capital forestal y de la ultraderecha.
Gabriel Boric y sus equipos podrán decir que son de izquierda, pero, vistos desde sus actos, dichos, renunciamientos y traiciones, solo son renegados, acomodados y rendidos.