Al grito de «Lucio fuera», una marcha de alrededor de 200.000 personas recorrió hoy (16 de enero) las calles céntricas de Quito rechazando las veleidades dictatoriales del presidente Lucio Gutiérrez.La movilización fue convocada por la Asamblea de Quito que preside el alcalde de la ciudad, Gral.(r) Paco Moncayo, y recibió el respaldo de un abanico […]
Al grito de «Lucio fuera», una marcha de alrededor de 200.000 personas recorrió hoy (16 de enero) las calles céntricas de Quito rechazando las veleidades dictatoriales del presidente Lucio Gutiérrez.
La movilización fue convocada por la Asamblea de Quito que preside el alcalde de la ciudad, Gral.(r) Paco Moncayo, y recibió el respaldo de un abanico muy amplio de fuerzas, que van desde las cámaras empresariales, hasta sindicatos, ONGs y organizaciones barriales, pasando por el socialdemócrata partido Izquierda Democrática y el Movimiento Pachakutik.
La marcha, dada su masividad y la indignación que se ha apoderado de la ciudadanía por la desastrosa conducción del Estado por parte de Gutiérrez, hizo recordar las grandes movilizaciones que culminaron con el derrocamiento de Abdala Bucaram en 1997 y de Jamil Mahuad a comienzos del año 2000.
Paralelamente a esta gran manifestación, el gobierno organizó, el mismo día y a la misma hora, una concentración (inicialmente convocada como contra-marcha) en la Plaza de la Independencia, sede del gobierno, a escasos 100 metros de la manifestación ciudadana.
Se calcula que la concentración gobiernista congregó a unas 10.000 personas. Sectores de oposición denunciaron que Gutiérrez utilizó toda la maquinaria y los recursos del Estado para movilizar a indígenas y pobladores empobrecidos, bajo promesas de incluirlos en programas de vivienda popular. Además del transporte y la alimentación, el gobierno les pagó una determinada cantidad de dinero.
Los convocantes declararon que la movilización no apuntaba a la caída de Gutiérrez sino a exigirle rectificaciones y exhortaron a que vuelva a instaurarse la democracia en el país. Los movimientos sociales, sin embargo, participaron con otros objetivos. Humberto Cholango, dirigente de ECUARUNARI, principal organización de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), dijo que
«esta marcha tiene como propósitos rechazar el Tratado de Libre Comercio, el Plan Colombia, el intervencionismo norteamericano, la acción dictatorial que el gobierno de Gutiérrez quiere implementar en el país en contra de la sociedad ecuatoriana».
La manifestación se realiza en medio de una profunda crisis política que sacude al Ecuador desde que una mayoría legislativa afín al gobierno reorganizó la Corte Suprema de Justicia, el Tribunal Supremo Electoral y el Tribunal Constitucional. Esta mayoría estuvo integrada por el oficialista Partido Sociedad Patriótica, el Partido Roldosista Ecuatoriano (PRE) que dirige, desde Panamá, el presidente Abdala Bucaram, prófugo de la justicia, el PRIAN, liderado por Alvaro Noboa, uno de los hombres más ricos del Ecuador, por el Movimiento Popular Democrático (MPD) y el Partido Socialista Ecuatoriano (PSE) , y por diputados desafiliados de varios partidos. Cada uno de estos, a cambio de sus votos, participó en el reparto de los puestos.
El gobierno de Gutiérrez logró alejar de la función judicial y de los otros órganos del Estado al derechista Partido Social Cristiano y a su caudillo León Febres Cordero, sin embargo, éstos quedaron en manos de los allegados de Bucaram y Noboa, con lo cual la crisis
institucional se ha profundizado. Frente a ello, no ha hay salidas claras. Tanto el gobierno como el ex vicepresidente de la República, León Roldós, han planteado sendas consultas populares para salir del impasse pero estas no se presentan como soluciones viables.
El diputado Julio González, del Movimiento Pachakutik, dijo que «el pueblo ha llegado a hostigarse de esta dictadura impuesta desde hace dos meses por el monstruo de tres cabezas conformado por Bucaram, Noboa y Lucio Gutiérrez. Este último va a tener que rectificar o irse afuera como en otras ocasiones se ha manifestado el pueblo para sacar a gobiernos corruptos».
La CONAIE que apoyó pero no participó con su contingente en la macha de Quito, anunció que desde el 16 de febrero inicia «Movilizaciones por el Ecuador Plurinacional», con una agenda que aglutine a los sectores empobrecidos del país y que tenga como objetivos impedir la suscripción del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, y rechazar el Plan Colombia, el endeudamiento y la privatización del
patrimonio nacional.
El panorama en el Ecuador es confuso, mientras en las calles va ganando fuerza la consigna de «Lucio fuera» y el slogan de origen argentino «que se vayan todos».
La movilización fue convocada por la Asamblea de Quito que preside el alcalde de la ciudad, Gral.(r) Paco Moncayo, y recibió el respaldo de un abanico muy amplio de fuerzas, que van desde las cámaras empresariales, hasta sindicatos, ONGs y organizaciones barriales, pasando por el socialdemócrata partido Izquierda Democrática y el Movimiento Pachakutik.
La marcha, dada su masividad y la indignación que se ha apoderado de la ciudadanía por la desastrosa conducción del Estado por parte de Gutiérrez, hizo recordar las grandes movilizaciones que culminaron con el derrocamiento de Abdala Bucaram en 1997 y de Jamil Mahuad a comienzos del año 2000.
Paralelamente a esta gran manifestación, el gobierno organizó, el mismo día y a la misma hora, una concentración (inicialmente convocada como contra-marcha) en la Plaza de la Independencia, sede del gobierno, a escasos 100 metros de la manifestación ciudadana.
Se calcula que la concentración gobiernista congregó a unas 10.000 personas. Sectores de oposición denunciaron que Gutiérrez utilizó toda la maquinaria y los recursos del Estado para movilizar a indígenas y pobladores empobrecidos, bajo promesas de incluirlos en programas de vivienda popular. Además del transporte y la alimentación, el gobierno les pagó una determinada cantidad de dinero.
Los convocantes declararon que la movilización no apuntaba a la caída de Gutiérrez sino a exigirle rectificaciones y exhortaron a que vuelva a instaurarse la democracia en el país. Los movimientos sociales, sin embargo, participaron con otros objetivos. Humberto Cholango, dirigente de ECUARUNARI, principal organización de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), dijo que
«esta marcha tiene como propósitos rechazar el Tratado de Libre Comercio, el Plan Colombia, el intervencionismo norteamericano, la acción dictatorial que el gobierno de Gutiérrez quiere implementar en el país en contra de la sociedad ecuatoriana».
La manifestación se realiza en medio de una profunda crisis política que sacude al Ecuador desde que una mayoría legislativa afín al gobierno reorganizó la Corte Suprema de Justicia, el Tribunal Supremo Electoral y el Tribunal Constitucional. Esta mayoría estuvo integrada por el oficialista Partido Sociedad Patriótica, el Partido Roldosista Ecuatoriano (PRE) que dirige, desde Panamá, el presidente Abdala Bucaram, prófugo de la justicia, el PRIAN, liderado por Alvaro Noboa, uno de los hombres más ricos del Ecuador, por el Movimiento Popular Democrático (MPD) y el Partido Socialista Ecuatoriano (PSE) , y por diputados desafiliados de varios partidos. Cada uno de estos, a cambio de sus votos, participó en el reparto de los puestos.
El gobierno de Gutiérrez logró alejar de la función judicial y de los otros órganos del Estado al derechista Partido Social Cristiano y a su caudillo León Febres Cordero, sin embargo, éstos quedaron en manos de los allegados de Bucaram y Noboa, con lo cual la crisis
institucional se ha profundizado. Frente a ello, no ha hay salidas claras. Tanto el gobierno como el ex vicepresidente de la República, León Roldós, han planteado sendas consultas populares para salir del impasse pero estas no se presentan como soluciones viables.
El diputado Julio González, del Movimiento Pachakutik, dijo que «el pueblo ha llegado a hostigarse de esta dictadura impuesta desde hace dos meses por el monstruo de tres cabezas conformado por Bucaram, Noboa y Lucio Gutiérrez. Este último va a tener que rectificar o irse afuera como en otras ocasiones se ha manifestado el pueblo para sacar a gobiernos corruptos».
La CONAIE que apoyó pero no participó con su contingente en la macha de Quito, anunció que desde el 16 de febrero inicia «Movilizaciones por el Ecuador Plurinacional», con una agenda que aglutine a los sectores empobrecidos del país y que tenga como objetivos impedir la suscripción del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, y rechazar el Plan Colombia, el endeudamiento y la privatización del
patrimonio nacional.
El panorama en el Ecuador es confuso, mientras en las calles va ganando fuerza la consigna de «Lucio fuera» y el slogan de origen argentino «que se vayan todos».
Minga Informativa de Movimientos Sociales
Manifiesto de la Conaie en Riobamba
Desde este 16 de febrero la CONAIE inicia movilizaciones Jornadas de lucha para impedir el TLC, el Plan Colombia y privatizaciones
Las organizaciones provinciales, filiales de la CONAIE, así como líderes indígenas y autoridades locales, reunidos en la Asamblea Nacional, del 14 y 15 de febrero en Riobamba, decidieron iniciar las Movilizaciones por el Ecuador Plurinacional con una agenda que, aglutinando a los sectores empobrecidos del país, tenga entre otros objetivos:
– Impedir la suscripción del Tratado de Libre Comercio con EEUU por las nefastas consecuencias que tendrá contra los pueblos; Exigir al gobierno la convocatoria a una Consulta Popular.
– Demandar el retiro inmediato de las tropas norteamericanas diseminadas en el territorio nacional, impedir el otorgamiento de la inmunidad a los militares estadounidenses, así como la finalización inmediata del convenio de la Base de Manta.
– Denunciar los proyectos de privatización disfrazados bajo el concepto de concesiones.
– Impedir la persecución a las comunidades, pueblos y nacionalidades y dirigentes indígenas que habitan en la frontera con Colombia.
– Detener las propuestas de privatización del patrimonio nacional, así como el nuevo endeudamiento.
– Denunciar y detener la agresión a los pueblos y nacionalidades indígenas por parte del Banco Mundial, organismos multilaterales y
las corporaciones transnacionales (petroleras, mineras, madereras) que propician múltiples actos de etnocidio, invasión y el desplazamiento de la comunidad de Sarayacu y otras. Defender la autonomía de los territorios indígenas que incluya el respeto la franja de seguridad nacional reconocida por el Estado ecuatoriano en la Provincia de Pastaza.
La CONAIE quiere aclarar al país, que ni estuvo ni está entre las organizaciones convocantes de la llamada «Marcha de Quito» pero que, sin embargo, respeta los criterios de los organizadores. Asimismo; la CONAIE considera que es necesario inscribir su participación en la «Jornada de Lucha» del 16 de febrero, como el inicio de una Movilización Nacional, con las propuestas, demandas y posiciones que todos los ecuatorianos y ecuatorianas mantenemos y que son parte de un proceso histórico de reflexión, lucha y resistencia.
La CONAIE considera que uno de los puntos que la Marcha de Quito no toma en cuenta de manera prioritaria es la firma del TLC
con Estados Unidos, aspecto que la CONAIE considera fundamental en la agenda política del país por las siguientes razones:
– El Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos parte de un principio de confidencialidad que se contradice con cualquier democracia, porque implica una pérdida de soberanía y establece una normativa supranacional con propósitos eminentemente comerciales y económicos en beneficio de las corporaciones.
– La mayoría de indígenas, campesinos y pobladores del Ecuador subsistimos de la producción agropecuaria familiar. Firmar un tratado que modificará las normas, regulaciones y formas de comercio exterior con un solo país, que además impone los términos que a él le convienen, no solo que ignora sino que expone a la población a una mayor exclusión, y pobreza.
– La megadiversidad biológica, fuentes de agua dulce, áreas ecológicas importantes, explotación minera y maderera, en regiones habitadas ancestralmente por los pueblos y naciones, son los verdaderos motivos del Tratado de Libre Comercio. Son las grandes corporaciones transnacionales interesadas en la biotecnología y la conservación ambiental privada, las que pretenden convertir en mercancías a la naturaleza, tal como consta en el capítulo sobre derechos a la inversión privada y propiedad intelectual del TLC.
– Hemos rechazado las propuestas de cambio de las normas y leyes nacionales (como por ejemplo la Ley de Biodiversidad, las reformas o nuevas Leyes de Agua), que implicarían procesos de apropiación privada de aquellos bienes que son comunes.
– Mantenemos la exigencia de que los proyectos de leyes sean tratados públicamente, con transparencia y sin atentar a la soberanía del país, porque hasta el presente han sido negociados desde las sombras y a espaldas del pueblo.
Además del TLC la CONAIE considera pertinente sostener, en la agenda política nacional, la inclusión de los siguientes puntos:
– Rechazo a las nuevas reformas legales que son parte de la Reforma Estructural propuesta por el Banco Mundial al país, en el tema energético (petróleos, energía eléctrica), en la telecomunicación, y en la seguridad social. Rechazamos, por tanto, la pretensión de presentar a discusión del Congreso Nacional una «Ley Trole 4» (o «Ley Combo»), en la cual se propone la privatización del sector eléctrico, de las telefónicas, del petróleo y de la seguridad social.
– Rechazo al nuevo endeudamiento que pretende el gobierno de Lucio Gutiérrez, por la emisión de cerca de 900 millones de dólares en bonos del Estado. Denunciamos la ilegalidad de esta nueva emisión de deuda externa, y planteamos la ilegalidad de toda la deuda externa ecuatoriana, por tanto su auditoría inmediata y la suspensión de pagos.
– Rechazo a la intromisión del gobierno en las instituciones autónomas Indígenas, como sucede en el Consejo de Desarrollo de las Nacionalidades y Pueblos del Ecuador (CODENPE), la Dirección Nacional de Salud de los Pueblos Indígenas (DNSPI), la Dirección Nacional de Educación Intercultural Bilingüe (DINEIB), en particular el Acuerdo Ministerial No. 0600; y, en la Imprenta entregada en comodato a la CONAIE por 10 años.
– El Ecuador no debe ser parte, de ninguna manera del Plan Colombia. La resolución de los graves problemas internos de nuestros hermanos colombianos no atraviesa por una salida militar y guerrerista. Creemos en la paz, el diálogo y el respeto a la soberanía y autodeterminación de los pueblos y los países. La solidaridad internacional es nuestra propuesta. El Plan Colombia afecta a los pueblos indígenas, comunidades campesinas y pobladores, ahora perseguidos y vulnerados en sus derechos humanos básicos. Denunciamos la militarización de nuestra frontera, la persecución al pueblo Awa.
– Estamos en frontal oposición a la política guerrerista del gobierno estadounidense y sus brutales ocupaciones de Afganistán e Irak.
Rechazamos la violación flagrante de los derechos humanos de los pueblos mencionados por parte de las fuerzas de ocupación
estadounidense y demandamos la intervención inmediata de las Naciones Unidas, y el Tribunal Penal Internacional para el castigo al genocidio norteamericano en Irak.
– Expresamos nuestra irrestricta solidaridad con los pueblos y gobiernos de Cuba y Venezuela, en el camino soberano y democrático que mantienen. Consideramos como una prioridad política la creación de la Nación Sudamericana, Bolivariana y Plurinacional. Respaldamos la propuesta del ALBA del Estado Bolivariano de Venezuela como opción de integración continental.
La institucionalidad estatal existente en el Ecuador ha excluido a la mayoría de ecuatorianos y ecuatorianas siempre. Creemos que es necesario impulsar la constitución de un Estado Plurinacional en el cual se establezca una institucionalidad realmente democrática, participativa, justa y solidaria, que implica la refundación del país y en el cual los derechos de todos y todas sean efectiva garantía de una sociedad equitativa.
Ama killa, Ama llulla, Ama Shwa
Luis Macas, Presidente CONAIE
Humberto Cholango, Presidente de ECUARUNARI
Luis Vargas, Presidente de CONFENIAE
Wilson Añapa, Vicepresidente de CONAICE
Manifiesto de la Conaie en Riobamba
Desde este 16 de febrero la CONAIE inicia movilizaciones Jornadas de lucha para impedir el TLC, el Plan Colombia y privatizaciones
Las organizaciones provinciales, filiales de la CONAIE, así como líderes indígenas y autoridades locales, reunidos en la Asamblea Nacional, del 14 y 15 de febrero en Riobamba, decidieron iniciar las Movilizaciones por el Ecuador Plurinacional con una agenda que, aglutinando a los sectores empobrecidos del país, tenga entre otros objetivos:
– Impedir la suscripción del Tratado de Libre Comercio con EEUU por las nefastas consecuencias que tendrá contra los pueblos; Exigir al gobierno la convocatoria a una Consulta Popular.
– Demandar el retiro inmediato de las tropas norteamericanas diseminadas en el territorio nacional, impedir el otorgamiento de la inmunidad a los militares estadounidenses, así como la finalización inmediata del convenio de la Base de Manta.
– Denunciar los proyectos de privatización disfrazados bajo el concepto de concesiones.
– Impedir la persecución a las comunidades, pueblos y nacionalidades y dirigentes indígenas que habitan en la frontera con Colombia.
– Detener las propuestas de privatización del patrimonio nacional, así como el nuevo endeudamiento.
– Denunciar y detener la agresión a los pueblos y nacionalidades indígenas por parte del Banco Mundial, organismos multilaterales y
las corporaciones transnacionales (petroleras, mineras, madereras) que propician múltiples actos de etnocidio, invasión y el desplazamiento de la comunidad de Sarayacu y otras. Defender la autonomía de los territorios indígenas que incluya el respeto la franja de seguridad nacional reconocida por el Estado ecuatoriano en la Provincia de Pastaza.
La CONAIE quiere aclarar al país, que ni estuvo ni está entre las organizaciones convocantes de la llamada «Marcha de Quito» pero que, sin embargo, respeta los criterios de los organizadores. Asimismo; la CONAIE considera que es necesario inscribir su participación en la «Jornada de Lucha» del 16 de febrero, como el inicio de una Movilización Nacional, con las propuestas, demandas y posiciones que todos los ecuatorianos y ecuatorianas mantenemos y que son parte de un proceso histórico de reflexión, lucha y resistencia.
La CONAIE considera que uno de los puntos que la Marcha de Quito no toma en cuenta de manera prioritaria es la firma del TLC
con Estados Unidos, aspecto que la CONAIE considera fundamental en la agenda política del país por las siguientes razones:
– El Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos parte de un principio de confidencialidad que se contradice con cualquier democracia, porque implica una pérdida de soberanía y establece una normativa supranacional con propósitos eminentemente comerciales y económicos en beneficio de las corporaciones.
– La mayoría de indígenas, campesinos y pobladores del Ecuador subsistimos de la producción agropecuaria familiar. Firmar un tratado que modificará las normas, regulaciones y formas de comercio exterior con un solo país, que además impone los términos que a él le convienen, no solo que ignora sino que expone a la población a una mayor exclusión, y pobreza.
– La megadiversidad biológica, fuentes de agua dulce, áreas ecológicas importantes, explotación minera y maderera, en regiones habitadas ancestralmente por los pueblos y naciones, son los verdaderos motivos del Tratado de Libre Comercio. Son las grandes corporaciones transnacionales interesadas en la biotecnología y la conservación ambiental privada, las que pretenden convertir en mercancías a la naturaleza, tal como consta en el capítulo sobre derechos a la inversión privada y propiedad intelectual del TLC.
– Hemos rechazado las propuestas de cambio de las normas y leyes nacionales (como por ejemplo la Ley de Biodiversidad, las reformas o nuevas Leyes de Agua), que implicarían procesos de apropiación privada de aquellos bienes que son comunes.
– Mantenemos la exigencia de que los proyectos de leyes sean tratados públicamente, con transparencia y sin atentar a la soberanía del país, porque hasta el presente han sido negociados desde las sombras y a espaldas del pueblo.
Además del TLC la CONAIE considera pertinente sostener, en la agenda política nacional, la inclusión de los siguientes puntos:
– Rechazo a las nuevas reformas legales que son parte de la Reforma Estructural propuesta por el Banco Mundial al país, en el tema energético (petróleos, energía eléctrica), en la telecomunicación, y en la seguridad social. Rechazamos, por tanto, la pretensión de presentar a discusión del Congreso Nacional una «Ley Trole 4» (o «Ley Combo»), en la cual se propone la privatización del sector eléctrico, de las telefónicas, del petróleo y de la seguridad social.
– Rechazo al nuevo endeudamiento que pretende el gobierno de Lucio Gutiérrez, por la emisión de cerca de 900 millones de dólares en bonos del Estado. Denunciamos la ilegalidad de esta nueva emisión de deuda externa, y planteamos la ilegalidad de toda la deuda externa ecuatoriana, por tanto su auditoría inmediata y la suspensión de pagos.
– Rechazo a la intromisión del gobierno en las instituciones autónomas Indígenas, como sucede en el Consejo de Desarrollo de las Nacionalidades y Pueblos del Ecuador (CODENPE), la Dirección Nacional de Salud de los Pueblos Indígenas (DNSPI), la Dirección Nacional de Educación Intercultural Bilingüe (DINEIB), en particular el Acuerdo Ministerial No. 0600; y, en la Imprenta entregada en comodato a la CONAIE por 10 años.
– El Ecuador no debe ser parte, de ninguna manera del Plan Colombia. La resolución de los graves problemas internos de nuestros hermanos colombianos no atraviesa por una salida militar y guerrerista. Creemos en la paz, el diálogo y el respeto a la soberanía y autodeterminación de los pueblos y los países. La solidaridad internacional es nuestra propuesta. El Plan Colombia afecta a los pueblos indígenas, comunidades campesinas y pobladores, ahora perseguidos y vulnerados en sus derechos humanos básicos. Denunciamos la militarización de nuestra frontera, la persecución al pueblo Awa.
– Estamos en frontal oposición a la política guerrerista del gobierno estadounidense y sus brutales ocupaciones de Afganistán e Irak.
Rechazamos la violación flagrante de los derechos humanos de los pueblos mencionados por parte de las fuerzas de ocupación
estadounidense y demandamos la intervención inmediata de las Naciones Unidas, y el Tribunal Penal Internacional para el castigo al genocidio norteamericano en Irak.
– Expresamos nuestra irrestricta solidaridad con los pueblos y gobiernos de Cuba y Venezuela, en el camino soberano y democrático que mantienen. Consideramos como una prioridad política la creación de la Nación Sudamericana, Bolivariana y Plurinacional. Respaldamos la propuesta del ALBA del Estado Bolivariano de Venezuela como opción de integración continental.
La institucionalidad estatal existente en el Ecuador ha excluido a la mayoría de ecuatorianos y ecuatorianas siempre. Creemos que es necesario impulsar la constitución de un Estado Plurinacional en el cual se establezca una institucionalidad realmente democrática, participativa, justa y solidaria, que implica la refundación del país y en el cual los derechos de todos y todas sean efectiva garantía de una sociedad equitativa.
Ama killa, Ama llulla, Ama Shwa
Luis Macas, Presidente CONAIE
Humberto Cholango, Presidente de ECUARUNARI
Luis Vargas, Presidente de CONFENIAE
Wilson Añapa, Vicepresidente de CONAICE