Los ecuatorianos iniciaron hoy un período de reflexión previo a la consulta popular del domingo próximo para instalar una Asamblea Constituyente de plenos poderes. Esta etapa comenzó tras una intensa campaña a favor del «sí», en la cual estuvieron involucrados movimientos sociales y políticos que votaron el 26 de noviembre pasado por la opción del […]
Los ecuatorianos iniciaron hoy un período de reflexión previo a la consulta popular del domingo próximo para instalar una Asamblea Constituyente de plenos poderes.
Esta etapa comenzó tras una intensa campaña a favor del «sí», en la cual estuvieron involucrados movimientos sociales y políticos que votaron el 26 de noviembre pasado por la opción del cambio propuesta por Rafael Correa.
Durante las próximas 48 horas está vigente en todo el territorio nacional la ley seca y el Tribunal Supremo Electoral concluirá la entrega de las boletas y urnas a los dos mil 254 recintos electorales.
En una alocución realizada pocas horas antes, el presidente Correa subrayó que este referendo constituye un reclamo de la ciudadanía realizado durante la última campaña electoral.
La Asamblea Constituyente es la máxima expresión de que la soberanía radica en el pueblo, resaltó el mandatario al insistir en su validez como un mecanismo para reformular a las instituciones y al Estado.
El jefe de Estado señaló que esa Asamblea elaborará una nueva Constitución que despolitice los tribunales, las autoridades de control, reestructure el Congreso y establezca una democracia representativa y participativa.
Rememoró que la Constituyente persigue acabar con los males que afectaron el país en la última década, en la cual tuvieron ocho presidentes, millones de ecuatorianos abandonaron su tierra y se registró del desfalco bancario.
Correa destacó que si el pueblo se pronuncia a favor de esa Asamblea, se conformará la misma de acuerdo a un estatuto que busca eliminar las graves injusticias del sistema político actual.
El dignatario hizo una explicación sobre la composición y funcionamiento de la Constituyente y arremetió contra las que calificó de voces malintencionadas que han tratado de confundir, tergiversar, crear temor entre la ciudadanía.
Para despejar cualquier pánico, reiteró que una vez elaborada la Carta Magna, la misma deberá aprobarse nuevamente en las urnas, a través de un referendo.
Durante esta semana el dignatario recorrió varias ciudades ecuatorianas, aprovechó la ocasión promover el «si» en la consulta y recibió gran respaldo de la población.
A diferencia de los movimientos a favor de la Constituyente, que cerraron ayer sus campañas en las calles, los opositores a esa Asamblea realizaron actos en lugares cerrados y con poco respaldo.