El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, firmó este martes el documento para legalizar a los haitianos que se encuentran en su país y que facilita el traslado de sus familiares que se encuentran en la devastada nación caribeña. El gobernante ecuatoriano firmó, en presencia del presidente de Haití, René Preval, la legalización «de los haitianos en […]
El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, firmó este martes el documento para legalizar a los haitianos que se encuentran en su país y que facilita el traslado de sus familiares que se encuentran en la devastada nación caribeña. El gobernante ecuatoriano firmó, en presencia del presidente de Haití, René Preval, la legalización «de los haitianos en el país y la facilidad de que los familiares que están en Haití» se trasladen a la nación andina. Asimismo, los que hayan llegado a la República de Ecuador antes del 31 de enero tendrán su visa de inmigrante sin costo alguno.
Correa señaló en rueda de prensa conjunta con su par haitiano, René Preval, que el decreto incluye a 15.000 inmigrantes del país caribeño. Durante el evento con la prensa, sobre los resultados de la Cumbre extraordinaria de la Unasur, Correa señaló que «se necesita la colaboración internacional, pero no basta con querer ayudar, sino saber ayudar».
Explicó el nuevo diseño de cooperación Sur-Sur, basado en la unión de los países de la región para cooperar entre sí, propuesta impulsada por el propio gobernante en calidad de presidente por témpore del organismo.
«La cooperación Norte-Sur es masiva ante las desgracias, pero luego se olvidan», muchas veces añadió que esos donantes son «cómplices de las desgracias», indicó.
Asimismo recordó que mucha de esa ayuda de los países del Hemisferio Norte «se hace dejando a un lado al gobierno».
Al ser interrogado sobre si ha conversado con sus colegas para acompañar a Haití en su refundación, el presidente ecuatoriano aseguró que hay un proceso de seguimiento «a mediano y largo plazo, Haití va a salir adelante y se necesita reconstruir un Estado haitiano».
«Unasur es el acompañamiento de mediano y largo plazo», enfatizó.
En respuesta a una pregunta de un periodista sobre la ayuda a la nación caribeña a través de Unasur que, según el reportero, busca fortalecer una identidad del bloque suramericano, y que ha sido debilitada por los roces diplomáticos entre Colombia-Ecuador y Colombia-Venezula, el presidente Correa sostuvo que ese tema «no es impedimento para ayudar a Haití».
«Qué mejor ejemplo que la Unión Europea (UE)», que está integrada por países con diferentes modelos de gobierno, religión, raza e idiomas «y hoy es una sola nación».
En este sentido insistió en que es «mucho más lo que nos une, que lo que nos separa, comparado con otros procesos de integración, es nada», dijo y afirmó que las dificultades pueden superarse por la vía del diálogo.
Con respecto a un posible encuentro con su homólogo colombiano, Álvaro Uribe, Correa recordó que «nadie puede negar lo del 1 de marzo de 2008», en referencia a la fecha en la que el ejército colombiano bombardeó de manera ilegal al territorio ecuatoriano.
Destacó que en el caso «se hizo lo que se tenía que hacer (…) se defendió al país con dignidad».
Luego de casi dos años del ataque, que originó el quebrantamiento de los vínculos bilaterales entre ambas naciones, Correa enfatizó que «viendo hacia el futuro, es claro que lo más conveniente (…) es tratar de normalizar, lo más rápidamente las relaciones, en el marco de soberanía y dignidad. En ese sentido, es muy positiva la visita del presidente Uribe».
«Agradecemos la visita del señor presidente Uribe (…) porque se trata del representante de un pueblo hermano», agregó.
Correa hizo hincapié en lo fructífero que resultó el encuentro entre los mandatarios y los representantes de los gobiernos de la Unasur, en la cita extraordinaria de Quito.
Recordó la aprobación de un fondo de ayuda a Haití de 100 millones de dólares, la solicitud (por parte de los países del bloque) de un crédito de hasta 200 millones de dólares al Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la recuperación del sector agrícola haitiano, el incremento de insumos en el sector salud, la reconstrucción de la infraestructura, estimulación de las fuentes energéticas, entre otros puntos acordados minutos antes por el pleno en una declaración final de 12 puntos.
Anunció que después de la Cumbre de Río, que se celebrará los próximos 22 y 23 de febrero en México, se realizará otra reunión de la Unasur para concretar las diferentes ayudas.
Por último, agradeció a los jefes de Estado por participar en la reunión que calificó de histórica y agregó que «somos países pobres (…) es nuestro desafió, dentro de la pobreza hay solidaridad y Haití puede contar con nosotros».
«Pese a que Latinomérica no ha salido de la pobreza, el corazón es muy amplio, muy ancho», concluyó Correa.