José Miguel Insulza, Secretario General de la OEA, cambió su posición respecto a las ilegales elecciones de Honduras ayer en la sesión extraordinaria que la institución continental celebró para determinar su posición sobre las pasada jornada electoral en Honduras. En su discurso, Insulza, no mencionó la alta abstención (en torno al 75%) de la jornada, […]
José Miguel Insulza, Secretario General de la OEA, cambió su posición respecto a las ilegales elecciones de Honduras ayer en la sesión extraordinaria que la institución continental celebró para determinar su posición sobre las pasada jornada electoral en Honduras.
En su discurso, Insulza, no mencionó la alta abstención (en torno al 75%) de la jornada, ni la represión que denunciaron las organizaciones de derechos humanos, ni se hizo eco de las denuncias que señalaron fraudes como la presión violenta con la que la polícía hondureña obligó a votar a miles de ciudadanos o los ciudadanos salvadoreños que votaron ilegalmente.
En cambio el secretario restó credibilidad al presidente hondureño Manuel Zelaya al descartar que sus datos aportados sobre las elecciones fueran confiables y lo igualó al Tribunal Supremo electoral hondureño, manejado por los golpistas.
Además Insulza respaldó que el nuevo dictador hondureño, Pepe Lobo, el cual no representa ni a 1 de cada 10 hondureños, es el más indicado para encabezar un gobierno de reconciliación, relegando al legítimo y legal presidente de Honduras, Manuel Zelaya, a un segundo plano.
Insulza remarcó los logros logrados por la OEA, entre los que no se encuentran la restitución de Zelaya, pero si que «todos los países miembros de la OEA reconocen que lo sucedido el 28 de junio pasado fue un golpe de estado, que Zelaya será presidente hasta el 27 de enero de 2010 y que nadie ha reconocido el gobierno de facto de Micheletti».
Fuente: http://www.tercerainformacion.es/spip.php?article11522