Traducido del ruso para Rebelión por Arturo Marián Llanos
Hace dos años las dos dinastías financieras más famosas del planeta han concluido una alianza que de inmediato planteó multitud de preguntas y de versiones conspirológicas.
A los analistas esta alianza les pareció extraña, inesperada. Se consideraba que ambos clanes desde hace mucho tiempo están enfrentados en una cruel guerra de competencia. Los conspirólogos veían sus ecos en muchos acontecimientos mundiales. Comenzando por el auge económico de China con la ayuda de los Rothschild, que ha golpeado a los EE.UU. (feudo de los Rockefeller), la aparición del euro (contrapeso al dólar norteamericano) y terminando por multitud de otras pequeñeces. Por ejemplo, la explosión, ocurrida en la primavera de 2010 en el golfo de México, en la plataforma petrolífera de «British Petroleum», empresa considerada como un activo seguro de los Rothschild. Incluso mencionaban a nuestro Mijaíl Jodorkovski como otra víctima de la lucha entre los dos clanes. Éste, que tenía varios proyectos conjuntos con los Rothschild, introdujo al veterano de la familia sir Jacob en el Consejo de su fondo benéfico «Rusia abierta». Los Rockefeller presuntamente también le habían echado el ojo a «YUKOS». Como resultado de la lucha en la sombra entre los titanes, Jodorkovski fue detenido. (Recordemos que pocos años antes Putin había traicionado a la «Familia» yeltsinista, situada bajo la tutela del Partido Demócrata de los EE.UU., colocándose bajo la protección del Partido Republicano – N. del T.). Jodorkovski perdió «YUKOS», y muchas más cosas que se adjudicaban a estos clanes competidores a muerte. De repente se unieron y, encima, crearon un trust conjunto de $ 40 mil millones. Las conversaciones secretas duraron dos años, así que la decisión fue premeditada.
Algunos analíticos en seguida sentenciaron: ¡las dos familias unen los capitales para sobrevivir a la crisis mundial!
El historiador Andrei Fúrsov tenía otra opinión.
– Se trata de una concentración del capital y del poder en vísperas de serios sobresaltos que se salen del marco de las finanzas y de la economía, -dijo entonces Fúrsov en el diario KP- no se trata simplemente de sobrevivir a la crisis, como piensan algunos, sino de presentar un aviso para el futuro, anunciando su deseo de dominio en un mundo ya de postcrisis y postcapitalista.
La unión de los capitales de los Rothshild y los Rockefeller no es más que la punta del iceberg, la parte visible de los acuerdos secretos alcanzados en la lucha de unas sociedades cerradas contra otras. Ha pasado un año. Le pido al director del Instituto de análisis sistémico-estratégico Andrei Fúrsov volver al tema de esta alianza. ¿Qué ha pasado en realidad?
– La alianza en efecto es un tanto extraña. Primer detalle extraño: dos poderosísimos clanes, de la primera línea de las familias más poderosas a nivel mundial, que llevan cien años controlando el Sistema de la Reserva Federal de los EE.UU., es decir la máquina de imprimir los dólares ¿y solo unen los activos por valor de $ 40 mil millones?
– Pero es una suma bien seria, ¿no?
– Lo será para los «Gates» y los «Buffet» cualesquiera.
– ¿Pero por qué habla con tanto desprecio de la gente que lleva años en la lista de los hombres más ricos del planeta según «Forbes»?
– Los rating de los súper ricos mundiales publicados por «Forbes», Bloomberg etc., sirven para engañar a la plebe. ¿Pero qué son los 60-70 mil millones de Gates, de Buffet? Las principales riquezas son las familiares, las que se fueron acumulando durante siglos. La fortuna conjunta de los Rothschild, según los cálculos más prudentes de los expertos, supera los 3,2 BILLONES de dólares («trillones» en ruso, dado que utilizan la escala anglosajona – N. del T.). Pero nadie lo sabe con certeza. No se han dedicado a acumular el patrimonio durante siglos para darlo a conocer. En 1818 los banqueros Rothschild por primera vez doblegaron a los gobiernos europeos. A lo largo de todo el siglo XIX fueron considerados como la familia más rica del planeta.
Los Rockefeller por lo visto tienen un billón menos. El fundador de la dinastía, John, fue el primer mil-millonario del planeta en dólares. Y el hombre más rico que jamás ha vivido sobre la tierra. La revista «Forbes» valoró su fortuna de entonces en $ 318 mil millones según el curso del dólar de finales de 2007. Compárelo con Gates, con Buffet, con Slim… pordioseros.
Las declaraciones de que las riquezas y la influencia de los Rothschild y los Rockefeller han quedado en el pasado, o son ingenuas o se trata de una mentira consciente. Pero no vayamos a demonizar a ambas familias. Tampoco son los número uno.
– Yo pensaba que eran los «más súper».
– Los hay más. Tal vez la familia Nº1 en la tabla mundial de los rangos sea la de los Baruch. Probablemente su fortuna financiera sea menor que la de los Rothschild, Rockefeller. Pero su posición dentro de la cúpula mundial es mucho más alta y seria. Fueron ellos los que todavía en 1613 crearon el «Standard Chartered Bank». ¡El banco de los bancos! Hace justamente 400 años.
– Un minuto, Andrei Ilich… El fundador de la dinastía Rothschild, Mayer Amschel nació en Alemania en 1744. El estadounidense John Rockefeller padre nació en 1839. Ciertamente, resulta que los Baruch son más antiguos. ¿Es que siguen en activo?
Por supuesto. Pero siempre procuran mantenerse en la sombra, no asomarse. Al gran dinero le gusta el silencio. El poder real es el poder secreto. Tan solo el «Lobo solitario de Wall Street», Bernard Baruch, ha transgredido esta regla, pasó de la sombra a la luz. Pero la vida lo exigía. Bernard fue el consejero en economía de CINCO presidentes de los Estados Unidos, incluido el propio Roosevelt. Durante la Primera Guerra Mundial encabezó el Comité Militar-Industrial de los EE.UU., transformando la industria estadounidense en la industria para la guerra. De paso obtuvo buenos beneficios para sí mismo. Fue miembro del Consejo Económico Supremo de la Conferencia de Versalles. El Tratado de Versalles, como se sabe, cambió bastante el mapa político tras la Primera Guerra Mundial. Baruch participó en estos cambios. Más tarde, se dice, que fue Baruch quien sacó el mayor dineral durante la Gran Depresión, que arruinó a muchos accionistas y financieros. Después fue él quien estuvo aconsejando a Roosevelt cómo vencer la Depresión. A lo largo de la Segunda Guerra Mundial también jugó un papel importante en lo que se refiere a la industria militar. Por cierto ¿quién fue el primero en utilizar el término «guerra fría»?
– Creo que Churchill…
– ¡No! Fue su íntimo amigo Bernard Baruch, el consejero del presidente «halcón» Harry Truman, el 16 de abril de 1947. Y no fue en una conversación privada, sino en un discurso oficial ante la cámara de representantes de Carolina del Sur. También fue autor del famoso «Plan Baruch» antinuclear, que fue vetado por la URSS en la ONU. Hasta su muerte, acaecida en 1965, Bernard fue considerado como el «cardenal gris» de la Casa Blanca.
– ¿Y el banco de los bancos creado por los Baruch hace 400 años?
Tampoco ha desaparecido. Está en todos lados, desde Londres hasta Hong Kong. Según algunos datos no confirmados, uno de los aviones que el 11 de septiembre se estrelló contra las torres gemelas, golpeó en la oficina de relaciones exteriores del «Standard Chartered Bank».
Aunque no encontrará el «Standard Chartered Bank» en los rating de las principales instituciones financieras del planeta, existe el banco de los bancos y luego está el resto. Su puesto no se sortea.
Pero volvamos a nuestros…
– … ¡corderos!
– Rothschild y Rockefeller. Espero que le haya quedado claro que para cada clan por separado los 40 mil millones son una suma ridícula. Así que afirmar, como han hecho algunos economistas de fama, que pensaban enfrentarse a la crisis con 40 mil millones repartidos entre los dos, me parece ingenuo. Si fuera cierto, la reunión de una suma tan pequeña para diversificar los riesgos demostraría la debilidad de ambas familias. En tal caso difícilmente harían pública semejante noticia.
Otro detalle extraño de la sonada alianza fue el reparto del capital. Los Rockefeller invirtieron en el trust 37 mil millones, los Rothschild tan solo 3 mil millones. Pero son ellos los que mandan. El acuerdo fue firmado por David Rockefeller, el reconocido cabeza de familia (quien en junio cumplirá 98 años), y por Jacob Rothschild, quien, por decirlo suavemente, no es «la principal autoridad en su familia».
– ¿Y qué significa todo esto?
– En mi opinión, la victoria de los Rothschild sobre los Rockefeller. Todo el siglo XX, entre otras cosas, ha transcurrido bajo el signo de la lucha entre estas dos familias. A principios del siglo, arriba estaban los europeos Rothschild. Pero los Rockefeller ganaron dos guerras mundiales. Y por añadidura la URSS. Los Rothschild habían llegado a Rusia todavía con los zares. Sus competidores les apartaron con Stalin, financiaron los primeros planes quinquenales, la industrialización. David Rockefeller tuvo encuentros con Kruschev, Kosiguin, Gorbachev…
Durante la segunda mitad del siglo XX, los Rothschild han estado preparando la revancha. Y, por fin lograron sus objetivos.
Lo cual no quiere decir que los Rockefeller están acabados. La dura lucha competidora entre las primeras veinte familias mundiales nunca acaba trágicamente, con el exterminio físico de los rivales, como ocurrió con el clan de los Kennedy, que ni siquiera entraba en el primer centenar. En la primera «veintena» por lo general se alcanza el «armisticio del agua». El término está cogido del libro de Kipling sobre Mowgli. ¿Se acuerda? Hay sequia en la jungla, el elefante con la trompa anuncia el armisticio, el antílope bebe agua con avidez al lado del tigre, sin temer el ataque del depredador. En la jungla de piedra también hay su «armisticio del agua». Me recuerda la simbólica portada del libro de Alexandr Zinóviev «Cumbres Hendidas» – dos ratas se están estrangulando con las patitas derechas, mientras que se dan el apretón con las izquierdas. La ilustración refleja perfectamente la situación en la cumbre del poder mundial.
– Ha pasado justo un año. ¿Se puede hacer algún resumen?
– Los Rothschild siguen mandando. En los EE.UU. necesitaban a Obama. Lo tienen. El demócrata Obama fue reelegido para el segundo mandato en la Casa Blanca.
– En efecto, los socios-competidores tienden hacia el Partido Republicano. El miembro del clan Nelson Rockefeller incluso fue vice-presidente de los Estados Unidos con el republicano Ford.
– En China los Rothschild quitaron de en medio al hombre al que claramente temían. Se trataba de un político popular, miembro del Politburó Bo Xilai, quien no sin fundamento, pretendía alcanzar todavía más poder. Pero en el otoño del año pasado en el congreso del Partido Comunista Chino a la hora del reparto de las carteras le apartaron. Le quitaron todos los cargos, le expulsaron del partido. A su esposa incluso la condenaron a pena de muerte, aunque la ejecución de la sentencia fue pospuesta. Todo presuntamente por haber envenenado a un hombre de negocios inglés. Quien, con toda probabilidad, era un agente importante de Mi-6. El escándalo con Bo Xilai se convirtió en el mayor escándalo de la reciente historia política de China.
Por cierto, cuando hablan del peligro de la expansión china para Occidente, esto no afecta a los Rothschild. Tienen una fuerte presencia en la economía de la República Popular China. Así que no tienen nada que temer.
Otra cosa es que, al quitar a Bo Xilai, los Rothschild por algún motivo han decidido que el nuevo secretario general del Comité Central del PCCh Xi Jinping va a jugar a sus juegos. Lo dudo. Hace poco hizo una declaración importante. Dijo que «si nos comportamos como Gorbachev, acabaremos como él. Así que debemos actuar de otro modo». En China existe Instituto de la URSS, con el que estoy en contacto. Dos centenares de colaboradores estudian, analizan un solo problema: cómo destruyeron a la Unión Soviética. Los chinos tienen mucho miedo de repetir nuestra historia reciente. La destrucción de China siguiendo el modelo soviético gorbacheviano significaría tanta sangre para ellos que a nadie le parecería poca.
– Hace un año, justo en vísperas del «armisticio del agua» entre los dos clanes, a través de la prensa fue difundido el material secreto comprometedor sobre el Papa Benedicto XVI. Finalmente el Papa tuvo que dimitir, cosa que no ocurría en el Vaticano desde hace muchos siglos. Se dice que ambos acontecimientos estaban estrechamente relacionados. Supuestamente el «atropello» del Papa aceleró la firma del acuerdo.
– Los Rockefeller están muy relacionados con el Vaticano. La retirada de Benedicto XVI, a primera vista, es una muestra más del debilitamiento de sus posiciones. Pero seguro que no sabremos toda la verdad sobre el Vaticano en un futuro próximo. Indudablemente, una de las direcciones en la lucha por la silla del Papa consistía en el control sobre el Banco del Vaticano. Sus activos, según algunas valoraciones (¡nadie lo sabe con seguridad!) suponen 2 billones de dólares. Un premio muy serio en la lucha por el futuro financiero del mundo. Los Rockefeller, probablemente, han tenido que seguir la corriente a los Rothschild. Es curioso destacar que ahora el Banco está dirigido por el representante de la orden de Malta. Los malteses ocupan un lugar especial dentro de la estructura mundial de las órdenes y para-órdenes. La orden de Malta ejerce de enlace entre el Vaticano y los servicios secretos occidentales más importantes Mi-6 y CIA.
No olvide que el nuevo Papa es jesuita. Se trata de otra intriga más en la lucha dentro del Vaticano. La actual administración estadounidense también estaba interesada en el cambio del Papa. Uno de los ayudantes de Obama dijo abiertamente que después de la «primavera árabe» vendría la «primavera vaticana». Y así fue.
– ¿Y por qué el antiguo Papa estorbaba a Obama?
– El Papa estorbaba a muchos dentro y fuera del Vaticano. Y eso que era un defensor del gobierno mundial. Pero era un conservador, tradicionalista. Por lo visto, se necesitaba a otro hombre en el trono, alguien que pudiera satisfacer a distintas estructuras.
Recordemos, cuando Occidente decidió definitivamente desmantelar el campo socialista, Polonia se convirtió en el blanco del golpe principal. Y en seguida al lado del presidente estadounidense apareció el consejero para la seguridad nacional Zbigniew Kazimesz Brzezinski, natural de Varsovia. ¡Antisoviético! Y en el Vaticano el nuevo Papa de Roma Juan Pablo II – Karol Józef Wojtyla, natural de la región de Cracovia. Rusófobo, antisoviético. Cuando los estadounidenses deciden asestar el golpe a Yugoslavia a través de Albania, a la cabeza de la CIA se coloca el albanés étnico George Tenet.
Ahora vemos aparecer un papa de América Latina. Aunque Francisco I habla fundamentalmente en italiano y en alemán. En Argentina estudió en un colegio alemán. En estos colegios a menudo daban clases los nazis huidos tras la derrota del Tercer Reich. Según algunos datos, el Vaticano había trasladado a América Latina a 30 mil nazis siguiendo los así llamados «senderos de las ratas». La elección para la Silla de San Pedro de un argentino podría significar que los estadounidenses han decidido ocuparse de América Latina en serio, acabar de una vez con los grandes disgustos que les causaba el difunto Chávez y otros líderes de izquierda continentales. Con solo oncología ya no es suficiente. Hacen falta actuaciones más serias. El Papa «latinoamericano» precisamente entra en este apartado.
– Andrei Ilich, parece que esta alianza ha tenido su reflejo en Rusia. Hace un año señalé en nuestro diario KP que, probablemente, no fuera casual que justo en vísperas del sensacional anuncio de la alianza entre las dos dinastías financieras mundiales el oligarca Mijaíl Fridman, que sabe mucho, de repente dimitió de su puesto del primer director ejecutivo de la compañía transnacional TNK-BP. El desarrollo de los acontecimientos demostró que en efecto la dimisión no fue casual. La tercera compañía en la extracción del petróleo ruso TNK-BP fue creada hace diez años a partes iguales por la TNK («Compañía Petrolera de Tiumén») y la británica BP («British Petroleum»), próxima a los Rothschild. Pero las relaciones entre los socios no fueron bien. Continuamente saltaban conflictos públicos. Los británicos se quejaban de la agresividad de los oligarcas rusos, que presuntamente pretendían poner la compañía bajo su total control, incluso pensaban marcharse de Rusia. Pero cuando las dos familias firmaron el acuerdo quien dimitió fue Fridman. Y pronto nuestros oligarcas fundadores vendieron su parte en TNK-BP. Por lo visto recibieron una oferta que no pudieron rechazar. «British Petroleum» se convirtió en el socio directo de «Rosneft». Dicen que para el mayor disgusto de sus antiguos socios rusos y los Rockefeller. Por el contrario en verano Rusia entró volando en la OMC, en la que durante muchos años no nos querían admitir. Posiblemente, ayudó el ex-dirigente de la Organización Mundial de Comercio Peter Sutherland, quien también fuera presidente del banco «Goldman Sachs» próximo a los Rothschild, y presidente del consejo de directores de la misma «British Petroleum». Presuntamente por mantener la lealtad a los Rothschild Rusia obtuvo el pase a la OMC.
– Posiblemente exista relación directa, pero también podría tratarse de mera coincidencia. No poseo información extraoficial, así que no voy a comentar nada. Además me interesan más las consecuencias globales de esta extraña alianza que también pueden afectar a Rusia.
Sobre el derrocamiento del Papa ya hemos hablado.
Lo siguiente será un duro golpe contra el «dinero joven». Los capitales creados en pocos años en Rusia, la CEI, Brasil, India y otros países principalmente por vía extralegal. Y la cuestión no está tanto en la irritación emocional de los propietarios del «viejo dinero», que fueron creando sus fortunas durante generaciones. Los nuevos multimillonarios que presumen de sus riquezas, que comparan el tamaño de sus yates son unos pordioseros comparados con los billonarios. La requisa del «dinero joven» ayudará a resolver toda una serie de problemas de la economía mundial. Según distintas valoraciones, se habla de sumas que van de 20 a 34 billones de dólares. Se trata de una escala superior si las comparamos con la caja de caudales del Vaticano. Su confiscación pospondría el derrumbe de la economía mundial en unos 5 o 10 años. Algunos años más no le vendrán mal a la cúspide mundial. Así que las viejas familias se han unido bajo las banderas de los Rothschild y Rockefeller, para quitar de en medio a los arribistas.
La preparación artillera comenzó todavía en junio de 2012, inmediatamente después de la creación de la alianza. En el informe de «Morgan Stanley management» se decía directamente que había que confiscar las fortunas de los chupasangres que se dedicaban a inflar el precio del «oro negro», de los especuladores bursátiles y de aquellos que consiguieron sus capitales de manera ilícita. De hecho por primera vez fue anunciada la necesidad de confiscar el «dinero joven». En octubre durante el tradicional encuentro entre los representantes del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial Christine Lagarde la directora del FMI había constatado que la deuda de los países desarrollados supone el 110 por ciento con respecto a su PIB. Tras definir la situación como similar a los tiempos de guerra, ella señaló la necesidad de tomar medidas extraordinarias, propias de los severos tiempos de guerra.
Entre estas medidas estaba la posibilidad o incluso la necesidad de la confiscación del «dinero joven», lo cual exigiría crear la apropiada atmósfera moral para justificar la acción extraordinaria de la requisa de los capitales. Lagarde habló exactamente de la atmósfera moral y no del marco legal para la «expropiación de los expropiadores». ¿Madame se equivocó? De ninguna manera.
La justificación jurídica, al menos, en lo que se refiere a los oligarcas y funcionarios corruptos rusos, ya fue suministrada con anterioridad por el proceso Berezovsky – Abramóvich. A lo largo del proceso (celebrado en Londres – N. del T.) fue documentalmente demostrado que prácticamente todos los capitales rusos ganados en los años 90 tienen carácter extralegal. Desde el punto de vista del sistema jurídico occidental «extralegal» suena como «criminal» con las correspondientes consecuencias.
Poco después del discurso de Lagarde por una insignificante infracción fue multado «Standard Chartered Bank» por la suma de 340 millones de dólares. Está claro, que sin el permiso de los Baruch nadie se hubiera atrevido a multar a su banco. Fue una acción puramente simbólica. ¡Chicos, si están multando a los propios Baruch, a los representantes del «dinero joven» les sacarán las tripas sin más!
A continuación siguió el aplastamiento de Chipre, luego sacaron a la luz los capitales guardados en las Islas Vírgenes británicas – uno de los paraísos fiscales más seguros del mundo. A juzgar por los apellidos difundidos por la prensa mundial, en las islas ocultaban sus capitales precisamente los más renombrados dueños del «dinero joven» de la CEI, Asia, América Latina y otros lugares maravillosos.
– ¡Y lo que les espera!
– La mejor ilustración es el cuadro de Peter Brueghel el Viejo «Grandes peces se comen a los pequeños».
Algunos pececillos financieros se han dado cuenta de que se los pueden comer y están dispuestos a actuar siguiendo el viejo chiste soviético «¡Camarada Lobo sabe a quién tiene que comerse!»
– ¿Qué insinúa Andrei Ilich?
– Me refiero a la declaración de los súper ricos de «Forbes» Buffet y Gates de que dejarán a sus herederos tan solo una parte insignificante de sus capitales. Y que las principales riquezas las van a donar para los fines benéficos, para determinadas necesidades sociales.
– En Rusia una declaración similar fue hecha por el oligarca Potanin. Parece que lo ha apoyado el oligarca Kerímov.
– Para tal decisión puede haber diferentes causas. Pero, creo que lo más probable es que se trata de un gesto para unirse a un determinado grupo elitista, el pago por acceder a la cúspide del mundo postcapitalista, señal de lealtad hacia los «amos del juego mundial», que son quienes precisamente determinan las «necesidades sociales» en Occidente. Gates, Buffet no entran en la cúspide mundial, a pesar de todas sus riquezas. Y todavía menos los oligarcas rusos.
Ellos deben de decir: sí, entregamos nuestros capitales, pero nos quedamos arriba, aunque sea en el puesto trigésimo tercero. Así no nos lo confiscan todo. Incluso si después del «pago para la beneficencia» solo quedan unos pocos miles de millones, les está garantizada la vida «sin penurias», por decirlo suavemente.
– Garantizada para ellos y para sus herederos, a los que, para la sorpresa del pueblo llano, los «extravagantes multimillonarios» les quitan los capitales.
– Justamente bajo este ángulo es cómo hay que mirar los misteriosos 40 mil millones de los Rothschild-Rockefeller. Su trust es seguramente una acción simbólica, la creación del fondo común por parte de la cúspide aristocrático-burguesa del mundo, santificado por los sonoros apellidos. Es una nítida señal: únanse a nuestro movimiento, traigan su dinerito, hagan los votos de lealtad. Porque en el severo y rabioso mundo de la postcrisis ya no habrá dulces pastelitos para todos los ricachones actuales. En realidad en el mundo en crisis y en el de la postcrisis nadie va a ofrecer una garantía cien por cien segura. ¡Las Viejas Familias – menudos lobos! No en vano han sobrevivido hasta nuestros días. Si hiciera falta los «viejos» limpiarán a los «jóvenes» y les quitarán hasta el último centavo.
A medida de que la crisis vaya avanzando veremos muchas sorpresas. Está totalmente claro que en la economía mundial está cobrando fuerza el curso antiliberal. La época iniciada por Reagan y Thatcher de la contrarrevolución neoliberal de los años 1980-2010 ha terminado. Ha traído a toda una seria de resultados imprevistos. En particular, la misma aparición del «dinero joven», que comenzó realmente a amenazar la existencia de las viejas familias.
Claro que no está mal que comience a triunfar el curso antiliberal. Pero hay que recordar que este curso refleja los intereses de las viejas familias. Que ahora están purgando las consecuencias indeseables para ellas de los 30 años neoliberales que acaban de terminar. Los Rothschild con los Rockefeller son los iniciadores de la purga.
Ante nuestros ojos está comenzando una época completamente nueva. La época del antiliberalismo. Esta época enterrará a muchos y muchos héroes neoliberales. También en Rusia.
Andrei Fúrsov (n.1951) es historiador, sociólogo y publicista. Autor de numerosas monografías científicas y del libro «Campanas de la historia» (Moscú, 1996). Sus intereses científicos se centran en la metodología de los estudios histórico-sociales, teoría e historia de sistemas sociales complejos, particularidades del sujeto histórico, fenómeno del poder (y la lucha mundial por el poder, información y los recursos).
Fuente: www.kp.ru/daily/26085.5/2988035/