Jorge Alberto Orellana se convirtió en el sexto periodista asesinado en Honduras en lo que va del año, se informó ayer. El nuevo asesinato ocurrió el martes a la noche en San Pedro Sula, norte de Honduras. La víctima, conocido como Georgino Orellana, recibió un tiro en la cabeza cuando salía de las instalaciones del […]
Jorge Alberto Orellana se convirtió en el sexto periodista asesinado en Honduras en lo que va del año, se informó ayer.
El nuevo asesinato ocurrió el martes a la noche en San Pedro Sula, norte de Honduras.
La víctima, conocido como Georgino Orellana, recibió un tiro en la cabeza cuando salía de las instalaciones del Canal de Televisión de Honduras, donde laboraba.
El periodista fue trasladado al hospital «Mario Catarino» donde falleció, informó el director de la policía en San Pedro Sula, Héctor Mejía.
El ministro de Seguridad, Óscar lvarez, dijo que el asesinato de Orellana «es completamente atípico a la muertes de otros periodistas, donde ha habido motocicletas o vehículos con sicarios y múltiples disparos».
«En este caso fue una sola persona que estaba agazapada, escondida atrás de unos arbustos, cuando sale Georgino, y hubo un solo disparo, y la persona que cometió el asesinato se fue a pie», comentó.
lvarez expresó que en la muerte de Orellana «no se mira un matiz del crimen organizado, sino que es por alguna razón, siempre hay un motivo, nadie mata a alguien sólo por el gusto de matar, salvo que tenga alguna enfermedad mental».
La policía ofreció 250.000 lempiras (unos 13.000 dólares) de recompensa a las personas que ofrezcan información que conduzca a la captura de la persona responsable del crimen.
lvarez, dijo además que en el caso de Orellana las investigaciones serán dirigidas por el viceministro de Seguridad, Armando Calidonio, y estarán involucrados «los mejores agentes de investigación».
Subrayó que «las acciones que estamos viviendo de violencia en el país no son una situación típica, y no es culpa de la policía nacional. El año pasado murieron más de 6.000 personas violentamente, o sea que no es sólo contra el gremio periodístico».
Orellana también era catedrático de la Escuela de Periodismo de la Universidad Nacional Autónoma del Valle de Sula y propietario de una academia de ballet.
El 1 de marzo fue asesinado el periodista Joseph Hernández, de 26 años, en Tegucigalpa, en un ataque a tiros en el que también resultó herida la periodista Karol Cabrera.
El 11 de marzo fue asesinado el periodista David Meza, de 51 años, en el puerto caribeño de La Ceiba, y el 15 de marzo también fue asesinado a tiros Nahum Palacios Arteaga, de 34 años, en Tocoa, unos 600 kilómetros al norte de la capital.
El 26 de marzo fueron asesinados el periodista Bayardo Mairena y su asistente Manuel Juárez en Juticalpa, a unos 200 kilómetros al este de Tegucigalpa.
(Con información de ANSA)