A pesar de las conversaciones que el legitimo mandatario hondureño, Manuel Zelaya, ha sostenido con representantes de la iglesia y con los candidatos para las elecciones del próximo 29 de noviembre, aún no se llega a ningún acuerdo con el régimen de facto de Roberto Micheletti.
Los fuerzas militares hondureñas comenzaron este viernes una nueva arremetida de presión contra la embajada de Brasil en Tegucigalpa lazando bombas de gas y bloqueando la entrada de insumos a la sede diplomática donde se mantiene resguardado el presidente legítimo Manuel Zelaya desde el lunes.
De acuerdo con el reporte de la corresponsal de teleSUR, Adriana Sívori, varias de las personas que se encuentran dentro de la embajada empezaron a sangrar por la nariz y al orinar. Mientras, uno de los médicos que se encuentra en la sede se encarga de atenderlos.
La sede diplomática, hasta este viernes, se encuentra rodeada de efectivos militares y policías, y el gobierno de facto de Roberto Micheletti no se presta al diálogo con Zelaya.
Este jueves ingresaron representantes de la iglesia católica para conversar con el presidente constitucional sobre todas las irregularidades que está sufriendo este país.
Luego se reunió con cuatro candidatos a las elecciones que está programada para el próximo 29 de noviembre, éstos apoyaron el golpe de Estado del 28 de junio. Elvin Santos (de su mismo Partido Liberal), Porfirio Lobo (Partido Nacional), Felícito Avila (Democracia Cristiana) y Bernard Martínez (Partido Integración y Unidad).
En el encuentro, que se efectuó durante unas dos horas, con los candidatos, se conversó acerca de la búsqueda de una pronta solución pacífica a la crisis desatada en la nación centroamericana pero no se habló de la restitución en el cargo de Zelaya.
Sivori aseguró que aún se mantiene el toque de queda en en país. El gobierno de facto no ha dado señales de avalar el diálogo, por el contrario continúa emitiendo comunicados reiterando el toque de queda que inició este lunes.
El presidente Zelaya hizo un llamado a «la Resistencia a mantener la batalla hasta que juntos, pueblo y presidente, logren las reformas constitucionales y la caída de los usurpadores».
En un comunicado, aseguró que el problema de la crisis política en la nación no está resuelto y agradeció a la comunidad internacional por haberse pronunciado con respecto al tema del golpe de Estado y al restablecimiento del orden constitucional.
Esta situación, según Sívori, ha causado mucha expectativa dentro de las personas que se encuentran dentro de la embajada, pues tanto en la Asamblea General de Naciones Unidas, como en las otras reuniones, podrían salir posibles soluciones que le pongan fin a este conflicto.