A pesar de sus propios problemas económicos y el descontento popular en el país y fuera de él, Alemania entregó 150 millones de euros a Afganistán en concepto de ayuda. Los críticos sostienen que se trata de algo muy parecido a lanzar el dinero por la ventana. El acuerdo, que garantiza dinero alemán para el […]
A pesar de sus propios problemas económicos y el descontento popular en el país y fuera de él, Alemania entregó 150 millones de euros a Afganistán en concepto de ayuda. Los críticos sostienen que se trata de algo muy parecido a lanzar el dinero por la ventana.
El acuerdo, que garantiza dinero alemán para el entrenamiento de las fuerzas de seguridad en Afganistán después de la retirada de las tropas de la OTAN en el 2014, fue firmado entre la canciller alemana Angela Merkel y el presidente afganos Hamid Karzai el pasado miércoles en Berlín. Karzai estaba de paso por la capital alemana antes de atender la Conferencia de la OTAN en Chicago el 20 y 21 de mayo, donde se espera que vuelva a pedir nuevos compromisos financieros a los países miembros.
Reiner Braun, de la red ‘No a la guerra, no a la OTAN’, cree que, aunque los países de la OTAN deberían apoyar financieramente a Kabul para reparar lo que destruyeron, es completamente erróneo entregárselo al gobierno de Karzai. «El gobierno de Afganistán necesita sin ninguna duda el dinero, para sus fines corruptos», afirmó a Russia Today. «Afganistán se ha convertido en el país más corrupto del mundo. Todo centavo o céntimo que demos a Afganistán no se destinará a los ciudadanos ni para desarrollar el país, la agricultura o la industria. Se trata de entregar el dinero a un sistema completamente corrupto y mafioso. Si lo que realmente se quiere es dar el dinero a la gente a la que de hecho se quiere apoyar, entonces hay que descentralizar esta ayuda para hacerla llegar a las comunidades, a las regiones y las aldeas rurales. Si realmente se quiere ayudar a la gente, no hay que entregarle más dinero a Karzai. No hay ninguna diferencia entre darle dinero al gobierno de Karzai o quemarlo de inmediato.»
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RT: Hamid Karzai ha dicho que este año se necesitan 4’1 mil millones de dólares. Se espera que en la próxima Cumbre de la OTAN en Chicago reclame nueva ayuda financiera. ¿Qué países, en su opinión, estarían dispuestos a dar un paso al frente y entregar este dinero? ¿Todos los países miembros o sólo algunos de ellos?
Reiner Braun: Lo primero que conviene señalar es que hay un profundo desacuerdo en torno a la reducción de la presencia de tropas en el país. Hollande ha dicho de nuevo que quiere reducir el contingente de tropas francesas este 2012, pero esta decisión está en contra de los acuerdos con la OTAN. Así que habrá un importante debate en torno a la fecha de retirada de las tropas.
En segundo lugar, pienso que los países de la OTAN tienen que dar dinero para pagar la reparación del país que destruyeron. La cuestión principal es nuevamente quién recibe este dinero. Si existe un gobierno democráticamente electo en Afganistán o una sociedad civil a la que podamos dar nuestro apoyo, o lo que realmente existe es un sistema completamente corrupto y mafioso en el que gastamos nuestro dinero. Nosotros estamos completamente en contra de darle dinero a Karzai, porque deberíamos estar dándoselo supuestamente a la gente. Lo que necesitamos son estructuras democráticas en el país.
RT: La oferta de Alemania llega en un medio de una Europa sumida en una crisis de deuda. ¿Está Alemania en posición de satisfacer las demandas de Afganistán cuando se encuentra rodeada de tantos problemas financieros ahora mismo?
RB: El problema no es el dinero, el problema es que las tropas alemanas no se retirarán completamente de Afganistán. Habrá tropas alemanas estacionadas y combatiendo en el país. Esto es lo totalmente opuesto a una retirada. Así que nuestra principal preocupación es que las tropas alemanas y las tropas de la OTAN no abandonen el país (una decisión que debería tener lugar a finales de 2014), sino que permanezcan allí. Éste es el principal punto de las negociaciones entre Karzai y el gobierno alemán.
El segundo punto, que es muy interesante y recorre soterradamente el resto de los argumentos, es que Alemania quiere ayudar al gobierno de Afganistán a deshacerse de los recursos naturales de su país. Esto significa que lo que quieren realmente son los recursos naturales del país. No estamos hablando de un proceso de paz. Estamos hablando de un proceso por el que se seguirá ocupando el país y por el que seguirá habiendo un ejército de intervención.
Por eso protestamos aquí en Chicago. Ésta no es ninguna solución para Afganistán. Afganistán necesita negociaciones entre todos los agentes sociales del país y entre todos los países de la región para llegar a un proceso de paz.
RT: Los talibanes han demostrado después de una década que es imposible que tropas estadounidenses les derroten. ¿Cómo puede el presidente Karzai y sus propias fuerzas de seguridad hacerles frente? ¿A quién han de acudir en búsqueda de ayuda?
RB: Desde mi punto de vista, no habrá ninguna solución militar a la guerra. Existe un equilibrio entre ambas fuerzas. Por un lado la OTAN y las tropas de Karzai, por el otro, lo que llamamos talibanes, que es una mezcla considerable de diferentes fuerzas. Pienso que la única posibilidad es encontrar una solución y negociar con todas las fuerzas combatientes en Afganistán y los países vecinos.
Apoyar sólo una parte de estas fuerzas, incluyendo el gobierno de Karzai, no ayudará a encontrar una solución pacífica al problema, sólo reforzará a quienes están corrompidos hasta la médula y llevan explotando al país desde hace diez años.
Reiner Braun es historiador y activista por la paz desde 1982. Durante años miembro del SPD, abandonó el partido por su apoyo a las reformar Hart-IV y la guerra en Afganistán, y hoy es miembro de la red ‘No a la guerra, no a la OTAN’
Traducción de Àngel Ferrero