-M.H.: El martes pasado tuvimos una entrevista exclusiva con Jorge Altamira del PO quien nos contaba que está visitando frecuentemente Montevideo, Uruguay, por la situación política social que se vive en el país, sobre todo en contacto con una nueva generación de jóvenes dirigentes sindicales. He visto notas al respecto, por ejemplo, una que aparece […]
-M.H.: El martes pasado tuvimos una entrevista exclusiva con Jorge Altamira del PO quien nos contaba que está visitando frecuentemente Montevideo, Uruguay, por la situación política social que se vive en el país, sobre todo en contacto con una nueva generación de jóvenes dirigentes sindicales. He visto notas al respecto, por ejemplo, una que aparece en la última edición de Le Monde Diplomatique, pero me gustaría conocer tu visión directa de esta situación.
-M.R.: La última vez que hablamos fue cuando el gobierno le impuso al gremio de la enseñanza el decreto de esencialidad para cortar la huelga de los profesores de secundaria que estaban luchando por el presupuesto. Medida grosera, porque en Uruguay se considera constitucionalmente un servicio de «esencialidad» cuando arriesga la vida de una persona, de hecho todos los gremios respetan y se autogerencian en ese sentido cuando hacen una huelga, pero en el caso de la educación no aplicaba y ha habido historia de lucha de la educación bajo gobiernos de derecha que nunca fueron considerados esenciales.
Hubo una pueblada en la calle, con la participación de gente conocida, frenteamplistas, alrededor de 60.000 personas en Montevideo y en ciudades del interior, eso generó que el gobierno levantara la esencialidad. Justamente, la dirección mayor del PIT-CNT intervino para tratar de suavizar las cosas y hacer que los gremios de la educación depusieran las medidas de lucha que siguieron adelante a pesar de haber sido dejada de lado la medida. El gobierno propuso que al mismo tiempo los docentes levantaran la huelga y las medidas de lucha para que no haya vencidos ni vencedores y a partir de ahí negociar. Los gremios de la enseñanza dijeron que no, sin embargo, sigue habiendo esa camarilla de directivos del PIT-CNT que actúan de bisagra y públicamente aconsejan a los gremios de la educación que convendría que aceptaran la propuesta gubernamental, pero fueron repudiados por los sindicatos y la huelga y los paros siguieron.
-M.H.: Sin ir más lejos ayer hubo un paro, ¿no?
-M.R.: Sí y además hay un paro en la enseñanza privada. Porque aquí el presupuesto es de ajuste fiscal concentrado en los trabajadores y los jubilados, hay pautas salariales que son a la baja y al congelamiento salarial para todos los trabajadores públicos y privados, entonces están saliendo todos los gremios afectados.
Está ocupado también el Ministerio de Desarrollo Social. Entre las cosas que tengo para contarte de la derechización y la criminalización de la protesta que ha ido desarrollando el gobierno progresista desde 2005 a la fecha, está que se prohibió a los gremios y trabajadores púbicos ocupar sus lugares de trabajo y lo convirtió en un delito.
Esto ha sido trasgredido en diversas oportunidades, ahora por los trabajadores de un Ministerio que están ocupando el lugar en este momento y veremos cómo se salda, porque la última ocupación fue la que hicieron estudiantes de secundaria (menores de edad) de las oficinas del organismo rector de la enseñanza secundaria.
Justamente, como los trabajadores ya venían siendo golpeados y no podían ocupar, los estudiantes lo hicieron, y en principio la ley no se aplicaba para ellos, porque eran estudiantes y no trabajadores, de esa manera ocuparon desde un viernes hasta el lunes que hubo un desalojo extremadamente violento que hacía años no se veía. El saldo fue de una gran cantidad de heridos de ambos lados, con la gente que estaba abajo en la entrada del edificio, gremios que estaban en apoyo, ya sea de la educación o de otra serie de gremios como es usual.
Fue un operativo sumamente complejo, donde entraron fuerzas policiales de choque de la Guardia Metropolitana. Conociendo la estructura del edificio, entraron por una puerta trasera que ni los estudiantes conocían, apagaron las luces y subieron las escaleras gritándoles a los gurises que llamen a sus padres porque era la última vez que los iban a escuchar, también los amenazaron con que los iban a violar. Todo ese rito que tienen las fuerzas de choque para darse ánimo cuando van a avanzar, pero el caso es que se iban a enfrentar con chicos desarmados.
Es difícil poder hacer la descripción paso a paso de lo que pasó, hay versiones contradictorias sobre quién tiró la primera piedra, yo digo que eso es completamente secundario, los gurises que estaban ocupando pudieron escapar porque también había padres entre los que estaban apoyando que encontraron otra escalera por donde lograron hacerlos salir mientras subían los milicos. El lío más grande se armó afuera, esto terminó en el procesamiento de 10 trabajadores, dirigentes sindicales y estudiantes que no fueron detenidos ahí, la mayoría lo fueron en los días siguientes en base a filmaciones. Los detuvieron autos particulares, con militares vestidos de civil, sin presentarse ni mostrar ninguna acreditación. Arrestos completamente irregulares, fueron llevados primero a la policía donde fueron interrogados políticamente, y después ante el juez donde fueron procesados por atentado.
Nada justifica este nuevo andamiaje de control y represión
Hoy salió una editorial de La Diaria, un periódico de izquierda moderada independiente, refiriéndose a esto y cómo el silencio social que hay en los medios, en referentes políticos, inclusive sindicales, fuera de los gremios implicados, porque la propia directiva del PIT-CNT criticó y criminalizó a la gente que estuvo ahí y le tiró piedras a la policía. El editorialista de La Diaria dice que hay una piedra milenaria tirada contra policías en todas partes del mundo y no por eso se procesa de atentado a la gente.
La verdad es que en el país nunca habíamos vivido esto, excepto en el gobierno progresista cuando vino Bush a Mar del Plata y hubo manifestaciones en Uruguay y como saldo alguna vidriera rota; ahí empezó esta historia y no se volvió a repetir hasta ahora.
Lo que te puedo decir es que es una situación política muy complicada porque el presupuesto, que es un proyecto político, hace una concentración del poder muy grande en la presidencia. Se generan nuevas secretarías como, por ejemplo, la del Cambio Climático, otra del fútbol, que quedan por fuera del control de todos los organismos del Estado, del Tribunal de Cuentas y de la justicia porque dependen directamente de presidencia. Por otro lado, no se le da presupuesto al Tribunal de Cuentas, ni al Poder Judicial que está en una situación sumamente lamentable, pero sí hay un aumento de presupuesto y la emisión de deuda para reforzar tanto al Ministerio del Interior como a las Fuerzas Armadas. Ya se anunció que se van a comprar aviones de guerra y buques con nueva tecnología. El ministro del interior, Bonomi, que es quien está en primera plana, anunció que van a traer tres helicópteros con tecnología de punta que detectan el calor humano con rayos infrarrojos, toda esa tecnología que usan los yanquis contra las FARC en Colombia.
Además, habla acentuando la importancia y prioridad en que la gente vea que hay un control, que los helicópteros están sobrevolando las ciudades, cuando acá no pasa absolutamente nada en comparación con lo que pasa en el mundo. Todo el que viene a vacacionar a Uruguay sabe que hay algo de delincuencia, pero no es algo que justifique de ninguna manera todo este andamiaje de control y represión. Han puesto cámaras en todo el país, han detenido a varias personas gracias a esto, y ahora se suman los helicópteros.
Con respecto a la Guardia Metropolitana, desde los ´90, cuando gobernó el sector más reaccionario y oligárquico del Partido Nacional, estaba la propuesta de hacer una guardia nacional, una policía militar, que siguen proponiendo y que en aquel momento el propio Fernández Huidobro dirigente del MNL de otrora, y actual Ministro de Defensa, criticó fuertemente diciendo que era un programa norteamericano, que como el comunismo no existía más ahora era el crimen organizado y la droga.
Todo eso es lo que ahora este gobierno está utilizando y apoyando. Principalmente fue durante el gobierno de Mujica cuando se avanzó más en este sentido. Hemos conseguido un informe de dos periodistas de investigación de derechos humanos, Roger Rodríguez y Samuel Blixen que hacen una cronología de hechos que es espeluznante.
Hace tiempo que vengo diciendo que hay olor a facistización, porque no solo los cuerpos represivos actúan sino todo el discurso oficial acerca de lo que es la huelga, de lo que es un paro, del daño que ocasiona a la sociedad, de que toma de rehén a la población, ahora habla de los niños y las niñas que se quedan sin clases, etc. En cada caso encuentran la manera de satanizar a los trabajadores o a cualquier gremio que esté luchando. En el libro «Pepe Coloquios», donde hablan del gobierno de los Kirchner de manera bastante despectiva y terrible, también hace una confesión donde dice que a los gremios de la educación «hay que hacerlos mierda», porque desde el ´90 vienen luchando contra las reformas neoliberales que gobierno tras gobierno vienen sosteniendo.
Por último quiero decir que un presupuesto marca un proyecto político, y en este proyecto político aparecen demasiadas cosas muy retrógradas. A nivel de la justicia se han hecho cambios del proceso y todo queda bajo la órbita del Poder Ejecutivo, se le hace perder la independencia a los jueces y a los fiscales del Poder Judicial, quedan dependientes de un fiscal de Corte que es nombrado por el Ejecutivo. Todo está ocurriendo paralelamente y también los fiscales que explican esto cuentan que están siendo llevados a Estados Unidos y que se está haciendo una mala copia del proceso penal de ese país. También tengo datos de la formación que se está haciendo en USA y acá, con miembros que vienen de Israel, de las fuerzas policiales, no solo de las Fuerzas Armadas que van a las misiones de paz a hacer lo que ya sabemos, sino también a estas fuerzas policiales que están militarizando y que los están metiendo a la represión de las manifestaciones y de la vida civil.
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