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Entrevista a Rigoberto Paredes, Premio Nacional de Literatura

«Por ningún motivo iré a votar el 29 de noviembre»

Fuentes: El Clarín de Chile / Rebelión

En entrevista exclusiva con Clarín.cl Rigoberto Paredes (1948), comparte el árbol de la vida del Café Paradiso: «aquí se ha conspirado bastante, abiertamente, con toda la confianza del mundo, siempre es así en los momentos difíciles y en los pocos buenos tiempos que hemos tenido en el país», a pesar de la precaria situación de […]

En entrevista exclusiva con Clarín.cl Rigoberto Paredes (1948), comparte el árbol de la vida del Café Paradiso: «aquí se ha conspirado bastante, abiertamente, con toda la confianza del mundo, siempre es así en los momentos difíciles y en los pocos buenos tiempos que hemos tenido en el país», a pesar de la precaria situación de salud y la lluvia, el poeta salió a las calles para defender La Cuarta Urna y con ese coraje afirma: «no tiene sentido ir a votar mañana, porque ya logramos una conquista: se consultó al pueblo por la Constituyente en las calles y en las plazas»

Rigoberto Paredes, Premio Nacional de Literatura (2006), es autor de los libros de poesía: En lugar de los hechos, (1974); Las cosas por su nombre (1978) ; Materia prima, (1985); Fuego lento, antología personal (1989); La estación perdida (2001); Obra y gracia (2005); Segunda mano (2009) y Lengua adversa (inédito). Coautor de la antología Poesía contemporánea de Centro América (España, 1983) y de la colección de ensayos Literatura Hondureña (1987); fue cofundador de la Editorial Guaymuras y Ediciones Librería Paradiso; fungió como Viceministro de Cultura, Diplomático de Honduras en México y Director de Asuntos Culturales del Ministerio de Relaciones Exteriores, en la actualidad es asesor cultural del Presidente Manuel Zelaya.

A cinco meses de Resistencia, Rigoberto Paredes hace un recuento: «No tiene sentido ir a votar mañana, porque ya logramos una conquista: se consultó al pueblo por la Constituyente en las calles y en las plazas, la gente ya fue a votar con su sacrificio y con total conciencia. Yo nunca estuve de acuerdo en llamarla ‘Cuarta Urna’, porque urna significa depositar un voto y ya está, pero ahora el pueblo se ha enriquecido más, abriéndose a otras perspectivas, eso ya es una batalla ganada de la Resistencia»

 

MC.- Rigoberto, ¿cuándo decidió abrir el Paradiso?

RP.- Este espacio se inició hace 22 años, fue concebido como un espacio socio-cultural, no tiene nada que ver con un negocio, no podría ser, no tiene una pizca de eso. Aquí ha sido un punto de encuentro -afortunadamente- de muchos artistas, escritores, teatristas, músicos, poetas y locos, ha servido como lugar alternativo, los protagonistas de la Resistencia han tenido las puertas abiertas en el Café Paradiso, aquí se ha conspirado bastante, abiertamente, con toda la confianza del mundo, siempre es así en los momentos difíciles y en los pocos buenos tiempos que hemos tenido en el país; Mario, como te decía ayer: siempre tenemos una programación cultural, aparte de las conspiraciones habidas y por haber -tienen que ser más-, es un espacio de lectura, de poesía, de conversatorio, de exposiciones, de proyecciones de películas, hemos dado cabida a varios escritores latinoamericanos, como has podido ver en las fotografías -que no están todos los que han pasado por Café Paradiso-, tenemos el registro y lo iremos actualizando.

MC.- ¿En cinco meses de dictadura hubo represalias contra el Café Paradiso?, ¿o intentos de infiltrarlo?

RP.- Bueno eso siempre ocurre, esa gente que anda en otras cosas que no tiene nada que ver con una lectura de poesía, y sí, hemos visto con sospecha a algunos visitantes, fuera de Paradiso uno escucha comentarios muy adversos al lugar: nos dicen «subversivos y conspiradores», pero no ha habido algo tan abiertamente contra Paradiso, sabemos que aquí no vamos a tener la visita de «señoras ilustres y señores de mucho prestigio político» (risas).

MC.- Poeta, he visto fotografías de vos participando en la repartición del material de La Cuarta Urna, pese a su precaria salud y la insistente lluvia, verlo me conmovió; ¿por qué puso en riesgo su salud el día previo a La Cuarta Urna?

RP.- Por dos razones: estoy convencido de que hay causas populares que uno debe apoyar, porque donde hay protesta, algo de inconformidad y rebeldía, siempre resulta algo bueno, algo se está gestando ahí y me gusta participar en este tipo de cosas, a pesar de que coincidió con un quebranto de mi salud, asistí por cuestión de convicción personal, me identifico con las causas populares, soy de un pueblo remoto de Honduras; la segunda razón: yo he sido funcionario del gobierno del Presidente Manuel Zelaya y era mi deber acompañarlo.

MC.- ¿Aquí se redactó la «Carta abierta» de los Premios Nacionales de Literatura para denunciar el golpe de Estado?

RP.- Sí, aquí la redactamos, para dejar un testimonio de tres escritores que condenamos el golpe de Estado y que nos identificamos con la protesta, ante el dolor terrible del país y la imagen que proyecta el régimen facto, creímos que los golpes de Estado habían quedado muy en el pasado; con el gobierno de Mel Zelaya se estaba abriendo un camino de esperanza para los sectores más vulnerables y desfavorecidos en Honduras; de hecho el movimiento de Resistencia puede darle el empuje necesario para que desaparezca la dictadura.

MC.- El punto medular de la «Carta abierta» es un reclamo por la libertad de la palabra, ¿cómo quitarle la mordaza?

RP.- Los poetas y los Artistas en Resistencia, sentimos que se está vulnerando mortalmente un valor esencial para la creación: la libertad, la tienen relegada, los golpistas desprecian la libertad de expresión. La censura te afecta cuando está en la atmósfera, cuando tratan de ocultar la represión, todo se percibe enrarecido, pero volveremos a sentir ese clima de libertad, depende de nosotros -no de un acuerdo, ni de una comisión de la OEA-, se ha dañado al país, de forma material y espiritual, así como se consolidó la lucha, así recuperaremos la libertad de creación.

MC.- La pregunta obligada, ¿irá a votar el 29 de noviembre?

RP.- No tengo planes de ir a votar, mucho menos por los partidos tradicionales, no soy liberal mucho tampoco nacionalista, soy independiente, por ningún motivo iré a votar mañana; participaría, a menos que hubiese una suspensión del proceso por parte del Tribunal Electoral, se restituya al Presidente Zelaya y se consolide la Candidatura Independiente a tono con la Resistencia.

MC.- ¿Cómo recuperar el proyecto de la Asamblea Constituyente iniciado en La Cuarta Urna?

RP.- Yo no sé si seguirle llamando «Cuarta Urna», creo que es la lucha de la Resistencia, no tiene sentido ir a votar mañana, porque ya logramos una conquista: se consultó al pueblo por la Constituyente en las calles y en las plazas, la gente ya fue a votar con su sacrificio y con total conciencia. Yo nunca estuve de acuerdo en llamarla «Cuarta Urna», porque urna significa depositar un voto y ya está, pero ahora el pueblo se ha enriquecido más, abriéndose a otras perspectivas, eso ya es una batalla ganada de la Resistencia.

MC.- ¿Escribió algún poema en estos 5 meses de Resistencia?

RP.- Escribí algunos apuntes, ideas, trazos de algún proyecto poético que puede haber por ahí, pero eso hay que dejarlo reposar. Claro, la experiencia está en lo que he visto, oído y leído en las paredes -de la alcaldía y la catedral- había cosas muy ingeniosas que a uno le despiertan las ganas de seguirlas reproduciendo y por supuesto algo va a surgir de todo esto.

MC.-Finalmente, ¿recibió cartas de solidaridad de poetas latinoamericanos?

RP.- Sí, de todos los poetas de Latinoamérica, yo soy muy poco para esto del Internet, a diferencia de los jóvenes poetas, por ejemplo Mayra, Fabricio y Samuel son fanáticos del correo electrónico y de los blogs; a mí me gusta recibir cartas pero casi nunca respondo (risas) ahora que tenga tiempo lo haré; es increíble el grado de solidaridad que hemos sentido de parte de los poetas y de diferentes colectivos de todo el mundo, en especial de Latinoamérica y Europa.

Rebelión ha publicado este artículo a petición expresa del autor, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.