Hace casi un año del Golpe de Estado que destituyó a Manuel Zelaya de la presidencia de Honduras y la situación está todavía lejos de tener una solución. Ayer (7), Zelaya ahora presidente del gobierno del Poder Ciudadano, hizo un pronunciamiento sobre la Comisión de la Verdad instalada el pasado en el país centroamericano En […]
Hace casi un año del Golpe de Estado que destituyó a Manuel Zelaya de la presidencia de Honduras y la situación está todavía lejos de tener una solución. Ayer (7), Zelaya ahora presidente del gobierno del Poder Ciudadano, hizo un pronunciamiento sobre la Comisión de la Verdad instalada el pasado en el país centroamericano En esta oportunidad el mandatario derrocado, criticó a la Comisión de la Verdad y pidió que ningún funcionario del Poder Ciudadano colabore con ella.
Instalada en Honduras a inicios de mayo por el actual presidente Porfirio Lobo, la Comisión de la Verdad tiene la finalidad de trabajar por aclarar los acontecimientos del golpe de estado efectuado el día 28 de junio del año pasado, que depuso a Manuel Zelaya, entonces mandatario hondureño en el poder.
Sin embargo, en opinión del presidente destituido, la Comisión tiene en la práctica otro objetivo «A través de esta Comisión de la Verdad se pretende manipular las causas y los terribles efectos del Golpe de Estado en un falso intento de aliviar sus consecuencias mediante el reconocimiento internacional», afirmó
Las declaraciones presentes en el comunicado no son casuales. Según el mandatario derrocado, tal comisión no posee miembros del Gobierno del Poder Ciudadano, tampoco integrantes de la resistencia (al Golpe) ni personalidades internacionales opositoras al Golpe. En razón de esto cree «firmemente que la información podrá ser manipulada para presentar conclusiones que favorezcan al sector que la forma».
Ante ese cuadro, Zelaya cree que la comisión pretenderá : presentar a los golpistas como víctimas; afirmar que la propuesta de una Cuarta Urna, era una estrategia del entonces presidente hondureño para permanecer en el poder; y afirmar que la adhesión a la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América representaba una amenaza para la soberanía del país.
«Esta comisión surge del viciado Acuerdo Tegucigalpa-San José, el cual fue violado por el Gobierno de Facto, situación que trajo como consecuencia el aislamiento que sufre hoy nuestro país. Esta comisión también surge del apoyo que los Estado Unidos de América dieron a las ilegítimas elecciones que se dieron en un ambiente de represión y violaciones a los derechos humanos, sin la presencia de los observadores cualificados y sin que ellos tuviesen analizado el daño que estaba haciendo al Pueblo Hondureño», destacó.
Zelaya también dejó claro en el comunicado, que no confía en la Comisión y aprovechó la oportunidad para pedir a los funcionarios del Poder Ciudadano que no ayuden a la Comisión hasta que ésta esté de acuerdo con las exigencias necesarias para ser imparcial. De igual manera, estimuló al pueblo hondureño a ser firme y mantener una posición sólida contraria a la Comisión.
«Nuestra participación en estas condiciones podría provocar aun mas daños y efectos negativos a los sufridos desde el golpe de estado hasta ahora, ya que un informe falso, con nuestro aval, quedaría en la historia como ‘la verdad’, eximiendo de responsabilidad a aquellos que participaron y cometieron este crimen de lesa humanidad contra el pueblo de Honduras», consideró.
Traducción: Ricardo Zúniga
Fuente: http://www.adital.com.br/site/noticia.asp?boletim=1&lang=ES&cod=48381