Traducido para Rebelión por Gorka Larrabeiti
Cárcel a partir de los 12 años, mayoría de edad penal (esto es, mismo trato que a los adultos ante un tribunal ordinario) rebajada de los 18 a los 16 años para los reincidentes; e incluso retención policial de 6 horas, renovables una vez, para niños menores de 12 años: éstas son las propuestas de reformas que presentará hoy la comisión de expertos presidida por un profesor universitario a la ministra de Justicia, Rachida Dati. Por si fuera poco, anteayer, Frédéric Lefebvre, portavoz del UMP (el partido de Sarkozy) afirmó que para evitar meter en la cárcel a menores desde los 12 años se ha de realizar un trabajo preventivo: «Dicen que conviene hacerlo desde los tres años para que sea más eficaz -afirmó-. En 1945 la proporción de menores implicados en casos penales era de uno entre 166; hoy es de uno entre 30. Hay que reaccionar cuando se nota un comportamiento violento en la guardería y poner en marcha la prevención».
Rachida Dati quiere reformar la ordenanza de 1945 que regula el tratamiento de la delincuencia de menores y que estaba basada en el principio de que la educación debe prevalecer sobre la represión. La ministra quiere abolir la ordenanza para sustituirla con un código preciso reservado a los menores. Según el ministerio de Justicia, este planteamiento encuentra su justificación en el hecho de que los delincuentes hoy son cada vez más jóvenes. Una afirmación que desmienten los magistrados que se ocupan de menores. Las reacciones al informe de la comisión de expertos, que contiene unas setenta propuestas, no se han hecho esperar. «La cuestión no es la reforma de la ordenanza de 1945, que ya se ha reformado cinco veces en los últimos cinco años -afirma el juez de menores Jean-Pierre Rosenweig, presidente de la sección de menores del tribunal de Bobigny-: el problema es la prevención», pero desde luego no desde los 3 años de edad (el gobierno tuvo que retirar una propuesta similar en 2006 tras el llamamiento de protesta titulado «No al cero en conducta para los niños de 3 años»).
El PCF habla de «provocación» después de la reciente ola de suicidios de chicos jovencísimos en la cárcel. Para Emmanuelle Perreux, presidente del Sindicato de magistrados, «estamos viviendo una política completamente penal, que olvida que un menor puede ser un delincuente, pero ante todo es un ser en construcción». El magistrado Christophe Régnard, del USM (sindicato mayoritario) subraya que la propuesta «no es conforme a los acuerdos internacionales que ha firmado Francia tales como la Convención sobre los Derechos del Niño», que establece la responsabilidad penal a los 18 años. La propuesta distingue entre «mayoría penal» (que seguiría siendo a los 18 años, con una rebaja a los 16 años en caso de reincidencia), y «responsabilidad penal», que quedaría establecida por ley a la edad de 12 años, mientras que hasta ahora la ley francesa dejaba libertad de apreciación al juez. La comisión propone asimismo acelerar los tiempos de la justicia de menores.
Según parece, en la comisión se ha propuesto rebajar la responsabilidad hasta los 10 años, como sucede en Gran Bretaña. La responsabilidad penal está fijada a los 12 años en Suecia y Grecia; a los 14, que es la media europea en Italia, Holanda y España. En Francia, con la última reforma de Dati, un niño de 13 años puede acabar en la cárcel si es responsable de un crimen grave. De los 203.700 menores retenidos por la policía en 2006, un 1,3% estaba implicado en crímenes graves, el 43% en robos, el 22% en actos violentos y el 34% en «violaciones de la paz pública», en su mayoría, asuntos de droga.
Fuente: http://www.ilmanifesto.it/Quotidiano-archivio/02-Dicembre-2008/art18.html