Sentado en su despacho en el Instituto Lula, Luiz Inácio Lula da Silva recibió a Página/12 (Argentina) con un mapamundi detrás. Las relaciones internacionales, la necesidad de explicar al mundo cómo serán superados los años traumáticos del Brasil de Jair Bolsonaro, son un pilar de la estrategia de este expresidente reconocido por la reducción de la pobreza. Su lugar de trabajo en el barrio Ipiranga de San Pablo se convirtió en destino de peregrinos de la política, la academia y el arte, que lo visitan a diario. El exmandatario concedió esta entrevista horas previas a aterrizar en Buenos Aires para participar en el acto multitudinario que encabezarán Alberto Fernández y Cristina Fernández celebrando la recuperación de la democracia, hace 38 años.