Un sólido sistema de atención primaria, fundado a impulsos de Salvador Allende, y las tempranas gestiones del gobierno con distintos laboratorios hacen que Chile se destaque en el mundo. Sebastián Piñera enfrenta, sin embargo, duras críticas por la crisis social y la creciente ola de contagios.

En todos los procesos de cambio cultural se produce una batalla por la memoria. Mucho más en las Revoluciones Culturales. Lo que ocurre en nuestro país es algo cercano a ello. Vimos caer estatuas en todas partes del mundo. En una imagen surrealista los campesinos rusos miraban pasar en una barcaza una enorme efigie de Lenin rumbo al desguazadero.

Juan Pablo Cárdenas S. | 

Si actualmente no nos rigieran tantas restricciones por la pandemia, pensamos que desde el primer momento que el Gobierno decidió trasladar a alguna parte el vetusto monumento del general Baquedano en el centro de Santiago, el pueblo habría salido airoso a las calles a celebrar tal decisión. Excepto la más rancia derecha y los que piensan que para servir al sistema y al orden constituido en Chile es necesario mantener como nombre de las calles y monumentos a cuantos asesinos y corruptos han poblado nuestra historia.

Me encuentro reflexionando en un extraño lugar encementado, cuando restan solo horas para el cambio de año y nuestro postergado país deje atrás a ese aturdidor año 2020, el cual seguramente ocupará amplios capítulos en la historiografía de las siguientes décadas. Debo reconocer que espero se convierta, en el capítulo anterior al de la «Victoria Popular Definitiva”.

Las transnacionales mineras están preocupadas, más bien tienen temor, que la Convención Constitucional se vaya a ocupar del muy bajo aporte de las mineras al erario nacional, y que incluso se discuta o se apruebe su nacionalización, como ya algunos candidatos a la Convención se han pronunciado derechamente por renacionalizar Chile, como el nieto del Presidente Allende, Dr. Pablo Salvador Sepúlveda Allende, candidato por el Distrito 10 de Santiago.

Andrés Kogan Valderrama | 

El próximo mes de abril en Chile no solamente será inédito por ser la primera vez que se elijan gobernadores/as y constituyentes para el país, sino porque también serán 20 años desde el llamado primer mochilazo estudiantil del año 2001.

Noé Felipe Bastías | 

El adultocentrismo de la escuela del ránking, adultocentrismo de la razón desencarnada, razón logicizante de emociones, sentimientos, cuerpos y cerebros infantiles y juveniles, no es capaz de advertir que hay un hastío juvenil áulico que, como jugando a las escondidas, y desde la razón sintiente, y luego de décadas de ser invisible para el adultismo, hace ya tiempo que grita al interior de las aulas “¡un dos tres por mí y por todos mis compañer@s!”. ¡Por favor!

Revista Confrontaciones | 

Las cosas deben plantearse en toda su crudeza. La guerra es una opción que la burguesía chilena baraja para resolver el conflicto en la Araucanía. Evalúa pasar de la actual guerra de baja intensidad a una abierta y declarada, para así aplastar militarmente la lucha del pueblo mapuche.

Rodrigo Tobar Astorga | 

La revuelta popular de octubre develó la profunda crisis política y social a la que el duopolio Concertación-Chile Vamos nos llevó en 30 años de postdictadura. Pero también, nos mostró la importante crisis de las instituciones fundantes de la república: La Iglesia y el Ejército, las que se han visto envueltas en serios problemas que las han deslegitimado ante la sociedad, llevando a que una de las principales imágenes de la protesta social sea el accionar contra sus símbolos, especialmente de las FFAA y de orden.