
Categoría: Cultura


Los años 30 del siglo XX fueron en España una de esas raras épocas en que los parias de la tierra tuvieron una oportunidad real de asaltar los cielos y construir un mundo sin explotación.

No se debe ser marxista (Marx); lo único que tiene interés es decidir si se mueve uno, o no, dentro de una tradición que intenta avanzar, por la cresta, entre el valle del deseo y el de la realidad, en busca de un mar en el que ambos confluyan.

Tercera entrega de la entrevista al historiador Raimundo Cuesta Fernández, Premio Nacional a la Innovación Educativa, con ocasión de su último libro “Unamuno, Azaña, Ortega, tres luciérganas en el ruedo ibérico (1)”. Cuesta (Santander 1.951) es doctor en Historia con premio extraordinario por la Universidad de Salamanca. Fue catedrático en el IES Fray Luis de León de Salamanca. Profesor invitado y colaborador de universidades españolas y latinoamericanas. Especialista en historia de las disciplinas escolares, las relaciones entre historia y memoria, la evolución del pensamiento crítico y de la génesis de la España contemporánea. Miembro del equipo editorial de Con-Ciencia Social. Cofundador de Cronos y Fedicaria. Su anterior libro publicado en este mismo sello editorial fue Verdades sospechosas. Religión, historia y capitalismo (2019).

La magnitud del bibliocidio es tal que luego de expurgar los cien millones de ejemplares de todo lo que esté escrito en ruso, el contenido de las bibliotecas quedará reducido a la mitad.



La editorial Ruedo Ibérico consiguió, durante dos décadas, que la historia más reciente de España fuera contada desde el exilio parisino con una perspectiva antifranquista y ajena a la censura de la dictadura. El MuVIM de València acoge una exposición explicativa de este relato disidente del régimen visitable hasta el mes de septiembre.