Dos soldados puertorriqueños que pertenecían a la Compañía 1013 de Ingeniería de la Guardia Nacional, fallecieron este pasado domingo en Irak, según informó la Guardia Nacional de Puerto Rico. Los fallecidos son el sargento José Miguel Cintrón Rosado, de 38 años de edad y oriundo del municipio de Vega Alta, y el especialista José Alberto […]
Dos soldados puertorriqueños que pertenecían a la Compañía 1013 de Ingeniería de la Guardia Nacional, fallecieron este pasado domingo en Irak, según informó la Guardia Nacional de Puerto Rico. Los fallecidos son el sargento José Miguel Cintrón Rosado, de 38 años de edad y oriundo del municipio de Vega Alta, y el especialista José Alberto Delgado Arroyo, de 41 años y natural de Río Grande. Ambos militares murieron en un suceso relacionado con la «Operación Nuevo Amanecer» en tierras iraquíes. El General de División de Puerto Rico Antonio J. Vicéns, exclamó: «con profundo dolor y pesar damos esta notificación al pueblo de Puerto Rico». En el caso específico de Cintrón Rosado, su familia recibió la notificación junto a la muerte de otro militar, también de origen puertorriqueño.
Aunque se cree que el deceso de los dos miembros de la Guardia Nacional de Puerto Rico fue provocado por una explosión reportada por la prensa internacional, las autoridades militares no ofrecerán los detalles hasta que los dos cadáveres lleguen a la Base Muñiz en San Juan. No obstante, el portavoz de la Guardia Nacional en Puerto Rico, Paul Dahlen, indicó que los hechos ocurrieron cerca de la ciudad de Taji, al norte de Baghdad. Preliminarmente se cree que una bomba hizo explosión cuando los dos puertorriqueños viajaban en un vehículo. Se sospecha que la explosión fue provocada por un artefacto enterrado en la carretera. El batallón 1013 de Ingeniería partió a tierras iraquíes hace casi un año.
Por su parte, Sonia Santiago Hernández, portavoz de Madres contra la Guerra, organización pacifista y anti-militarista de la Isla, en un comunicado de prensa, volvió a enfatizar su oposición a la presencia militar en Irak. La activista lamentó tanto el dolor como el sufrimiento de las viudas, así también de las criaturas huérfanas y familiares de los dos militares muertos. «Reiteramos el mensaje de paz. A los militares les exhortamos a solicitar la objeción por conciencia y a los jóvenes, que no opten por una carrera militar. Porque la maternidad es vida, luchamos por la paz». Según el comunicado, hasta el momento son 107 el número de bajas puertorriqueñas en el conflicto iraquí.
Borja Jiménez Zenaida Vázquez. San Juan, Puerto Rico.
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