“Vista así la realidad cooperativa, es preciso orientar la acción a suprimir toda aquella estructuras generadoras de atraso del sistema y crear los valores propios de la cooperación. Porque para que el cooperativismo desempeñe las funciones de agente de cambio y de instrumento de desarrollo en forma eficaz, pronta, visible y a fondo, debe existir el movimiento cooperativo con toda la fuerza y alcance de un movimiento social con masas, cabezas, doctrina, engranajes, espíritu, conciencia y planificación concertada y científica. Pensar en otra cosa es hacer folclore, con pinitos, emblemas y frases hechas” Dr. Carlos Mario Londoño.
“El movimiento cooperativo no podrá avanzar políticamente mientras no sea identificado por el pueblo como vehículo de liberación nacional” Dr. Carlos Mario Londoño.
¿Qué es el capitalismo? ¿Posee el cooperativismo una teoría sobre el capitalismo? Partimos desde estos dos interrogantes porque consideramos centrales tener un altísimo saber sobre el capitalismo para que el cooperativismo desentrañe el escenario concreto que impone el régimen capitalista al cooperativismo y a otras corrientes de pensamientos y acción política que esté en procura del Bien vivir y pueda en consecuencia avanzar.
Por tanto, consideramos anotar una breve reseña o conceptualización del capitalismo a fin de encontrar vocablos y caracteres que permitan alcanzar una unidad de concepción, es decir, cuando afirmamos algo que no represente confusión o dudas, si no certeza sobre el objeto en estudio.
Entendemos al capitalismo como el sistema económico y social, organizador de la sociedad basado en sus reglas a nivel global, que se expresan por medios de sus empresas de capital. Poseen dominio educativo y cultural. Es el resultado histórico de anteriores sistemas, el esclavismo, el feudalismo. Al capitalismo se le conoce tres etapas: Comercial, industrial y el actual, financiero. Se mueven bajo el influjo del incremento constante de las tasas de ganancias o plusvalía, lo que lo obliga a buscar permanentemente mercados y neutralizar a competidores.
Entendemos, por otra parte al cooperativismo como el sistema socio-económico surgido como movimiento social en la etapa capitalista industria como reacción contra los efectos crueles que desataron con la implementación del sistema industrial sobre la clase trabajadora y campesina.
El cooperativos representa un movimiento social que se expresa en la sociedad por medio de la empresa cooperativa, regidas por valores y principios que propugnan una nueva y justa organización de las sociedades. Las cooperativas por medio del mecanismo de retorno de excedentes aniquila la plusvalía y poseen además el procedimiento legal mediante el cual los miembros cooperativos pueden poner en funcionamiento la revocatoria de mandatos.
Así tenemos -a nuestro criterio- un primer acercamiento, incompleto, que, sin embargo, nos permite comprobar diferencias sustantivas y comprender que el capitalismo nunca dejará en paz al cooperativismo, en realidad, el capitalismo le plantea al cooperativismo sufrir una acechanza en diversas formas y maneras.
Si esto que acabamos de escribir es así y no de otra manera, es decir, ingenua de leer la realidad tal cual es, nos debiéramos interrogar ¿Qué cabria hacer? De nuestra parte respondemos, que ya estamos en marcha desde el Foro del poder político cooperativo Latinoamericano, estudiando, debatiendo, conversando, consensuando y proporcionando ideas y producciones intelectuales que pudieran resultar de interés.
Debemos abandonar la regla de “neutralidad política” por improcedente con la realidad impuesta por el capitalismo financiero, neoliberal, que somete a los pueblos a sufrimientos inaceptables. De ello surgen inequívocamente los desafíos del cooperativismo Latinoamericano en sociedades capitalistas dependientes y subdesarrolladas.
Repetimos: La hora histórica convoca a la inteligencia de las filas del cooperativismo a elaborar la teoría cooperativa sobre el capitalismo y al mismo tiempo construir el poder político cooperativo Latinoamericano. ¿Por qué? Porque sin el poder político no se puede modificar la realidad dolorosa e injusta.
¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.