Recomiendo:
0

Nueva vuelta de tuerca de la troika

El Gobierno griego ordena el cierre fulminante del ente público de radio y televisión

Fuentes: Prensa Latina

El portavoz del gobierno griego, Simos Kedikoglu, anunció horas antes de la medianoche de ayer el cierre definitivo del ente público de radio y televisión (ERT) por considerarlo una fuente de «residuos y falta de transparencia». Kedikoglu hizo estas declaraciones poco después de que el gobierno aprobara un decreto ley que permite a los ministros […]

El portavoz del gobierno griego, Simos Kedikoglu, anunció horas antes de la medianoche de ayer el cierre definitivo del ente público de radio y televisión (ERT) por considerarlo una fuente de «residuos y falta de transparencia». Kedikoglu hizo estas declaraciones poco después de que el gobierno aprobara un decreto ley que permite a los ministros cerrar empresas públicas.

La medida deja en la calle, a partir de hoy, a 2.700 trabajadores, según explicó a Prensa Latina el periodista de la cadena pública Babis Kokosis. «Todos los canales de televisión y de radio estatales, así como los centros regionales dejarán de emitir a las 12 horas de la noche de hoy», dijo Kokosis, «a partir de mañana todos estaremos despedidos y, según el anuncio del gobierno, dentro de unos meses quizá se abra un nuevo canal». Además de a los periodistas, el gobierno silenció la voz de tres canales de televisión, seis emisoras de radio de ámbito nacional y 19 regionales, estrechando así el panorama mediático hacia las posiciones neoliberales que únicamente defienden los grandes canales privados.

Frente a las acusaciones de corrupción y de contratar con productoras privadas la realización de una buena parte de sus programas, realizadas por el portavoz del ejecutivo griego contra los trabajadores, Kokosis alegó que «la realidad es que fueron los distintos gobiernos los que desde hacía tiempo venían obligando a la dirección de ERT a comprar programas de empresas propiedad de amigos o familiares». Igualmente consideró muy grave que una decisión de ese calado se halla tomado al margen del Parlamento y recordó que la última vez que se cerró ERT fue durante la dictadura, hace cuatro décadas, lo que reviste gran simbolismo la drástica medida adoptada ayer por el gobierno.

Pese a lo inesperado del anuncio y al poco margen de tiempo ofrecido por el gobierno antes del cierre, los trabajadores contactaron con sindicatos de la compañía eléctrica y de operadores de telecomunicaciones para tratar de seguir emitiendo por encima de la hora límite. Miles de personas se concentraron anoche frente a los estudios centrales del ente audiovisual en Atenas para protestar contra el decreto presidencial que ordenaba el fin de sus emisiones. Sin embargo, minutos antes de las 12 de la noche, hora local, los canales televisivos y posteriormente la paǵina web fueron desactivadas.

Reconocidas personalidades de la cultura y la educación, cantantes, actores, académicos, escritores y políticos de izquierda expresaron su indignación por una medida inesperada, únicamente justificada por la presión de los acreedores internacionales que convierten a la cadena estatal en una nueva víctima de los programas de austeridad.

Los acreedores internacionales habían exigido a Atenas el despido de dos mil empleados públicos antes de que finalizara el mes de junio, y según la delegación enviada por estos a principios de la presente semana el gobierno no había mostrado firmeza ante esta demanda.