Abril de 2021 será un mes de definiciones electorales en América Latina, países como Perú, Bolivia y Ecuador irán a las urnas, mientras que México, en la primera semana, comenzó la campaña, en tanto el gobierno de Chile, como medida sanitaria precautoria, definió postergar la cita democrática.
Como si se hubieran puesto de acuerdo, hasta los últimos días de abril eran cuatro los países que celebrarían elecciones en la jornada del domingo 11: el balotaje presidencial de Ecuador, los balotajes de las subnacionales de Bolivia, las presidenciales y legislativas de Perú y los comicios de autoridades locales y de miembros de la Asamblea Constituyente encargados de redactar la nueva Constitución en Chile.
Las pésimas condiciones sanitarias que vive Chile –entre otras naciones de la región– y la nueva ola de contagios del covid-19 llevó a que los trasandinos decidieran postergar las elecciones, un hecho que no sucedía desde prácticamente el inicio de la pandemia, a comienzos de 2020, cuando varios países decidieron suspender la convocatoria a las urnas en América Latina y Europa.
Chile se aprestaba a elegir a través del voto ciudadano, por primera vez en su historia a las autoridades locales, que hasta este momento fueron designadas por el presidente de la República, como dicta la actual constitución. Además, en la doble jornada cívica –estaba estipulada la votación para el 10 y 11 de abril– se elegirían a los integrantes de la Asamblea Constituyente, los encargados de redactar el proyecto constitucional. La nueva convocatoria, que sin duda alguna tiene ribetes de histórica, finalmente se fijó para las jornadas del 15 y 16 de mayo de este mismo año.
Ecuador elegirá su presidente el 11 de abril. El balotaje será entre Andrés Arauz, candidato de Unión por la Esperanza, delfín del exmandatario Rafael Correa, y el banquero de derecha Guillermo Lasso, del Movimiento CREO. Las encuestas mayoritariamente prevén un triunfo del candidato de izquierda, por lo que –de confirmarse– el progresismo volvería a dirigir los destinos del país.
Perú también va a las urnas en la misma jornada y aquí el escenario se muestra sumamente incierto. Las encuestas marcan un sorprendente bajo nivel de adhesión de todos los candidatos, ya que prácticamente ninguno alcanza un 10% de intención de voto. Con estos números lo único que puede asegurarse es que habrá balotaje el 6 de junio.
Según una investigación de IPSOS del 4 de abril, el conservador Yohny Lescano tendría un 10% de las preferencias del electorado, secundado por la progresista Verónika Mendoza y por el derechista Hernando Soto, ambos con un 9%. El trabajo destaca que con 8% estarían el exfutbolista George Forsyth y Keiko Fujimori, la hija del antiguo dictador. Teniendo en cuenta el margen de error de este tipo de trabajos es absolutamente imposible poder afirmar quiénes pasarán a segunda vuelta.
También el 11, en Bolivia se celebrarán los balotajes subnacionales, para elegir a cuatro de los nueve gobernadores del país. Los otros titulares regionales fueron electos en primera vuelta (el MAS, del presidente Luis Arce y del exmandatario Evo Morales, ganó tres de esos cinco gobiernos locales).
En La Paz, Franklin Morales (39,7% en primera vuelta) del MAS, disputará el balotaje con el candidato de Jallalla, Santos Quispe (25,18%); Damián Condori (45,62%) de Somos Todos dirimirá el cargo, en Chuquisaca, con Juan Carlos León (39,12%) del MAS; en Pando harán lo propio Miguel Becerra (40,98%) del MAS y Regis Richter (38,98%) del Movimiento Tercer Sistema; y finalmente Álvaro Ruiz (38,17%) del MAS, en Tarija, definirá con Oscar Montes (38,05%) de Unidos por Tarija.
Este mes también nos trajo el comienzo de la campaña electoral en México, con las legislativas de mitad de mandato y las locales, que están convocadas para el 6 de junio.
A pesar de la pandemia será un abril de decisiones en América Latina, un abril que presenta una oferta de oportunidades para construir el futuro que definan sus pueblos en las urnas.
Marcel Lhermitte es consultor en comunicación política y campañas electorales. Periodista, licenciado en Ciencias de la Comunicación y magíster en Comunicación Política y gestión de Campañas Electorales. Ha asesorado a candidatos y colectivos progresistas en Uruguay, Chile, República Dominicana, Francia y España fundamentalmente.