Recomiendo:
0

El abogado haitiano Patrice Florivus defiende el papel de Cuba pero critica las misiones militares en su país

«Los gobiernos latinoamericanos sólo envían militares a Haití»

Fuentes: Carta Maior

«Cuba envía para Haití muchos médicos, es esto exactamente que reclamamos, que se retiren todos los soldados y que nos manden médicos, agrónomos, técnicos para poder ayudar a los campesinos para que podamos salir de esta terrible situación»

De un mero espectador en la mesa promovida conjuntamente por el Foro Social Temático y el Foro Mundial de Educación el viernes, 27 de enero, el abogado haitiano Patrice Florivus se convirtió en la grande estrella del debate. Al ser mencionado por el director de las Facultades Latinoamericanas de Ciencias Sociales (Flacso) Pablo Gentili, que criticó la presencia en Haití de las fuerzas militares de la Organización de las Naciones Unidas (en inglés, United Nations Stabilization Mission in Haiti – Minustah), lideradas por Brasil, el militante fue estimulado por el público para dar un testimonio de como está la situación en la isla dos años después del terremoto que mató a 200 mil personas.

Después de la mesa, Florivus habló con exclusividad a Carta Maior y aprovechó para denunciar las violaciones de derechos humanos que la Minustah protagoniza en Haití – cuyo dinero para mantenerse sería suficiente para construir 61 mil casas al año en el país. «Reclamamos que se retiren todos los soldados y que nos manden médicos, agrónomos, técnicos para poder ayudar a los campesinos para que podamos salir de esta terrible situación», sintetiza.

También critica la apropiación de la reconstrucción del país por la Fundación Bill Clinton, del ex-presidente de Estados Unidos, que efectivamente invierte en las obras 1% de los valores recaudados en todo el mundo bajo esta justificativa. «No hay ninguna casa todavía reconstruida, ninguna Universidad reconstruida, ninguna escuela reconstruida», lamenta.

¿Que están haciendo los gobiernos de izquierda latinoamericanos para ayudar a Haití?

Queremos denunciar esta hipocresía de los gobiernos latinoamericanos. No todos, pero muchos de ellos tienen sus representaciones militares en la isla. Acá mismo en Brasil el gobierno se dice más socialista que capitalista, pero asume la dirección de la Minustah que es la misión de la ONU por la ‘estabilización’ de Haití. Y estos militares brasileños son responsables por muchos casos de violación de derechos humanos. Por ejemplo, fueron hasta una clase de la Universidad para golpear a un estudiante. Y todavía estamos reclamando justicia por este estudiante. También hay militares de Bolivia – ¿cómo vas a entender que Evo Morales tenga fuerza militares en Haití? ¡Esto es increíble!

Militares de Uruguay protagonizaron un caso famoso del que el presidente tuvo que pedir disculpas públicamente.

Sí, los hay también y hubo de hecho el caso de violencia sexual sobre un joven haitiano. Y en otro caso, en la base militar de la Minustah en Kap Ayisyen (Cabo Haitiano en español), fue asesinado un joven acusado de robar menos de dos dolares americanos. Y los militares lo matan dentro de la base militar. La justicia quiere pronunciarse, pero el jefe de la Minustah recurre a la inmunidad militar que tienen los soldados porque son parte de una fuerza internacional. Nuestra presencia acá no es sólo para denunciar la hipocresía de estos gobiernos dichos de izquierda como también para pedir la solidaridad de los pueblos porque nosotros no creemos en los planes de los Estados, creemos en nuestra propia estrategia como pueblo.

La epidemia de cólera se produjo por un virus traído por la Minustah, ¿no? ¿Esto ya se comprobó?

Sí. Hemos perdido muchos compatriotas haitianos por la contaminación de un río por los militares de una base de Minustah en el centro del país. Eran militares de Nepal. Pero todavía la ONU no acepta que la Minustah sea la base de la epidemia del cólera. Pero tenemos muchos estudios, de centros norteamericanos, de un biólogo francés y todos están de acuerdo que el virus de la Minustah viene de Nepal. El lugar desde adonde se inició la propagación del cólera es el río adonde los militares echaban los excrementos humanos de la base. Según el acuerdo de principios que el Estado haitiano tiene con la ONU, a cada vez que hay un caso de violación de Derechos Humanos, si hay muerte, la familia de la persona que murió recibe 50 mil dolares americanos de indemnización. Esto lo construimos un grupo de abogados para hacer una documentación posible y empezar un proceso legal contra la Minustah, para la reparación civil del pueblo haitiano.

¿El pueblo entonces está totalmente en contra de la presencia de estos ejércitos?

¡Totalmente, totalmente! ¡No estamos en guerra! Es más: somos un país seguro, tenemos menos de tres muertes por día según la ONU – ¿qué país en América Latina tiene un índice tan bajo como este? Acá en Brasil, ¿mueren sólo tres personas al día? !No y sin embargo no están las fuerzas de la ONU! Pero nosotros creemos que tenemos un papel geopolítico muy importante para los norteamericanos porque estamos frente a Cuba, a 45 minutos de Cuba. Haití es como un regalito entre los países, todos quieren tener hegemonía sobre Haití. Y Brasil también por lo de su presencia dentro de la ONU (Brasil lucha por tener un cupo permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU), así como Francia o Canadá.

¿Qué tipo de colaboración podrían hacer los gobiernos y pueblos de América Latina por Haití?

Tenemos un buen ejemplo: Cuba, cada año forma muchos estudiantes haitianos por medio de un programa de becas en la escuela de medicina de Santiago. También Cuba envía para Haití muchos médicos -es esto exactamente que reclamamos, que se retiren todos los soldados y que nos manden médicos, agrónomos, técnicos para poder ayudar a los campesinos para que podamos salir de esta terrible situación. Los militares gastan un dinero con el que se podrían construir 61 mil casas por año- y ya tienen más que cinco años! Se construyéramos 61 mil casas por año en cinco años imagínate cuántas casas tendríamos hoy! Y tenemos un serio problema de viviendas.

¿Cómo está caminando la reconstrucción del país tras dos años del terremoto?

Todavía el gobierno con ayuda de algunos organismos intencionales saca los destrozos pero no hay ninguna casa todavía reconstruida, ninguna Universidad reconstruida, ninguna escuela reconstruida. Pero: el gobierno dice que tiene un plan de reconstrucción, pero es un plan que está siendo manejado por una comisión cuya cabeza es Bill Clinton (el ex presidente de Estados Unidos). Bill Clinton es el presidente de la comisión de reconstrucción de Haití y tiene su fundación, la Fundación Clinton que gana mucho dinero en la reconstrucción. Y por cada ciento de dolares que está dedicado a la reconstrucción sólo un dólar americano llega efectivamente a Haití. Todo el resto de dinero se queda en la Fundación Clinton, a la Fundación Jimmy Carter y de otros norteamericanos y de otros países de Latinoamérica.

¿Y las movilizaciones populares: la gente se subleva ante esto?

A veces en la prensa se dice que no hay movilizaciones en Haití, que todo lo hace la Minustah. ¡No, no! Es que ellos tienen el control de los medios de comunicación y con esto divulgan todo el discurso que quieren. De verdad, en Haití hubo unas cuántas movilizaciones este año contra la Minustah, por la autonomía de la Universidad, para reclamar justicia para las víctimas del terremoto en Haití, así como para el joven violado por los militares uruguayos y por el joven asesinado en la base de la Minustah. Hay muchas cosas que no se sabe en América Latina sobre Haití. Sólo lo que se sabe de Haití es que es un país pobre, adonde no hay militancia – pero esto es todo mentira! Estamos acá para denunciar también estas informaciones y para decir que nosotros en Haití estamos de pie día tras día para reclamar la construcción de un otro país, de un país adonde valga la pena vivir.

¿Ustedes están haciendo un recorrido por muchos países, es una agenda para denunciar esta distorsión?

Sí, es como una agenda porque en agosto pasado, estuve en Nicaragua, antes en Sao Paulo y en Belém (en Brasil). Y hay otros compañeros haitianos que vienen acá siempre para buscar apoyo y solidaridad. Porque si no levantamos lo que hay en Haití puede ser que mañana ocurra en otros países en América Latina – el caso de Haití no tiene que se repetir en ningún otro país!

Es la importancia de la memoria: recordar para que no vuelva a ocurrir.

Si, es la importancia de la memoria y lo que se pasa en Chile tenemos que dar seguimiento a la lucha que ocurre en Chile (por la educación pública) porque lo que se pasa allá puede venir a pasar acá también. A Brasil o a otros países de América Latina. Por ejemplo nosotros tuvimos la invasión militar en la Facultad de Medicina en el mismo momento en que en Sao Paulo estaba la invasión de la Universidad de Sao Paulo. Es por esto que yo digo que no existe una maldición haitiana (se dice que hay una maldición porque los haitianos habrían hecho un pacto con el diablo para lograr la independencia francesa), la maldición es el capitalismo, los estados anti-nacionales, nuestras burguesías que no tienen ningún plan para la aproximación de nuestros pueblos.

Cantaste una canción en ‘creole’ (el idioma nativo) al final del encuentro. ¿Qué dice la letra?

Es una oración a un luchador haitiano que se llama Buckman que ha realizado la ceremonia en la que se juntaron los negros, cantaron una canción y tomaron sangre de un puerco y que antecede el inicio de la Revolución Haitiana (1791-1804). A Buckman consideramos un grande luchador y a cada vez que salimos cantamos para que venga a darnos fuerzas y seguir luchando contra el imperialismo.

Fuente: http://matrizur.org/index.php?option=com_content&view=article&id=18113:gobiernos-latinoamericanos-solo-envian-militares-a-haiti-denuncia-abogado-&catid=37:patria-grande&Itemid=56