En el marco de las actividades que la Resistencia va a desarrollar a un año del golpe de Estado cívico-militar, la Plataforma de Derechos Humanos convocó al pueblo hondureño a asistir a la instalación de la Comisión de Verdad. Esta instancia pretende ser una verdadera y eficaz alternativa a la ya descalificada Comisión de la […]
En el marco de las actividades que la Resistencia va a desarrollar a un año del golpe de Estado cívico-militar, la Plataforma de Derechos Humanos convocó al pueblo hondureño a asistir a la instalación de la Comisión de Verdad. Esta instancia pretende ser una verdadera y eficaz alternativa a la ya descalificada Comisión de la Verdad y Reconciliación, impulsada por el presidente Porfirio Lobo y bendecida por los sectores nacionales e internacionales que planearon y ejecutaron el golpe.
«Todas aquellas personas que han sufrido la represión, la tortura, la muerte y el desarraigo de sus seres queridos, podrán por fin sentirse representadas por individuos que tienen compromiso con los derechos humanos» -dijo a Sirel la coordinadora nacional del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), Bertha Oliva-.
Será un momento muy emotivo, que va a generar esperanza y va a cumplir con la necesidad de hacer memoria histórica, abrir juicios y sancionar a los responsables de lo que ha ocurrido».
La Comisión de Verdad va a estar conformada por nueve comisionados de reconocido prestigio, como el sociólogo François Houtart, la cofundadora de las Madres de Plaza de Mayo, Nora Cortiña, el magistrado español Luis Carlos Nieto, la defensora de derechos humanos Elsie Monge, la escritora hondureña Helen Umaña y el padre y defensor de derechos humanos Fausto Milla, entre otros.
El trabajo de investigación durará aproximadamente un año y se prevé dar a conocer los resultados el próximo 28 de junio de 2011.
«El trabajo será desarrollado por un nutrido equipo de técnicos de diferentes países, que permanecerán en contacto con los comisionados.
Su trabajo no se va a limitar al tema de las violaciones de los derechos humanos -continuó Oliva- sino a analizar el por qué del golpe de Estado, por qué se escogió a Honduras, para que sirva de referencia histórica y parámetro para el futuro».
La defensora de derechos humanos alertó sobre el peligro que podrían correr las personas que se van a involucrar en este proyecto.
«Los enemigos de la verdad, los que han dado el golpe militar, van a tratar de descalificar nuestro esfuerzo y tenemos que cuidarnos.
Decidimos limitar el número de hondureños que van a integrar la Comisión y el equipo técnico, porque los golpistas están al acecho y van a hacer de todo para que fracasemos.
Es por eso -explicó Oliva- que necesitamos el respaldo político y humano a nivel nacional e internacional».
La ardua tarea que recién empieza tendrá que enfrentarse a un posible rechazo y desconocimiento de parte de las principales instituciones del Estado, que han sido parte activa del golpe.
«Sabemos que es una posibilidad, sin embargo están obligadas por la ley a brindar informaciones. Si se negaran, quedará registrado como la verdadera negación de los hechos oficiales y vamos a hacer uso de las leyes.
Pase lo que pase -explicó la coordinadora del COFADEH- no vamos a esperar, ni a ocultar los resultados por diez años, tal como pretende hacer la Comisión de la Verdad y Reconciliación del gobierno de Porfirio Lobo, que persigue blanquear el golpe de Estado.
Los vamos a hacer públicos de inmediato, porque no podemos ocultar el proceso de la verdad».
Con este importante esfuerzo, la Plataforma de Derechos Humanos persigue el objetivo de que estos resultados sirvan para reconstruir la historia, fortalecer la memoria histórica del país y que sean sustento para las acciones legales que se van a interponer a nivel internacional.
«Nuestra búsqueda de justicia no termina en un informe, sino en la aplicación de justicia a los culpables de este crimen de lesa humanidad, que se ha cometido contra el pueblo hondureño.
Es por eso que ven esta iniciativa como peligrosa y van a tratar de apartarnos del camino, para que las víctimas no tengan respuesta», agregó Oliva.
«Sin esclarecimiento de la verdad no puede haber reconciliación. Tampoco puede darse en un contexto de constante violación de los derechos humanos, de persecución política y de negación de esa realidad que vive el país.
Quieren que el pueblo hondureño olvide, y eso nunca va a ser posible», concluyó.
Fuente: http://www.rel-uita.org/