Los partidos políticos utilizan las elecciones para adelantar sus objetivos, con eso en mente tienen sus estrategias y tácticas para lograr los mismos. Eso ocurre en todo el mundo, Puerto Rico no es la excepción. En la mayoría de los países las elecciones tienen peso final, pero en Puerto Rico, colonia intervenida, sin poderes reales, se limita a decir quién administra la colonia a nombre de Estados Unidos. Esa es la realidad.
Cada partido tiene sus objetivos, los fuertes quieren dominar y “ganar”, los emergentes quieren crecer y fortalecerse. Las elecciones tienen ganadores y perdedores pero no en el sentido deportivo, se puede «ganar» aún sin salir electo. Si las elecciones adelantan tus objetivos estratégicos pues hay ganancia.
En Puerto Rico donde las elecciones son una encuesta participativa, sin democracia real, en términos objetivos ganó el pnp, partido corrupto, colonial, vividor, ganó, obtuvo la administración de la colonia, de eso no hay duda, eso dicen los números. Aquí una distinción importante, cuando decimos el pnp estamos hablando de la institución, de su liderato, no de los miles de puertorriqueñas y puertorriqueños que lo han respaldado por ahora. Son en su mayoría honestos, trabajadores, solidarios a la cual debemos convencer a salir de esa institución. Se está dando, de 368 mil íntegros en 2020 bajaron a 345 mil en 2024, es lento pero va.
¿Se pudo adelantar? Creo que sí, todos los que pusieron sus esperanzas en el PIP y la alianza. Y usted se preguntará pero cómo es eso, si llegaron segundos, pues les vamos a explicar. Los partidos emergentes ganan cuando adelantan su causas y eso precisamente hizo el PIP. Los números no mienten. En el 2016, el PIP obtuvo el dos por ciento de los votos (2.1%) 33 mil votos, ya para el 2020 subió al 13.7 % 174 mil votos, y Juan Dalmau en alianza alcanzó los 370 mil votos, para un 32%, convirtiéndose además en el segundo partido en Puerto Rico, de cuarto que era en 2020. Entonces sus adelantos son notables.
El logro mayor sin embargo no fue solo los números, sino lo que representó su participación para el pueblo. La honestidad, el respeto, las propuestas de un país, el deseo de salir de la mediocridad, corrupción, mentalidad colonial del pnp y ppd, fue reflejado en su participación. Y una parte del pueblo, una tercera parte lo avaló, apoyó ese esfuerzo, abrió caminos para nuevas luchas. Todo eso es adelanto. No es poca cosa.
En la política hay un concepto que se llama masa crítica, viene de la ciencia pero se usa ahora en la política. Es que los cambios en la sociedad no se logran hasta que usted no tenga cierta cantidad de personas apoyando ese cambio. ¿Cuánta gente?, se dice entre un 20% a 30% de una sociedad. Cuando se logra ese número el pueblo empieza a escuchar sus propuestas y aceptarlas, pero no solo se necesita el número que es importante, debe tener detrás un grupo de personas decididos, con intencionalidad empujando el proyecto, números sin empuje no es suficiente, es solo potencial.
En estas elecciones el pueblo de Puerto Rico logró el potencial, ahora depende de todos nosotros si tenemos la habilidad de convertir ese potencial en cambio. Hay números para trabajar, 370 mil votos, 32%, más, 296 mil votos por la independencia, sin contar los dejados en blanco que fueron 169 mil más, fue una campaña del PIP. A todo esto se une una campaña de honestidad, seriedad y propuestas que las personas conocieron.
Ahora, solo falta ver si tenemos la capacidad para empujar lo que queremos, tenemos fe que sí, los puertorriqueños somos mucha pieza. Adelante y a empujar…
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