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Honduras

Presidenta Iris Xiomara Castro advierte a Trump la revisión sobre la presencia militar en la base de Palmerola

Fuentes: Rebelión

El cinismo pierde terreno con el imperio estadounidense. El teatro y la ficción de los yuppies metidos a políticos solo eran antiguas formas de mimetizar la tragedia que ocurría en la realidad mundial. Los saldos del dolor tenían cifras concretas y porcentuales en la estadística de las aventuras de la civilización. Los indicadores figuraban como estándar de los errores marginales que conllevaba cada operación de enmascarados actos de recuperación democráticos. La taumaturgia y los trucos mágicos cerraban los ojos de los incautos consumidores de mentiras; y los conejos aparecían por arte de magia en la chistera de los magos de occidente y, las liebres y las palomas de la presunta paz se deslizaban por las bocamangas de los actores de truculencias y el circo nos apocaba sí, pero nos entretenía.

Pero, eso ya ha desaparecido por completo en este peculiar siglo XXI. Realmente no han existido apocalipsis más atroces que la Primera y la Segunda Guerra Mundial con sus más de 90 millones de vidas perdidas consagradas a la nada, pero estas estaban precedidas de las carnadas fraseológicas de la maldita “Patria” y el deber ciudadano de defender con eufemismo a «la civilización occidental».

De cualquier modo, parece que los dueños del mundo se cansaron de ser arlequines de colores abigarrados o saltimbamquis de tretas. Nos salvaron del fascismo nazi dicen -pero en realidad fue la URSS-para instaurar otro fascismo capitalista con menor fanatismo, pero con iguales o mayores cifras de horror. Sin embargo, ahora en la actualidad, están mostrando su verdadera monstruosidad sin ninguna clase de velo o máscara alguna. Total, las reacciones de los ciudadanos conscientes del mundo que componen la humanidad no pasan de fugaces censuras morales y de improvisadas protestas callejeras que esfuman el tiempo de las motivaciones hiperbólicas de las hilarantes iras de los antisistema.

Los que denunciamos como bobos la falta de cumplimiento de las resoluciones de la ONU por parte de Israel para respetar la creación los Estados de Palestina e Israel, somos el hazme reír de estos monstruos del ahora. Faltar de cumplir una resolución es simplemente una ilegalidad, una superflua omisión que la puede cometer cualquier país, una trivial anécdota de indiferencia y absolutismo, pero la verdadera tragedia es el genocidio trasmitido in Live. La espantosa fatalidad es la Licencia para matar como Fire Fighter contra contrincantes indefensos a la luz del día. El infortunio verdadero es asesinar en directo y a todo color bajo la pantalla del televisor o del monitor virtual sin que esto levante el más mínimo sentido de indignación. Como un Reality Show en que los sionistas siguen a los palestinos para acabar con el ultimo rastro de sus apestosas vidas de hijos de Alá. ¿Por qué se asesinan los niños? La lógica de estos asesinos a la luz del día es que en cada niño muerto descansa la eliminación de una amenaza futura. ¿Por qué se destruyen hospitales? Los hospitales representan de algún modo la mejoría de los enemigos enfermos que se despertarán algún día con mayor odio, por eso es mejor acabar de una vez por todas con los hospitales que son fachadas de rebeldes en pausa. El que dirige hospitales es necesario apresarlo porque está cometiendo el delito de reproducir esta raza proscrita por los designios de Israel y la aquiescencia del régimen estadounidense.

Los monstruos modernos son serpientes y tiburones que se echan una fachada de humanismo para no perder las formas y se perfuman de civilización y se embadurnan con las colonias fragantes de los derechos humanos para promover la retórica de la democracia mundial, pero carecen de corazón, y por eso cuando las enfermedades coronarias ponen en riesgo sus vidas no dudan en hacerse trasplante de corazones de cerdos que es lo que más se acerca a sus naturalezas de monstruos.

Estos que dirigen el mundo son los tataranietos de los homos sapiens que acabaron con los neandertales y arrasaron con ecosistemas enteros y cambiaron de una vez por todas el rostro de la naturaleza. Es esta misma raza de homo sapien que conspiran para la destrucción del mismo homo sapien, y lo hacen con la misma voracidad de un adicto de sangre y dinero con una regresión notable hacia el mismo hombre que salió de las cavernas para recolectar frutos y cazar hace 80 mil años, con la consciencia puesta en las tripas y las bilis, pero sin un ápice de tener sensibilidad por el futuro.

Este régimen estadunidense cómplice del genocidio palestino o por lo menos con la boca cerrada para deplorarlo, levanta ahora la voz en el aparentemente intrascendente istmo centroamericano para denunciar a la ciudadana Sonia Marlina Dubón, una Magistrada de la Corte Suprema en Honduras por haber realizado “actos contra el estado de derecho”, porque “su estado de derecha” es arrebatar los países en pedazos volviendo a la lógica colonial de despojo de territorios; y la honorable magistrada burló sus intereses expansionistas al liderar la iniciativa constitucional de devolverle la soberanía a Honduras, eliminando las Zedes ( Zonas autónomas políticas de empresarios estadounidenses comprando su propio paisito dentro de Honduras). Por lo tanto, estos fantoches de la ética con las migajas podridas de su antigua moral cuáquera que les queda nos amenazan mediante listas proscriptivas como la Lista Engel. ¡Las víboras hablando del veneno ¡

Hoy, primero de enero de 2025, La presidenta de Honduras Xiomara Castro Zelaya quien ha empezado una revolución y una refundación silenciosa en Honduras, congruente con su dignidad en su política exterior le ha mandado un mensaje claro y directo al presidente electo Donald Trump, en la lógica de que si existe una relación diplomática entre ambos países la misma tendrá que basarse en el diálogo y en el respeto mutuo; y que si cumple con su amenaza de desterrar a los inmigrantes hondureños que residen en Estados Unidos, los estadounidenses tendrán que retirar la base militar hondureña de Palmerola, la Enrique Soto Cano que se instauró en 1982 desde tiempos de la Guerra Fría, porque ya Honduras está cansada de jugar el papel de simple comparsa y destinada a obedecer órdenes unilaterales en anteriores administraciones.

La presidenta Iris Xiomara Castro anteriormente había denunciado el tratado de extradición por tráfico de drogas celebrado entre Honduras y Estados Unidos, y siempre ha mantenido una posición de dignidad frente al gigante del norte. Lo risible son las exigencias de moral y democracia que nos intenta imponer Estados Unidos con listas y juicios de valor; y lo reprochable es como la vida de los palestinos entre ellos, niños, mujeres y ancianos no vale nada en esa tabla de moral cuáquera que va degradando la verdadera dimensión o el valor de la vida humana en el mundo. Lo risible es también la posición de apócrifos defensores de derechos humanos que deploran el genocidio en Palestina y defienden con posiciones neutrales las movidas geopolíticas de los estadounidenses en nuestro territorio. Lo risible son también esas ONGs que se ufanan de ser la reserva moral en estos países y son financiados o bien por USAID o bien por la Unión Europeas y no opinan nada del genocidio, pero defienden con sus ejecutorias las jugadas del expansionismo imperial, defendiendo la intromisión de aquel en nuestra soberanía nacional. Frente a ello celebramos la posición digna de la presidenta hondureña y pedimos que la humanidad despierte de ese sueño de siglos y sepa quién es el verdadero cínico que representa al genuino enemigo moral del planeta y de la sobrevivencia de la propia humanidad.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.