1. Temo más a que se abra la tierra y nos trague vivos a todos, sin poder defendernos, sin meter siquiera las manos. Contra el capitalismo por lo menos hemos luchado con tenacidad varias décadas y estamos muchos dispuestos a continuar. Recuerdo que hace poco menos de 60 años me convencieron que el gran objetivo […]
1. Temo más a que se abra la tierra y nos trague vivos a todos, sin poder defendernos, sin meter siquiera las manos. Contra el capitalismo por lo menos hemos luchado con tenacidad varias décadas y estamos muchos dispuestos a continuar. Recuerdo que hace poco menos de 60 años me convencieron que el gran objetivo era la conquista de la naturaleza, es decir, que un día los seres humanos con su trabajo, su estudio y su pensamiento, serían capaces (poco a poco)de controlar los fenómenos naturales y ponerlos a su servicio. Millones de cosas hemos inventado para vivir con cierta comodidad, pero la naturaleza nos retumba con sus sismos, temblores, huracanes e inundaciones, que nos sentimos enanos después de más de 10 mil años.
2. La realidad es que pensamos muy poco acerca de la contaminación ambiental, del calentamiento global de la tierra, de las agresiones que los humanos le propinamos la mayoría de las veces con gran irresponsabilidad; pensamos siempre que nada pasará por la extremada poca información que atendemos y porque no entendemos esos fenómenos que están fuera de nuestro alcance o control.; pero aquí estamos. Lo que tenemos a mano los pocos que pensamos en ello, son los procesos de transformación inmediatos que los seres humanos necesitamos poner remedio para pasar a atender nuestra casa mayor que es el planeta tierra. La pregunta es: ¿Cómo salvar nuestra gran casa si está en manos de la burguesía y el imperio asesino?
3. Pero aquí está el otro problema, quizá más importante y más inmediato: ¿Cómo carajos destruir a una clase poderosa explotadora y asesina que lleva por lo menos dos mil años pisándole el cuello al 95 por ciento de la población trabajadora en su historia? Los siempre ocupados en estos problemas, pensamos esperanzados a veces en distancias de 20 o 30 años para cambiar pero olvidamos que los periodos económicos de la historia: esclavismo, modo asiático, feudalismo, duraron muchos siglos más que el actual capitalismo. ¿Cómo carajos destruir y enterrar el capitalismo si por donde miremos sólo encontramos derrotas al proletariado?
4. Lo sucedido en China me pone siempre a reflexionar: Mao Tsetung encabezó y dirigió en 1949 la gran revolución en el país más poblado de la tierra y hoy sigue siéndolo con 1400 millones de habitantes. Durante 27 años buscó construir una china popular, igualitaria cuya fuerza principal se basaría en los campesinos; Mao, además de dirigente era un filósofo que con ese gran número de habitantes buscaba construir un país comunista absolutamente igualitario. No logró sus objetivos porque la fuerza imperialista y guerrerista de los EEUU y aliados fue superior. A partir de 1979, China tomó el camino capitalista de desarrollo conservando algo del maoísmo. Parece haber avanzado mejor y se ha colocado en la competencia real.
5. Esto último de China, el nuevo modelo de Rusia, el desarrollo de la India, Brasil y otros países, todos ellos en batallas por la dominación mundial, me hacen pensar que están haciendo retroceder a los EEUU y lo están llevando a la pérdida de mercados y de influencias. No quiere decir que lo han derrotados; pero lo han metido en profundas contradicción con muchos países de Europa que le han hecho perder fuerza y autoridad. Por ello me pregunto muchas veces: ¿No será acaso más importante esta batalla por mercados donde pueden despedazarse países que las batallas de masas en las calles que han caído en los últimos años?
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