El golpe de estado de 2009 en Honduras no sólo quebrantó la institucionalidad y afianzó la oligarquía y los grupos de poder, sino que permitió a los gobiernos continuadores del golpe profundizar el modelo neoliberal extractivista, incentivando el saqueo de territorios y bienes comunes y desregularizando, cada vez más, el mercado laboral.
Más del 70 por ciento de la población en pobreza, altos índices de desempleo abierto y subempleo, niveles de corrupción e impunidad entre los más altos de la región, criminalización sistemática de defensores y miles de familias que cada año huyen desesperanzadas del país, es la herencia que dejan estos gobiernos.
A menos de dos semanas de las elecciones generales, Joel Almendares, secretario general de la Confederación Unitaria de Trabajadores de Honduras (CUTH), explicó a La Rel cuáles han sido los impactos de estas políticas sobre los derechos laborales y sindicales.
“Ha habido una creciente desregularización del trabajo, unido a la profundización de la flexibilización y precarización laboral. Una de las leyes más nefastas ha sido sin duda la Ley de Empleo por Hora: se han perdido derechos y se precarizaron empleos permanentes”, dijo Almendares.
“También hubo empresas o instituciones que simplemente cambiaban de denominación o razón social y acababan con los sindicatos. Otras creaban sindicatos paralelos para contrarrestar un verdadero proceso de organización”, recordó el dirigente sindical.
Retrocesos
Todas estas medidas anti obreras han impactado negativamente en el nivel de sindicalización del país y en la salvaguarda de derechos.
“Hay claros retrocesos en el derecho a la libre sindicalización y la negociación colectiva. Juan Orlando Hernández ha sido un verdadero caos para el sector sindical”, sentenció el secretario general de la CUTH.
Almendares recordó también lo insignificante que han sido los programas gubernamentales para generar empleo, casi siempre hechos a la medida de los intereses de las grandes transnacionales.
También condenó la ambigüedad mostrada por las autoridades del trabajo.
“Escudándose detrás de la necesidad de generar empleo y supuesto desarrollo, se han parcializado y han venido protegiendo de manera sistemática los intereses del gran capital nacional y transnacional.
Lo han hecho a costa de los derechos de trabajadores y trabajadoras, abandonándolos y permitiendo la violación de sus derechos. No los han tutelado, más bien han sido sus verdugos”, advirtió.
Propuesta política del sector sindical
Ante una posible una victoria electoral de la alianza opositora encabezada por la candidata presidencial Xiomara Castro y el Partido Libertad y Refundación (Libre), la CUTH hizo entrega de la propuesta política del sector sindical.
Entre otros puntos, se pide la derogación inmediata de varias leyes, como la Ley de Empleo por Hora, la Ley Orgánica de las ZEDE y las reformas al Código Penal que criminalizan la protesta.
También poner un alto a la tercerización y precarización laboral, garantizar el respeto del Estatuto del Docente, de los Convenios 87, 98, 151, 189 y 190 de la OIT[1], así como de la consulta previa, libre e informada establecida en el Convenio 169.
La propuesta pide además asegurar una salud y educación pública universal y de calidad y la creación de una Fiscalía para delitos laborales.
Nota:
[1] Convenios sobre libertad sindical, negociación colectiva, relaciones de trabajo en la administración pública, trabajadoras y trabajadores domésticos, violencia y acoso en el mundo del trabajo.
Fuente: Rel UITA
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