El expresidente de Honduras, Manuel Zelaya, afirmó este lunes que no habrá justicia en su país en relación con el golpe de Estado que lo sacó del poder el 28 de junio de 2009, por lo que consideró que el pueblo hondureño hará «justicia en las urnas». «Nosotros sabemos que aquí no va a haber […]
El expresidente de Honduras, Manuel Zelaya, afirmó este lunes que no habrá justicia en su país en relación con el golpe de Estado que lo sacó del poder el 28 de junio de 2009, por lo que consideró que el pueblo hondureño hará «justicia en las urnas».
«Nosotros sabemos que aquí no va a haber justicia con relación al golpe de Estado», acotó Zelaya en una rueda de prensa celebrada en la capital hondureña.
El ex presidente señaló que votando en la urnas por el partido Libertad y Refundación (Libre), en las elecciones generales de 2013, es como el pueblo hondureño hará justicia.
«El pueblo hondureño está cansado del bipartidismo, del tradicionalismo político, cansado de que nos impongan las medidas económicas desde los intereses de las trasnacionales de Washington o de Europa, o que se utilicen nuestras fuerzas militares y policíacas para dar golpes de Estado en este país», comentó.
Zelaya, introdujo más temprano su renuncia formal ante el Partido Liberal, donde militó por más de 40 años, para concentrarse totalmente al partido Libertad que él mismo fundó en junio de 2011 como una corriente interna del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP).
«Implícitamente hemos renunciado al partido que dio el golpe de Estado» aclaró Zelaya, quien aseguró que la decisión ya había sido manifestada.
Ante esto, resaltó que el golpe de Estado de 2009 fue «la mayor tragedia» que ha sufrido Honduras en el siglo XXI, y para lograr la transformación del país se necesita convocar a una Asamblea Constituyente.
Manuel Zelaya retornó a Honduras el pasado 28 de mayo gracias a la mediación de Venezuela y Colombia, luego de dos años de exilio, tras el golpe de Estado que lo derrocó en junio de 2009.
Entre los hechos que justificaron el golpe de Estado se encuentran una serie de reformas impulsadas por Zelaya, que ahora también son apoyadas por el actual presidente Porfirio Lobo y criticada por los sectores conservadores de ese país.
Zelaya aspira medirse nuevamente en las urnas en el 2012, aunque adelantó que si no le permiten postularse nuevamente como Presidente, entonces podría apoyar la posible candidatura de la ex primera dama, Xiomara Castro.