La Federación Sindical Mundial (FSM) fue fundada en París el 3 de octubre de 1945. En el Primer Congreso de la Federación Sindical Mundial asistieron delegados en representación de 67 millones de trabajadores miembros de 56 organizaciones nacionales de 55 países y 20 organizaciones internacionales. El Primer Congreso de la Federación Sindical Mundial fue precedido […]
La Federación Sindical Mundial (FSM) fue fundada en París el 3 de octubre de 1945. En el Primer Congreso de la Federación Sindical Mundial asistieron delegados en representación de 67 millones de trabajadores miembros de 56 organizaciones nacionales de 55 países y 20 organizaciones internacionales.
El Primer Congreso de la Federación Sindical Mundial fue precedido por la Conferencia de la Federación Sindical Mundial que se celebró en Londres del 6 al 17 de febrero de 1945 y en la que se llevó a cabo gran parte del trabajo de preparación. A esta, siguió la Conferencia de San Francisco en la que se creó la Organización de Naciones Unidas (ONU).
El Congreso de París de la FSM se adhiere a los principios generales de la ONU y habla en nombre de los trabajadores del mundo organizados en sindicatos que quieren un mundo libre de guerras y de injusticias sociales.
La FSM declara que su objetivo primordial es contribuir a la emancipación de los trabajadores a través de la lucha:
– Contra todas las formas de explotación del hombre por el hombre y lograr y garantizar para todos los trabajadores condiciones de vida y de trabajo que les permitan obtener los mayores beneficios posibles del fruto de su trabajo.
– Contra el colonialismo, el imperialismo, la dominación y el expansionismo en las esferas económica, social, política y cultural.
– Por el derecho y la garantía del pleno empleo.
– Por una legislación de seguridad social completa y adecuada que proteja a los trabajadores y a sus familias en caso de enfermedad y vejez, y todas las demás formas de asistencia y de seguridad social.
– Para lograr la democracia social, económica y política, la defensa y desarrollo de los derechos y libertades de los trabajadores y los sindicatos, el respeto de los derechos humanos y la aplicación de la Declaración Universal de los Derechos Sindicales.
– Por la prevención de una guerra nuclear y por la disolución de todas las alianzas y bloques militares; contra la agresión y la guerra y por la promoción de la distensión internacional, la instauración de una paz justa y duradera.
La FSM, consecuente con sus principios de clase, ayudó y sigue ayudando a los trabajadores de todo el mundo en la lucha por su emancipación. En la dictadura franquista la FSM prestó un gran apoyo a los trabajadores del Estado español en la lucha contra la dictadura y por las libertades y la emancipación social.
En las luchas más recientes, la FSM está siguiendo de manera constante en nuestro país las movilizaciones que se dan por los trabajadores, en todos las ramas de producción, en los servicios, en la administración o a los pensionistas, apoyando en todo momento sus reivindicaciones y sus luchas, mostrando la solidaridad en la inmensa mayoría de los conflictos que se dan. Así ha sucedido en el conflicto de Panrico, Coca-cola, Movistar, Ryanair, Casa de la Moneda, Limpieza y un largo etcétera.
Esta solidaridad es un apoyo muy importante para los trabajadores y los sindicatos firmantes de este manifiesto, porque trascienden nuestras luchas las fronteras y se conocen a nivel mundial por estar avaladas, amparadas y divulgadas por la FSM, que representa a más de 90 millones afiliados en muchos países del mundo.
Por todo lo anterior y porque queremos fortalece la FSM, celebramos el 70º aniversario el 3 de octubre de 2015, para unir y desarrollar más el sindicalismo de clase el cual defendemos y así hacer avanzar al conjunto de los trabajadores.