Los partidos checos Socialdemócrata (CSSD) y el conservador Cívico Democrático (ODS) cerraron hoy las elecciones legislativas de la Cámara de Diputados con un empate técnico de un 20 por ciento de votos, según conteos preliminares. En tercer lugar se ubicó la agrupación liberal conservadora TOP 09 con un 17 por ciento de las boletas, conforme […]
Los partidos checos Socialdemócrata (CSSD) y el conservador Cívico Democrático (ODS) cerraron hoy las elecciones legislativas de la Cámara de Diputados con un empate técnico de un 20 por ciento de votos, según conteos preliminares.
En tercer lugar se ubicó la agrupación liberal conservadora TOP 09 con un 17 por ciento de las boletas, conforme a los datos publicados por la agencia SC&C poco después del cierre de los colegios aquí.
Los partidos Comunista y la denominada «Cosa Pública» ocuparon el cuarto y quinto puesto, respectivamente, con un 11 por ciento de los sufragios; seguidos por el democristiano Partido Popular (5,0 por ciento), con posibilidades de ingresar en la Cámara de Diputados para la próxima legislatura de cuatro años.
Se calcula que el 62 por ciento de los ocho millones de electores checos con derecho al voto acudieron a las dos jornadas de votaciones de 2010, inferior en 2,5 por ciento a la asistencia registrada en 2006, según Radio Praga.
La concurrencia de unos 25 partidos y movimientos políticos minoritarios en la liza legislativa contrasta con el escaso apoyo popular logrado por las fuerzas tradicionales, comandadas por la socialdemocracia centrista, del ex primer ministro Jiri Paroubek, y la derecha de Petr Necas.
El futuro gobierno de coalición -prevén analistas- afrontará una pesada carga en su gestión, derivada de la crisis económica y una caja fiscal en rojo.
Si se confirman los resultados de boca de urnas, el país centroeuropeo estará comandado en los próximos cuatro años por una alianza de centro derecha, con una mayoritaria representación del ODS y su más cercano aliado TOP 09, del ex canciller Karel Schwarzenberg.
Para muchos observadores, los comicios de 2010 parecen ser resultado de una profunda crisis institucional de los partidos tradicionales, tanto para la socialdemocracia como para los conservadores.
Entre los dos, más los comunistas, apenas consiguieron un 51 por ciento de respaldo en las urnas, según los informes preliminares.
Si estas cifras se confirman, se trata de una fuerte caída de la izquierda, comentó el politólogo Tomas Lebeda a la televisión pública.
Con 10,5 millones de habitantes, la República Checa afronta una deuda pública equivalente al 35 por ciento del Producto Interior Bruto, mientras el déficit presupuestario del 2010 se estima en un 5,3 por ciento del PIB.
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