Según los últimos sondeos publicados esta semana, entre un 55 y un 60 % de los ciudadanos croatas responderán con un «sí» a la pregunta de si «desean que Croacia entre en la UE», mientras los «noes» oscilan entre un 28 y 33 %. Si los ciudadanos croatas secundan hoy que su país se convierta en el miembro número 28 de la UE, seguirá el proceso de la ratificación del Tratado en los 27 países miembros, y según está previsto, Croacia entrará en la gran familia comunitaria el 1 de julio de 2013.
Durante veinte años desde el reconocimiento de la independencia de Croacia, la deuda externa de este país se ha incrementado 20 veces, según los medios de comunicación croatas.
A principios de 1992. Croacia salió de Yugoslavia con una deuda de menos de tres mil millones de dólares.
Posteriormente, la deuda creció hasta casi 60 mil millones de dólares y así superó a todo el producto interno bruto (PIB) croata.
En el año de la independencia cada ciudadano de Croacia debía 652 dólares. Ahora debe 13.953.
El cincuenta por ciento de los ciudadanos croatas que viven peor que el año pasado, y muchos atraviesan la situación financiera más difícil que hace veinte años.
Las cifras fueron publicadas el lunes, un día después de que Croacia celebró su 20 cumpleaños y cinco días antes de celebración de un referendum referéndum sobre la adhesión a la Unión Europea
El nuevo gobierno, se enfrenta con la muy delicada situación económica. Se prevé un aumento de precios generalizados lo que encarecería aun más la vida en Croacia. Como referencia hay que tener en cuenta que si llega a autorizarse el aumento del precio, el billete sencillo del transporte público en Zagreb podría alcanzar el precio de 2 €, muy por encima de muchas capitales europeas.
Los que más protestan son, curiosamente, los que más ganan, las empresas de telecomunicaciones extranjeras, que tendrán un nuevo impuesto de seis por ciento. Aunque sus ganancias se miden en miles de millones, el mensaje que enviaron al nuevo presidente del gobierno es bien sencillo «Tendremos que reducir plantillas».
El nuevo gobierno está negociando con bancos extranjeros para que se olviden del cobro de la parte de las deudas contraídas por las empresas que están en problemas. Al parecer, hay un estado de ánimo positivo, en estos casos los bancos se harían cargo de parte de la propiedad de esas empresas. Y muchos cortes esperan a todos aquellos que no sean capaces de soportar todos estos aumentos de precios. Así que los padres que por problemas económicos dejan de pagar la manutención de sus hijos podrían ser enviados a alguna de las obras públicas y el estado asumiría el pago de la pensión.
Las primeras estimaciones del nuevo gobierno indican que el 20 por ciento de los empleados de la administración pública podrían ser inmediatamente despedidos. Sin embargo, el número de parados ya ha crecido demasiado el año pasado, y si continúa así Croacia podría alcanzar un nuevo número récord de personas sin empleo.
Fuente: http://www.semanarioserbio.com/modules.php?name=News&file=article&sid=4273