El martes la agencia oficial de estadísticas de la Unión Europea (UE) publicó los datos sobre el desempleo en la eurozona. Grecia, como no podía ser de otro modo, salía muy mal parada en las estadísticas, ocupando la primera posición en cuanto al paro juvenil y siendo el país donde más aumentó el índice de […]
El martes la agencia oficial de estadísticas de la Unión Europea (UE) publicó los datos sobre el desempleo en la eurozona. Grecia, como no podía ser de otro modo, salía muy mal parada en las estadísticas, ocupando la primera posición en cuanto al paro juvenil y siendo el país donde más aumentó el índice de desempleo durante el último año.
Entre el mes de septiembre de 2012 y el mismo mes del año anterior el porcentaje de personas sin trabajo se incrementó en 7,1 puntos, hasta alcanzar al 26 por ciento de la población activa según los últimos datos oficiales. Una cifra que va camino de triplicar la media de los 27 países que componen la UE, y que es del 10,7 por ciento. Más dramáticos resultan aún los datos relativos a los jóvenes con un 57,6 por ciento de desempleados en la franja de edad hasta los 25 años.
Pero con ser grave, la situación no se resume en los datos proporcionados por las instituciones, pues el cálculo se realiza de forma abiertamente fraudulenta. Así, se contabiliza entre la población activa a quienes trabajaron al menos 1 hora durante el periodo computado y, por tanto, a las miles de personas con empleos a tiempo parcial en jornadas semanales de 1 o 2 días. Al mismo tiempo el número de parados solo hace referencia a quienes están inscritos en las oficinas de empleo, y no se hallan realizando ningún curso de formación o reciclaje.
De modo que un buen número de parados de larga duración, que ya desistieron de renovar su tarjeta de desempleo, los miles de trabajadores despedidos que aún no formalizaron su situación y una parte de los jóvenes, incapaces de confiar en un estado que parasita los escuálidos ingresos de las clases populares, no cuentan en el cómputo de quienes demandan un empleo. Atendiendo a estos parámetros algunos analistas aseguran que el índice podría ser un 10 por ciento mayor que el recogido en los datos oficiales.
Pero aún hay más. La Agencia federal de Empleo de Alemania dio a conocer este lunes los datos relativos a los trabajadores inmigrantes procedentes de países europeos. Durante el pasado año 123.000 griegos (un 2,4% de la población activa) fueron contratados en Alemania, lo que marca un aumento del 11% con respecto al año anterior solo en este país. ¿Cuántos más abandonaron Grecia hacia otros destinos en busca de un sustento?
El agravamiento de la crisis en la eurozona es un hecho, como lo es el empeoramiento de la situación en Grecia por mucho que las instituciones financieras internacionales (FMI, BCE…), el primer ministro heleno Antonis Samarás y sus palmeros aseguren que en 2013 se verá el final de la recesión. Las criminales políticas de austeridad no solo desmantelan los derechos sociales y los servicios públicos, además están dejando sin ingresos o en la calle a la clase trabajadora, esquilmándola con impuestos cada día más abusivos, y todo ello bajo la mascarada del dogma neoliberal de reducir el déficit público y los niveles de la deuda.
Bien al contrario, en 2013 Grecia vivirá una profundización de la recesión económica y una crisis social sin precedentes. La guerra está servida.
Antonio Cuesta es corresponsal en Grecia de la agencia Prensa Latina. Su blog de noticias es: http://deatenas.tumblr.com/
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