Nicaragua ha sufrido durante este martes 17 un nuevo huracán, se le ha dado el nombre de IOTA, alcanzó la categoría 5 con vientos de 260 km por hora descargando granizo y lluvias torrenciales y se movía a 15 km por hora mientras desde su ojo, que medía 15 millas náuticas de ancho estallaba en truenos y relámpagos como no se había visto nunca.
El huracán entró en territorio nicaragüense por el Noroeste para continuar por el Este de Honduras. En Nicaragua ha dejado 6 personas muertas y una gran destrucción de puentes, carreteras, poblaciones, medios de producción y campos de labor.
Desde hace más de 10 años el Gobierno Sandinista viene trabajando con la población para que el nivel de protección sea el óptimo a la hora de hacer frente a semejantes fenómenos, y sea capaz de protegerse de modo seguro. Para ello se necesita preparación organizativa a todos los niveles desde la familia, la comunidad, la administración, y plena coordinación con todas y cada una de las áreas de gobierno para de esta manera guardar con total seguridad la vida humana. Por eso el país, todo el pueblo, participa 4 veces al año en movilizaciones masivas de prevención. Nicaragua, debido a su exposición a los huracanes y a las amenazas volcánicas, de terremotos, tsunamis y otros fenómenos naturales lleva a cabo todo tipo de ejercicios de protección, ejercicios en los que el pueblo es el protagonista, trabajo que unicamente puede realizarse cuando existe una relación de confianza profunda en todo el cuerpo social de la base a lo más alto.
La Vicepresidenta Rosario Murillo, en representación del Gobierno de Unidad Nacional, expresó sus profundas condolencias y añadió: Siempre hemos insistido: cuidémonos, cumplamos con las instrucciones, resguardemos la vida, y lo decimos ahora otra vez a la luz de este dolor, el dolor que es albergado en el corazón de estas familias en estas comunidades, en Jinotega, en Wiwilí, Nueva Segovia, en Wamblán… A todos ellos el abrazo de nuestro Comandante. Nos entristece cada uno de esos hermanos, hermanas que perdemos en estas circunstancias que son trágicas. Nos duelen esas vidas y tenemos que insistir, cuidémonos hermanos, protejamos la vida y tomemos en serio todas las indicaciones. Si ya estamos albergados para qué vamos a salir, si se ha dicho que nos protejamos en las casas para qué vamos a salir, y cuidarnos, cuidarnos en general, eso es lo que impone esta situación que nos convoca a todos a actuar como ciudadanos responsables, conscientes, eficaces y a toda la institucionalidad, el estado, el gobierno, a proteger, avanzar a resguardar y luego también a restaurar hasta donde es posible hacerlo de inmediato. A todos ellos nuestro abrazo. Compañeros el peligro no ha pasado, el huracán salió de nuestro territorio, pero está en Centroamérica y las lluvias siguen y los peligros ahí están y grandes destrozos en parte del territorio nacional. Las pérdidas humanas son siempre lo más doloroso. Ha transcurrido un día de múltiples desafíos. Un día difícil, pero un día en el que aprendemos, aprendimos, seguimos aprendiendo y sobre todo asumiendo nuestras responsabilidades de cara a las consecuencias desastrosas, catastróficas en términos materiales.
El doctor Guillermo González, Codirector de SINAPRED (Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención a Desastres) advirtíó de la mayor frecuencia con que se producen huracanes en Centroamérica, antes eran de 3 a 4 importantes en una década ahora estamos teniendo cada vez con más frecuencia y con mayor intensidad debido al cambio climático. Insistimos: la política de gestión de riesgos es una prioridad de la política del gobierno, un elemento que tiene que ver con los aspectos de desarrollo y es parte el tener preparadas las condiciones, elevar la resistencia que debe tener la sociedad, la actividad económica para poder enfrentar los temas de desarrollo.
Se subraya que el modelo del Gobierno nicaragüense del FSLN es de presencia directa y organización, atención, mitigación, prevención entre las familias, los hogares y las comunidades, y tiene que seguir perfeccionándose.. El doctor González terminó diciendo: Ese es el desafío, ese es el reto.
Una semana antes los órganos de gobierno de todo el país se mantenían en vídeo conferencia y se ubicó cada lugar en prevención de desastres, y desarrollaron sus acciones más importantes para salvaguardar la vida de la población ante la llegada del IOTA desplegando 236.654 brigadistas; dispusieron 626 albergues, a los que se sumaron casas solidarias, iglesias y otras instalaciones seguras; dieron refugio a 61.196 personas; trasladaron toneladas de ayuda humanitaria a las zonas afectadas; y mantuvieron la alerta roja en el Caribe Norte y el Triángulo minero, y la alerta amarilla en el resto del país.