El 10 de diciembre del 2021, el total de dosis de vacunas compradas en el mundo superaba los 15.903 millones, sin embargo, menos del 50% de la población adulta a nivel mundial cuenta con un esquema de vacunación completo contra el COVID-19 debido al acceso desigual a las vacunas.
Según la la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) al cierre del mes de agosto del año 2020 más del 39% de las vacunas comprometidas mediante contratos bilaterales se concentraban en un grupo de países desarrollados, que comprende solo el 12,9% de la población mundial. La Unión Europea había adquirido el 23,85% de las vacunas con el 5,7% de la población mundial, EE.UU. concentraba el 10,7% de las compras de vacunas con el 4,3% de la población mundial, igualmente ocurría con Reino Unido y Japón quienes concentran el 3,5% y 2,7% de las vacunas comprometidas y solo poseen 0,9% y 1,6% de la población mundial respectivamente.[1]
Actualmente, el acceso a desigual a las vacunas también es un grave problema para América Latina y el Caribe, al 31 de agosto del año 2021 solo el 24,8% de la población había sido vacunada. La CEPAL estima que solo 10 países de la región probablemente logren vacunar al 70% de su población a mediados del 2022, 9 países a finales del 2022 y los 14 países restantes lograran vacunar el 70% de su población en el año 2023. Esta situación, sin duda agudizaría aún más la crisis económica y social derivada de la pandemia en la región[2].
Comercio internacional de productos farmacéuticos
En la actualidad, la industria farmacéutica mundial está dominada por un oligopolio de empresas con casas matrices en los Estados Unidos, Suiza, el Reino Unido, Alemania y Francia, solo en el año 2019 EE.UU. concentró la mitad de las ventas mundiales de la industria[3]. En consecuencia, durante las últimas dos décadas la región latinoamericana y caribeña ha incrementado su dependencia de las importaciones de productos farmacéuticos estadounidenses y europeos. Sin embargo, desde el inicio de la crisis sanitaria derivada de la pandemia, tanto EE.UU. como Europa limitaron el acceso a las vacunas y medicamentos capaces de contener la propagación del coronavirus.
Esta situación provocó que los países de la región recurrieran a proveedores no tradicionales como China, Rusia e India para la importación de vacunas, suministros médicos, desinfectantes, consumibles médicos, kits de prueba, instrumentos, aparatos para diagnóstico, entre otros. Durante el año 2020 Brasil importó más de 8.579 millones de dólares en suministros médicos para la Covid-19, de los cuales: 1.852 millones de dólares (22%) provenían de EE.UU, 1.628 millones de dólares (19%) de China, 1.176 millones de dólares (17%) de Alemania, 540 millones de dólares de Suiza (6%), entre otros países de origen.
Brasil incrementó las importaciones de suministros médicos proveniente de China en 134% entre el año 2019 y 2020, mientras que con EEUU y Alemania se redujeron 14% y 13% respectivamente, posicionando al país asiático como el segundo socio comercial del país latinoamericano en este rubro.
Además, en el año 2020 Brasil se convirtió en el cuarto mayor importador de vacunas, kits prueba, instrumentos, aparatos para diagnóstico del Covid-19 de la República de Popular China a nivel mundial[4].
Foro-China CELAC y la cooperación Sanitaria (2022-2024)
El pasado 22 de octubre del año 2021, la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) presentó un Planestratégico para alcanzar la autosuficiencia sanitaria de la región, con el objetivo de atender la crisis y fortalecer las capacidades de producción y distribución de vacunas y medicamentos[5].
Entre los actores de este plan destaca la Organización Panamericana de la Salud (OPS) organismo encargado de la adquisición de vacunas mediante el mecanismo COVAX a través de un Fondo Rotatorio para vacunas. No obstante, el acceso desigual a las vacunas que denuncian los países de la región, en parte se debe al débil funcionamiento del mecanismo COVAX[6].
Por otro lado, el plan de autosuficiencia sanitaria también destaca experiencias exitosas de cooperación para la producción de vacunas entre la República Popular China y Brasil a través del Instituto Butantan y las empresas (Coronavac – Sinovac) donde se han producido 94,8 millones de dosis al mes de agosto del año 2021. Asimismo, el laboratorio chino Sinovac anuncio que instalará una planta de vacunas en Chile en el 2022.[7]
Posteriormente, el pasado 13 de diciembre fue publicado un nuevo Plan de Acción Conjunto de Cooperación en Áreas Claves China-CELAC (2022-2024) donde en materia de cooperación sanitaria, China propone a la CELAC la posibilidad de acceder a los préstamos especiales Anti-Epidemia para apoyar la construcción de infraestructura de salud pública en sus respectivos países, así como, asistencia técnica para fortalecer los sistemas de salud primaria de los países[8].
Aunque China no es un proveedor tradicional de vacunas, medicamentos y suministros médicos de los países latinoamericanos y caribeños, durante la pandemia del Covid-19 se ha posicionado como el principal socio comercial de muchos países de la región, demostrando su solidaridad durante la crisis sanitaria. En este contexto, es vital incorporar al Foro China-CELAC como uno de los actores principales del plan estratégico que coordina la CELAC para superar conjuntamente la crisis económica y social derivada de la pandemia, alcanzar la autosuficiencia sanitaria que necesita la región y consolidar la cooperación sanitaria que demanda la construcción de un futuro compartido entre China y América Latina y el Caribe.
Notas:
[1] Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), sobre la base de Duke Global Health Innovation Center, “Launch and Scale Speedometer”, 2020 https://launchandscalefaster.org/COVID-19 [fecha de consulta: 18 de diciembre 2021]
[2] Lineamientos y propuestas para un plan de autosuficiencia sanitaria para América Latina y el Caribe https://www.cepal.org/es/publicaciones/47252-lineamientos-propuestas-un-plan-autosuficiencia-sanitaria-america-latina-caribe [fecha de consulta: 13 de diciembre 2021]
[3] Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), sobre la base de datos de Statista, agosto de 2021.
[4] Cálculos del CCI basados en estadísticas de UN COMTRADE hasta diciembre 2020.
[5] Lineamientos y propuestas para un plan de autosuficiencia sanitaria para América Latina y el Caribe https://www.cepal.org/es/publicaciones/47252-lineamientos-propuestas-un-plan-autosuficiencia-sanitaria-america-latina-caribe [fecha de consulta: 14 de diciembre 2021]
[7] El ministro de Salud, Enrique Paris, valoró hoy el anuncio por parte de ejecutivos del laboratorio Chino Sinovac de invertir en Chile y construir una planta para la producción de vacunas https://www.gob.cl/noticias/ministro-de-salud-valora-anuncio-de-laboratorio-chino-sinovac-de-instalar-una-planta-de-vacunas-en-chile/ [fecha de consulta: 18 de diciembre 2021]
[8] Plan de Acción Conjunto de Cooperación en Áreas Claves China-CELAC (2022-2024) http://www.chinacelacforum.org/esp/ [fecha de consulta: 15 de diciembre 2021]
Aymara Gerdel es candidata a PhD en Public Policy de la School of Government de la University of International Business and Economics (UIBE) y Máster en Economía por la UIBE. Directora del Centro Venezolano de Estudios de China (CVEC), profesora de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad Central de Venezuela (UCV), especialista en Gobierno y Políticas Públicas de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas de la UCV y licenciada en Ciencias Estadísticas de la UCV.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso de la autora mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.