La Policía Judicial de Ecuador detuvo ayer a cuatro personas, tres de ellas colombianas, sospechosos de planear un supuesto atentado contra el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, según informaron medios locales recogidos por Europa Press. Los cuatro detenidos, uno de ellos perteneciente al grupo paramilitar colombiano de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), fueron arrestados con […]
La Policía Judicial de Ecuador detuvo ayer a cuatro personas, tres de ellas colombianas, sospechosos de planear un supuesto atentado contra el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, según informaron medios locales recogidos por Europa Press.
Los cuatro detenidos, uno de ellos perteneciente al grupo paramilitar colombiano de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), fueron arrestados con orden de prisión preventiva, y puestos a disposición de un juez para interrogarlos.
Al parecer, los sospechosos, que están siendo investigados por las autoridades del país, tenían en su poder fotografías con diferentes ángulos del palacio de Gobierno y croquis de las calles cercanas para detallar el atentado.
‘En principio, sabemos que es un atentado contra la seguridad de Estado (…) Habría gente contratada para atentar contra el presidente de la República ayudados con personas de Ecuador’, dijo el fiscal Washington Pesántez.
De acuerdo con la justicia de ese país los detenidos corresponden a las iniciales de O.P.H, O.J.O, É.G.N y S.C, este último de origen ecuatoriano.
Al respecto, el ministro de Seguridad Interna de Ecuador, Gustavo Larrea, dijo a Caracol Radio que el trabajo de inteligencia permitió llevar a cabo la detención de estas personas. De igual forma, aclaró que no tiene pruebas de que los detenidos sean paramilitares, al igual que dijo desconocer la información publicada por la agencia Anncol, afín a las FARC, donde se asegura que quieren asesinar al presidente Correa.
Larrea señaló que se le ha pedido a la Policía de Colombia información sobre los tres colombianos para establecer los antecedentes judiciales de cada uno de ellos.
Larrea insistió en Caracol Radio que se hizo un trabajo de inteligencia durante varios días para determinar que efectivamente estaban planificando un atentado contra el presidente Correa, quien, a su vez, fue informado del intento de atentado.
No descartó, sin embargo, que haya personas interesadas en seguir distanciando a los Gobierno de Colombia y Ecuador, precisamente en momentos que se están mejorando las relaciones.
Además, el vicepresidente ecuatoriano, Lenin Moreno, dijo a Reuters que cuatro hombres ‘fueron financiados por personas que no saben cómo vivir en democracia’. ‘Lo que hay que hacer es detenerlos’, agregó.
COMPLOT CONTRA LOS MANDATARIOS
Correa, un líder nacionalista que abandera una reestructuración política y económica del país, denunció el año pasado que grupos no identificados intentaron comprar cohetes para atentar contra su vida, aunque nunca fue confirmado oficialmente.
Tras estas denuncias, el Gobierno ha intensificado las medidas de seguridad para proteger al mandatario y a su familia, y creó una fuerza de seguridad especial para tal tarea.
Otros líderes izquierdistas de la región, como el presidente venezolano, Hugo Chávez, han alertado de conspiraciones para desestabilizar a los ‘Gobiernos revolucionarios socialistas’ que lideran un cambio en la región.
Chávez, un cercano aliado de Correa, suele denunciar planes de Estados Unidos para asesinarlo e invadir Venezuela, y este año aseguró que militares y funcionarios colombianos estarían participando en un complot fraguado por la Casa Blanca.
También el mandatario boliviano, Evo Morales, ha asegurado que existen complots en su contra para derribar su Gobierno y frenar la agenda de cambios sociales y pro indigenistas.